"El 40% de la poblaci¨®n de Irak puede poner una denuncia"
"No hay forma humana de compensar al enorme n¨²mero de v¨ªctimas causadas por el r¨¦gimen de Sadam Husein", declara Sandy Hodgkinson, m¨¢xima responsable de Derechos Humanos de la Autoridad Provisional de la Coalici¨®n (CPA). Su peque?a oficina del Centro de Convenciones se ocupa de una de las tareas clave para la reconciliaci¨®n de Irak: documentar los cr¨ªmenes de Sadam y ayudar a encontrar una f¨®rmula para que, una vez reconocidos, queden atr¨¢s y los iraqu¨ªes puedan mirar hacia el futuro. Hodgkinson cifra en 300.000 los asesinados por la dictadura.
"Nuestra tarea inicial no era compensar o abrir causas criminales, simplemente escuchar y documentar", explica Hodgkinson, "pero mucha de la gente que acude a nosotros busca una reparaci¨®n, aunque no sabe a qui¨¦n reclamar o cu¨¢nto". Las denuncias son tambi¨¦n m¨²ltiples. Desde las ejecuciones sumarias y las torturas hasta la confiscaci¨®n de propiedades. "Seg¨²n los casos que consideremos, podemos estar hablando de entre 2 y 10 millones de personas, hasta el 40% de los 26 millones de habitantes", cuantifica esta abogada brit¨¢nica para dar una idea de la magnitud de la tarea.
"Tendr¨¢ que haber una combinaci¨®n de justicia, reconciliaci¨®n y apoyo a las v¨ªctimas"
"Tendr¨¢ que haber una combinaci¨®n de justicia -con el enjuiciamiento simb¨®lico de altos responsables-, proceso de reconciliaci¨®n y apoyo a las v¨ªctimas", concluye Hodgkinson. "No hay elecci¨®n cuando hay tantos afectados y en tan poco tiempo". Precisamente, Amnist¨ªa Internacional ha criticado que el estatuto para el futuro Tribunal de Cr¨ªmenes de Guerra (que a¨²n no se ha hecho p¨²blico) establezca l¨ªmites temporales entre 1968, fecha del golpe de Estado que llev¨® al poder al Partido Baaz, y el 1 de mayo de 2003, cuando George W. Bush dio por concluidos los combates principales y se inici¨® la ocupaci¨®n formal de Irak.
S¨®lo en ese periodo, Hodgkinson estima en 300.000 los asesinados por la dictadura, tal como revel¨® durante un reciente cursillo para entrenar a decenas de iraqu¨ªes a encontrar y proteger fosas comunes. "El n¨²mero de 300.000 lo hemos sacado de lo que nos dicen los iraqu¨ªes y lo que parece razonable; muchos grupos est¨¢n de acuerdo, aunque algunas ONG extranjeras la han elevado a 500.000", explica la abogada. En esa escalofriante cifra se incluyen 180.000 kurdos exterminados durante la Operaci¨®n Anfal, el gaseo de la poblaci¨®n de esa etnia entre febrero y noviembre de 1988 y, al menos, 60.000 chi¨ªes liquidados tras el levantamiento de 1991.
"Son las grandes matanzas, pero hay muchas m¨¢s", admite Hodgkinson. En el caso de los kurdo sresulta m¨¢s f¨¢cil, porque la semiautonom¨ªa que disfrutan desde el fin de la guerra del Golfo les ha permitido guardar registros e investigar. "Sabemos que no encontraremos todos los esqueletos, dado que muchos ni siquiera fueron enterrados, los aplastaban con apisonadoras y se convirtieron en polvo", dice. En el caso de los chi¨ªes, "a¨²n no hemos visto documentos, pero muchas veces no hay pruebas escritas, s¨®lo ¨®rdenes verbales, si bien al final siempre se terminan encontrando testigos que llenan el vac¨ªo". "?Y qui¨¦n sabe cu¨¢ntas fosas m¨¢s vamos a encontrar?".
Frente a la mera compensaci¨®n econ¨®mica a las v¨ªctimas, la oficina de Justicia de Transici¨®n y Derechos Humanos trata de promover la idea de mecanismos de reconciliaci¨®n que vayan m¨¢s en la l¨ªnea de la reparaci¨®n moral y colectiva. Para ello, est¨¢n trabajando con las ONG locales de derechos humanos y proponi¨¦ndoles servicios de orientaci¨®n y ayuda, becas, pensiones parciales o programas de formaci¨®n profesional para viudas, una experiencia que ya se prob¨® con ¨¦xito en el norte del pa¨ªs tras la Operaci¨®n Anfal.
"Si se consigue dinero, debe ir para esos servicios", defiende Hodgkinson. De momento, el ministro provisional del ramo, Abdulbasit Turki, ya habl¨® en la reciente Conferencia de Donantes de Madrid de establecer un fondo de compensaci¨®n para las v¨ªctimas con ese objetivo.
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