Italia considera que su presidencia de la UE no ha sido un fracaso

El Gobierno italiano no siente ninguna sensaci¨®n de fracaso en sus ¨²ltimas jornadas de presidencia europea. Al contrario, considera que ha conseguido avances importantes en materia de defensa, que ha trabajado bien frente al problema de la inmigraci¨®n ilegal y que ha desatascado la designaci¨®n de las sedes de varias agencias de la UE. El fiasco constitucional de la cumbre de Bruselas era "previsible" y el desencaje del pacto de estabilidad, "inevitable", seg¨²n un alto cargo de la Administraci¨®n de Silvio Berlusconi, para el que resulta "absurdo" cargar responsabilidades sobre Italia.
Por otra parte, en el semestre de Berlusconi se han acumulado en cantidad ins¨®lita incidentes diplom¨¢ticos, malentendidos y enfrentamientos con la Comisi¨®n. El presidente del Gobierno italiano y los suyos atribuyen esos desajustes a la rivalidad pol¨ªtica y enemistad personal entre Berlusconi y Romano Prodi, a los prejuicios de la prensa y, en general, a la falta de comprensi¨®n ajena. Se ha comprobado una vez m¨¢s, en cualquier caso, que el peculiar estilo de Silvio Berlusconi resulta efectivo para una parte sustancial del electorado italiano, pero no es exportable.
La presidencia italiana ha tenido problemas de fondo y problemas de forma. Los de forma son atribuibles a la personalidad del empresario-pol¨ªtico que dirige Italia: hizo una broma sobre un presunto amante de su esposa en rueda de prensa con el primer ministro dan¨¦s; llam¨® "capo de campo de concentraci¨®n" a un europarlamentario alem¨¢n... Se podr¨ªa elaborar una larga lista. "Es cierto, Berlusconi no es pol¨ªticamente correcto, habla un lenguaje que entiende el hombre de la calle; por otro lado, la prensa airea sistem¨¢ticamente cualquier broma de Berlusconi, y no habla jam¨¢s de los chistes privados del canciller Gerhard Schr?der, mucho m¨¢s groseros", se queja un asesor del primer ministro.
Problemas de fondo
Los problemas de fondo derivan fundamentalmente de dos factores: la ambici¨®n diplom¨¢tica de Berlusconi, empe?ado en conseguir para Italia un papel destacado en la escena mundial, y el escaso entusiasmo europe¨ªsta de la Liga Norte, partido miembro de la coalici¨®n conservadora en el Gobierno. Umberto Bossi, l¨ªder de la Liga y uno de los hombres fuertes del Gobierno, se declar¨®, por ejemplo, extremadamente satisfecho por el fracaso de la cumbre de Bruselas y por la ruptura del pacto de estabilidad. Giulio Tremonti, el ministro de Econom¨ªa, es un hombre cercano a Bossi.
Berlusconi privilegia las relaciones personales por encima de las institucionales y George Bush, Vlad¨ªmir Putin y Ariel Sharon son para ¨¦l los tres pilares sobre los que construir "una Italia que cuente en el mundo". Cuando defendi¨® la pol¨ªtica rusa en Chechenia en presencia de unos atribulados Romano Prodi y Javier Solana, y cuando habl¨® en favor del muro cisjordano del Gobierno israel¨ª pese a la clara oposici¨®n de la UE al mismo, Berlusconi ten¨ªa muy claras sus prioridades.
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