Dos lesbianas logran la patria potestad compartida de dos gemelas en Navarra
Una juez de Pamplona concede la adopci¨®n a la pareja de la madre biol¨®gica de las ni?as
Una pareja de lesbianas que vive en una localidad cercana a Pamplona ha conseguido, por primera vez en Espa?a, que una juez reconozca a las dos madres iguales derechos y deberes respecto a las ni?as que viven con ellas. El auto concede la patria potestad compartida a la compa?era de la madre biol¨®gica, quien tuvo a las dos gemelas hace menos de un a?o, fruto de un proceso de fecundaci¨®n asistida. Se trata de la primera aplicaci¨®n de la ley de parejas de hecho Navarra, recurrida por el PP, que reconoce a las parejas de gays y lesbianas el derecho a la adopci¨®n.
El auto de la juez Ana Clara Villanueva, del Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 3 de Pamplona, fue emitido el pasado 22 de enero. En ¨¦l se daban cinco d¨ªas para recurrir. "Como nadie lo ha hecho, la sentencia es firme", declar¨® ayer la abogada de la pareja, Asunci¨®n Compains.
Queda por saber qu¨¦ pasar¨¢ con las ni?as en caso de que el Tribunal Constitucional decida anular la ley de parejas navarra, que fue aprobada en julio de 2000 y recurrida poco despu¨¦s por 83 parlamentarios de Uni¨®n del Pueblo Navarro (la versi¨®n navarra del PP). "No creo que su situaci¨®n cambie", manifest¨® la abogada.
Las dos mujeres, de 38 y 42 a?os, forman una pareja estable desde hace siete a?os, y conviven desde 1999, seg¨²n el auto. Ya en 2000 acudieron a un centro de planificaci¨®n familiar. "En ese momento, se realiz¨® a ambas un informe de valoraci¨®n de pareja, cuyo resultado fue positivo en relaci¨®n a garantizar el buen desarrollo f¨ªsico, psicol¨®gico y social" de la posible criatura, indica la juez.
Segundo intento
La primera que se someti¨® a un proceso de fecundaci¨®n asistida fue la mujer que ahora ha visto reconocido su derecho a adoptar a las peque?as, pero no tuvo ¨¦xito. Entonces decidieron que probara su compa?era. El resultado fue el nacimiento hace menos de un a?o de las dos peque?as. "Las dos ya ten¨ªan en la cabeza la idea de la adopci¨®n cuando fueron a por las ni?as", dijo Compains. "Antes del embarazo ya hab¨ªan buscado informaci¨®n", a?adi¨®.
Para Compains la clave del proceso ha estado en que las dos mujeres "cumplen todos los requisitos de la ley de parejas estables de Navarra". "Su aplicaci¨®n era clara, aunque si se hubiera tratado de un hombre y una mujer el proceso hubiera sido mucho m¨¢s r¨¢pido", afirm¨®.
El caso no es una adopci¨®n conjunta, ya que no se trata de una pareja que decide hacerse cargo de un ni?o que no tiene relaci¨®n de filiaci¨®n con ninguno de los dos, explica la presidenta de la Federaci¨®n Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales, Beatriz Gimeno. "Se trata de la adopci¨®n de las hijas de uno de los miembros de la pareja por su compa?era; algo muy frecuente entre las lesbianas", indic¨®.
Tanto la presidenta de la federaci¨®n como el ex presidente, el concejal socialista en Madrid Pedro Zerolo, calificaron la sentencia de "hist¨®rica", e insistieron en que la sentencia "reconoce el inter¨¦s del menor". "Defiende su derecho a tener dos personas que le quieren y le cuidan. Se garantiza su estabilidad emocional y econ¨®mica, ya que la madre adoptiva debe pasarle una pensi¨®n para ayudar a mantener su nivel de vida, aunque la pareja se rompa. Tambi¨¦n se protege el derecho del ni?o a visitar a las dos personas que le han cuidado", indic¨® Gimeno.
La sentencia ha sido muy bien acogida por los partidos de la oposici¨®n, sobre todo IU, cuya ex diputada Isabel Arboni¨¦s fue quien present¨® el proyecto en el Parlamento foral, informa Mikel Muez. "Se aprob¨® gracias a que toda la oposici¨®n vot¨® unida contra el Gobierno, entonces en minor¨ªa, de UPN", recuerda ??igo Lamarca, presidente del colectivo de gays y lesbianas vasco Gehitu.
Las asociaciones gays Tri¨¢ngulo y Colegas unieron sus felicitaciones, y recordaron que el PP tambi¨¦n ha recurrido una iniciativa similar del Parlamento vasco y la ley de parejas asturiana porque permite el acogimiento compartido.
El nuevo Gobierno tripartito catal¨¢n ya ha anunciado su prop¨®sito de modificar su ley de parejas (la primera de Espa?a) para permitir la adopci¨®n.
Una decisi¨®n "por el inter¨¦s superior del ni?o"
Media docena de veces esgrime la juez Ana Clara Villanueva el inter¨¦s de las ni?as para justificar la sentencia en la que concede la patria potestad compartida de dos gemelas a su madre compartida y a la novia de ¨¦sta.
En seis apartados, la juez va respondiendo las alegaciones del fiscal. Sobre la posibilidad de aplicar la ley de parejas navarra, que permite la adopci¨®n conjunta por parejas homosexuales, cuando esta norma ha sido recurrida por un grupo de diputados del PP ante el Constitucional, la juez fija "el inter¨¦s superior del adoptando en relaci¨®n con el resto de las cuestiones planteadas acerca de la constitucionalidad de la norma". "El abordaje por parte del legislador navarro de la adopci¨®n por parejas no casadas con independencia de su identidad sexual entra dentro de sus competencias legislativas", a?ade la juez.
A partir de este punto, la juez arguye que la conclusi¨®n "no puede ser otra que la admisi¨®n de la adopci¨®n conjunta por quienes integran una uni¨®n libre de pareja, con independencia de la identidad sexual".
La magistrada tambi¨¦n se fija en la idoneidad de las dos mujeres (un requisito que se exige a todos los candidatos a adoptar), y cita los informes favorables de los estudios que se hicieron de ambas, tanto como pareja como a cada una por separado cuando fueron a una cl¨ªnica de fecundaci¨®n asistida del Gobierno navarro para intentar ser madres.
Claro que en este caso una de las dos mujeres,la madre biol¨®gica, no necesita adoptar a las ni?as. Pero "si el legislador navarro est¨¢ permitiendo la adopci¨®n conjunta por parejas homosexuales, dif¨ªcilmente se puede encontrar sentido a una exclusi¨®n por el compa?ero/a del padre o madre adoptivo", de la misma manera que la pareja masculina de una madre soltera, por ejemplo, puede adoptar a sus hijos.
Llegado hasta aqu¨ª, queda una cuesti¨®n por solventar: "la imposibilidad de [fijar] dos maternidades" en los registros. En este asunto la juez insiste en que para establecer una filiaci¨®n el juzgador debe analizar "la idoneidad del adoptante en relaci¨®n a la identidad del adoptando, y por tanto en su adecuaci¨®n para procurarle los cuidados y educaci¨®n necesarios para su desarrollo integral" por encima de cuestiones formales.
Al final, la conclusi¨®n es clara: "No puede sino entenderse que la realidad en la que conviven [las dos ni?as] desde el mismo momento de su nacimiento exige, desde su superior inter¨¦s, una correspondencia con la situaci¨®n jur¨ªdica manifestada por el reconocimiento de su filiaci¨®n con respecto a la solicitante", que no es otra que la novia de su madre biol¨®gica. Visto lo cual "se acuerda la adopci¨®n de las menores" por la demandante.
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