El apagafuegos conciliador

"Ha logrado lo incre¨ªble: que podamos pelearnos a gusto, sin miedo a los divorcios definitivos". Felipe Alcaraz, con su tradicional iron¨ªa, resume as¨ª el principal m¨¦rito que se reconoce a Gaspar Llamazares y al "nuevo ambiente" en Izquierda Unida: la pacificaci¨®n de una federaci¨®n acostumbrada a eternas divisiones y subdivisiones, que casi siempre acababan en expulsi¨®n. Las diferencias no han desaparecido, pero a los discrepantes ahora se les integra en la direcci¨®n.

Llamazares es, seg¨²n sus detractores, e incluso sus ac¨®litos, un dirigente sin un especial carisma, lo que le ha forzado a colocar el discurso de IU por encima de su personalidad. Lejos quedan, para bien o para mal, seg¨²n los gustos, los tiempos de Julio Anguita. "La historia le juzgar¨¢", dice de ¨¦ste Francisco Frutos, candidato en las ¨²ltimas elecciones por la enfermedad del hombre al que se refiere, que dirigi¨® IU durante 12 a?os. Frutos se enfrent¨® a Llamazares en 2000 y perdi¨® por un voto, pero ahora, en la ¨²ltima asamblea, ha pactado con ¨¦l la nueva direcci¨®n. "A m¨ª me gustan los candidatos fuertes, que lancen mensajes claros, pero que no griten. Lo del carisma es relativo, porque Aznar tampoco lo ten¨ªa y mire d¨®nde est¨¢. Lo importante es que en IU ya no se discute sobre crisis. Han pasado muchos a?os desde el 97, cuando la expulsi¨®n de Nueva Izquierda. Ahora la gente debe reflexionar y llevar la protesta de la calle a las urnas", dice.

Es ah¨ª donde, seg¨²n sus defensores, Llamazares tiene sus mejores bazas. El coordinador ha estado en los ¨²ltimos tres a?os en todas las manifestaciones, peque?as o grandes, tanto sobre el Plan Hidrol¨®gico, como de los m¨¦dicos residentes, los estudiantes... "La gente sabe que Gaspar no va a la universidad s¨®lo en campa?a, como otros; ha estado all¨ª todo el tiempo, y eso tiene sus frutos", explica David Chica, responsable de Movimientos Sociales de IU. Es en los actos con j¨®venes donde el discurso, a veces encendido, y la cr¨ªtica feroz al PP de Llamazares suele tener m¨¢s ¨¦xito. Chica insiste: "Siempre est¨¢ en todas partes cuando se re¨²ne la gente con ganas de movilizarse; con Anguita eso no pasaba".

Jos¨¦ Francisco Mendi, uno de los dirigente m¨¢s cr¨ªticos con Anguita, al que le pidi¨® varias veces la dimisi¨®n, es ahora uno de los m¨¢s estrechos colaboradores de Llamazares. Reconoce que el nuevo l¨ªder no tiene la fuerza del anterior, pero cree que puede ser una ventaja: "El estilo de liderazgo carism¨¢tico ha pasado a la historia. Llamazares tiene un discurso muy pedag¨®gico. No da consejos ni doctrina, no rega?a a los electores como hac¨ªa Anguita. Es m¨¢s cercano". Entre los problemas, Mendi reconoce que las ganas de estar en todas partes, la necesidad de salir a toda costa en los medios de comunicaci¨®n a los que acusa de maltrato, le han generado un "exceso de ansiedad".

Mucho m¨¢s ¨¢cida se muestra ?ngeles Maestro, dirigente del sector cr¨ªtico, opuesto a Llamazares. "La talla pol¨ªtica de Julio Anguita est¨¢ a a?os luz de la de Llamazares. ?l tuvo valor para enfrentarse a los poderes establecidos. Llamazares, como antes Frutos, representa lo pol¨ªticamente correcto en IU, el acercamiento al PSOE con el ¨²nico inter¨¦s de entrar en los gobiernos".

Felipe Alcaraz es optimista respecto a las posibilidades de Llamazares, sobre todo porque el PSOE, que hab¨ªa coincidido con IU en la labor de oposici¨®n, "ha malbaratado todo su discurso de izquierdas al elaborar el programa. Se ha desmarcado de la pancarta". Adem¨¢s, dice, IU "ha abandonado el suicidio que supon¨ªa enfrentarse a todos, incluidos los sindicatos. Ya no somos gente de otro planeta. Por eso un candidato normal, como Llamazares, puede representar bien todo eso".