Un lujo de ausencias

Recibir al Madrid sin Xabi Alonso, sin De Pedro y sin Aranzabal, tres jugadores de la cantera, insustituibles hasta hace bien poco, muy identificados con su afici¨®n y bien dotados para su profesi¨®n, es asumir demasiados riesgos, confiar mucho en la fortaleza emocional con que la Real Sociedad afronta este tipo de encuentros y abandonarse en exceso a la complacencia del rival.

El t¨¦cnico del equipo donostiarra, el franc¨¦s Raynald Denoueix, prescindi¨® de tres futbolistas internacionales -la ausencia de Westerveld estaba justificada por razones f¨ªsicas- en un ejercicio de valent¨ªa temeraria, en la creencia de que ganar una semana antes en M¨¢laga (sin jugar una pizca al f¨²tbol, las cosas como son) allana la victoria en la siguiente jornada.

Se supon¨ªa que contra el que era hasta ayer el l¨ªder de la Liga, contra el todopoderoso Real Madrid, eso no vale; hay que demostrarlo sobre el campo. Y sobre el c¨¦sped no estaban tres de las principales piezas del conjunto txuriurdin.

Pero le sali¨® de vicio la jugada al franc¨¦s. Denoueix no debi¨® tomar ayer como referencia el juego apabullante desplegado por su equipo en la pasada temporada, en la que venci¨® 4-2 al conjunto madridista, una goleada que lleg¨® gracias a uan puesta en escena extraordinbaria.

Entonces, la soberbia actuaci¨®n de Xabi Alonso condujo a los donostiarras a una victoria recordada tambi¨¦n por la facilidad con que De Pedro y Aranzabal rompieron al adversario por la banda izquierda. Media hora tard¨® aquella Real en demolar al Madrid, al que en ese corto periodo de tiempo le hizo tres goles como tres soles.

El f¨²tbol madridista de ayer ech¨® en falta, y de qu¨¦ manera, a Beckam (lesionado) y el de la Real, hasta que Denoueix opt¨® por darle la oportundiad, a Xabi Alonso, dos exquisitos de la organizaci¨®n y la visi¨®n del juego.

Por eso ayer, en Anoeta no hubo referencias en el centro del campo. La Real se limit¨® a recuperar el esp¨ªritu combativo que emplea en las grandes ocasiones, y el Madrid esper¨® sin disimulo una oportunidad, de esas que no suele fallar, sin exponer lo m¨ªnimo. Pero fall¨® el Madrid. Y no lo hizo la Real gracias a un centro bombeado de Nihat desde la izquierda que Casillas despej¨® de mala manera y que Karpin aprovech¨®. Dec¨ªa el portero madridista en la v¨ªspera que todos los elogios recibidos por su partido en Eibar se pod¨ªan cambiar por cr¨ªticas si, por ejemplo, fallaba en alguna salida. Y fall¨® en tres, la tercera de las cu¨¢les fue aprovechada por la Real.