Schwarzenegger arremete contra los matrimonios gays

Era de esperar. Entre los v¨ªtores de sus colegas republicanos que el viernes por la noche se reunieron en convenci¨®n, el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, arremeti¨® contra las bodas gays de San Francisco. El actor metido a pol¨ªtico exigi¨® al fiscal general de su Estado que tome medidas legales para prohibir la celebraci¨®n de los matrimonios homosexuales, que en los ¨²ltimos 10 d¨ªas han unido a m¨¢s de 3.000 parejas del mismo sexo.

Como suele pasar en un sistema tan jurisprudencial como el estadounidense, las batallas pol¨ªticas, econ¨®micas, sociales e incluso morales acaban en los tribunales. Durante un discurso ante los suyos, Schwarzenegger, tras mantener una cierta discreci¨®n desde que empez¨® la pol¨¦mica, pidi¨® al fiscal general, Bill Lockyer, que tomara partido contra San Francisco. "Es hora de que la ciudad no siga con la peligrosa actitud de ignorar las leyes", dijo el gobernador. "Ahora el asunto debe resolverse en los tribunales".

Es m¨¢s complicado de lo que parece. Schwarzenegger no tiene poderes sobre el fiscal, un dem¨®crata nombrado por los electores. A lo sumo, le puede "sugerir" qu¨¦ acciones tomar. El gobernador, sin embargo, puede contar con el apoyo de muchos miembros del partido rival que est¨¢n en contra de estas bodas.

Desde un punto de vista legal, nada est¨¢ claro. Pese a las demandas interpuestas por asociaciones conservadoras, dos jueces se han negado a intervenir para interrumpir la celebraci¨®n de los matrimonios. Mientras, en una atrevida contraofensiva, la propia ciudad de San Francisco ha interpuesto una demanda contra California para legalizar estas uniones alegando la igualdad de derechos que garantiza su Constituci¨®n. En principio, los matrimonios homosexuales est¨¢n prohibidos desde hace cuatro a?os, desde que los californianos se pronunciaran contras las bodas gays en la llamada Propuesta 22.

?Qui¨¦n tiene raz¨®n? "La verdad es que miles de personas han visto reconocidas por primera vez sus relaciones", coment¨® el portavoz del alcalde de San Francisco, Gavin Newsom, el hombre que decidi¨® saltarse la prohibici¨®n. Pese a la iniciativa de Schwarzenegger, los republicanos se han mostrado bastante prudentes. ?sta es una cuesti¨®n muy delicada, especialmente en a?o electoral. Mientras, y sin saber si ser¨¢n finalmente reconocidas, las bodas contin¨²an.