"S¨®lo nos queda salvar el orgullo"

La renovada selecci¨®n espa?ola de balonmano, hundida. La derrota ante Dinamarca, que marc¨® el final de la primera fase del Campeonato de Europa, ha dejado un p¨¦simo sabor de boca a j¨®venes y veteranos. "Perder es siempre una v¨ªa de agua que se cuela en el barco", reconoce C¨¦sar Argil¨¦s, el t¨¦cnico; "el equipo est¨¢ disgustado. Sabe que no perdi¨® por un gran juego dan¨¦s, sino por la terrible elecci¨®n de los disparos que hizo la primera l¨ªnea. Eso te condena a muerte".

Una simple ojeada a las estad¨ªsticas determina hasta qu¨¦ punto se equivocaron los lanzadores: Alberto Entrerr¨ªos marc¨® dos goles de 14 intentos; su hermano, Ra¨²l, uno de cinco, Romero dos de 14, y Belaustegui, el mejor, siete de 14. "Tuvieron un d¨ªa p¨¦simo", dice de sus compa?eros el portero Barrufet; "no supieron abrir el campo y buscaron siempre el uno contra uno frontal, lo que permiti¨® a los daneses cerrarse y no dejar espacios. Era como tirar contra una pared. La segunda l¨ªnea ni parec¨ªa existir. Y as¨ª no se puede jugar".

El mismo Romero asumi¨® haber jugado uno de sus peores partidos. "Lo ¨²nico que queremos ahora es salvar un poco nuestro orgullo personal", advierte el lateral del Barcelona; "no queremos echar por la borda el buen trabajo realizado durante un a?o, aunque sabemos que el pol¨¦mico punto que nos quitaron ante Croacia y el mal encuentro ante Dinamarca casi nos han cerrado las puertas de las medallas".

La recuperaci¨®n no puede dilatarse. Hoy deben ganar a Suiza y luego a Rusia y Suecia. Pero ni eso bastar¨ªa. Har¨ªan falta varias carambolas para poder aspirar al podio. "Lo peor", apunta Barrufet, "ser¨ªa que no entr¨¢ramos ni en la lucha por la s¨¦ptima plaza [entre los cuartos de cada grupo]. Significar¨ªa irse directamente a casa".

Ganar los pr¨®ximos tres partidos se plantea como algo muy complicado. Pero, m¨¢s que eso, Espa?a aspira a recuperar el equilibrio. "Habr¨ªamos firmado recibir s¨®lo 24 goles contra Dinamarca", explica Barrufet, que efectu¨® 19 paradas (un 45%); "en la defensa funcionamos. Pero el ataque, que hab¨ªa estado bien ante Croacia y Portugal, no tuvo su d¨ªa. A este ataque le falta asentarse, coger confianza. No importa que no salgan las primeras ofensivas o los primeros lanzamientos. Hay que seguir luchando".

Argil¨¦s concluye: "Lo peor para la gente nueva es desaprovechar estas oportunidades de enfrentarse a los mejores con dureza y seriamente. Y si alguien cree que hay m¨¢s jugadores que ¨¦stos para el futuro, al margen de los tres o cuatro que podemos recuperar para los Juegos Ol¨ªmpicos de Atenas, que me diga d¨®nde. Pero pienso que deben crecer a¨²n mucho".