Un alcalde comunista franc¨¦s quiere cerrar las mezquitas de su ciudad

La noticia tiene su punto de inter¨¦s religioso / pol¨ªtico: Andr¨¦ Guerin, alcalde comunista de Venissieux, una ciudad de la periferia industrial de Ly¨®n con m¨¢s de 80.000 habitantes, ha pedido el cierre de las mezquitas que funcionan en bodegas y bajos de inmuebles. No pretende dejar sin lugares de culto a la religi¨®n de casi el 50% de los vecinos de su localidad, sino cerrar los focos del islam integrista y conseguir del Estado que construya mezquitas situadas "bajo la autoridad de la Rep¨²blica".

El dato es todo un s¨ªntoma del sentimiento de angustia de buena parte de la Francia profunda sobre el fracaso de la integraci¨®n. Ayer mismo se conoci¨® el proyecto de ley destinado a prohibir los signos religiosos en la escuela y, por incomprensible que parezca en otros pa¨ªses, no ha suscitado m¨¢s pol¨¦mica pol¨ªtica que la de discutir hasta d¨®nde debe llegar la prohibici¨®n: si deben vetarse s¨®lo los signos "ostensibles", como dice el proyecto de ley (lo cual apunta un margen de tolerancia) o si la prohibici¨®n debe ser radical, para todo signo "visible" de pertenencia a una comunidad religiosa, como reclama gran parte de la izquierda.

Lo sucedido en Venissieux es doblemente parad¨®jico. En este lugar de la periferia de Ly¨®n se prepar¨® la marcha de j¨®venes ¨¢rabes que recorri¨® el pa¨ªs hace 20 a?os, reivindicando la integraci¨®n de las generaciones emanadas de la inmigraci¨®n. Un joven magreb¨ª herido por la polic¨ªa y un cura cat¨®lico de la ciudad idearon una "larga marcha" inspirada en Gandhi y Martin Luther King, que recorri¨® 1.300 kil¨®metros por Francia, exigiendo de medidas prointegraci¨®n.

Guant¨¢namo

Pero todo eso qued¨® atr¨¢s y la realidad es hoy mucho m¨¢s dura. Precisamente dos vecinos de la localidad, Mourad Benchellali y Nizar Sassi, se encuentran entre los capturados por las tropas de Estados Unidos en la base de Guant¨¢namo. Y el padre de uno de ellos, imam de una de las mezquitas en cuesti¨®n, ha sido detenido esta semana por la polic¨ªa francesa junto con su mujer y otro de sus hijos, en una redada de sospechosos de proporcionar combatientes al terrorismo.

En estas condiciones, el alcalde de Venissieux reclam¨® el cierre de los lugares de culto musulm¨¢n instalados en las bodegas y bajos de inmuebles, al d¨ªa siguiente de la redada. "Me felicito de este procedimiento judicial", dijo el alcalde. "La vida de nuestros barrios est¨¢ corro¨ªda por ese movimiento [el fundamentalismo isl¨¢mico] que manipula con el oscurantismo y la violencia, y que se alimenta de los tr¨¢ficos m¨¢s nauseabundos". Estas palabras tan claras proceden de un hombre con fama de ortodoxo en su grupo pol¨ªtico, uno de los pocos que conserv¨® el Ayuntamiento para el PCF en las municipales de 2001, marcadas por un desalojo masivo de alcaldes de izquierda.