IU quiere que la escuela p¨²blica sea obligatoria para hijos de pol¨ªticos

La mejor manera de garantizar que los gobernantes velan por los servicios p¨²blicos es, para Gaspar Llamazares, obligarles a usarlos. Por eso ayer el l¨ªder de IU propuso obligar por ley a que todos los cargos p¨²blicos lleven a sus hijos a la educaci¨®n p¨²blica y utilicen la sanidad estatal. "S¨®lo as¨ª estar¨¢n interesados en que funcionen bien", explic¨®. Sus asesores matizaron luego que no ser¨ªa por ley, ya que rozar¨ªa la inconstitucionalidad.

Descartada la ley, quedar¨ªa el recurso a la imposici¨®n de un c¨®digo ¨¦tico al que los cargos p¨²blicos se adherir¨ªan. Llamazares aprovech¨® que estaba en la comunidad valenciana, centro de recientes esc¨¢ndalos como el caso Fabra, para denunciar la corrupci¨®n y los pelotazos del PP.

Valencia es la ciudad de los grandes encuentros pol¨ªticos. Todos los partidos logran en esta ciudad una afluencia a sus m¨ªtines muy superior a la media. Izquierda Unida no es una excepci¨®n. Sin embargo, la multitudinaria acogida que esperaba ayer a Gaspar Llamazares en el Palau de la M¨²sica desbord¨® todas las expectativas.

Se qued¨® m¨¢s gente fuera de la sala, siguiendo el mitin y aplaudiendo ante una pantalla gigante, de la que logr¨® entrar. Hace cuatro a?os, cuando Francisco Frutos lleg¨® al mismo local, llen¨® el auditorio, pero nadie tuvo que seguir el acto a trav¨¦s de una pantalla desde la calle.

En total, m¨¢s de 2.000 personas siguieron el mitin, en directo o a trav¨¦s de pantallas, y ovacionaron a Llamazares, a Rosa Aguilar, la alcaldesa de C¨®rdoba, y a Isaura Navarro, cabeza de lista por Valencia. Navarro es una mujer de 30 a?os, poco conocida, que ha sido elegida para reflejar una clara apuesta por la renovaci¨®n.

Llamazares hizo una defensa encendida de los servicios p¨²blicos y acus¨® al PP de haberlos abandonado porque "s¨®lo le interesa lo que es rentable". El l¨ªder de la federaci¨®n de izquierdas utiliza un paralelismo con la empresa privada. ?Qu¨¦ le pasar¨ªa a un director general de una empresa que constantemente sostiene que no cree en ella?, pregunta al p¨²blico. Pues que ser¨ªa inmediatamente despedido, responde.

Y sin embargo eso es exactamente lo que el PP hace, seg¨²n Llamazares, con los servicios p¨²blicos que tiene la obligaci¨®n de gestionar. Muestra su desinter¨¦s permanente y "deja morir" todo aquello que no sea rentable. Para evitar ese desinter¨¦s, IU quiere un c¨®digo ¨¦tico que comprometa a todos los cargos p¨²blicos a llevar a sus hijos a los centros educativos p¨²blicos "en vez de enviarlos a estudiar a Estados Unidos, dijo, en clara referencia al hijo mayor de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.

Llamazares no quiso dejar escapar la oportunidad que le proporcionaba el hecho de encontrarse en Valencia, centro de varias acusaciones de corrupci¨®n que salpican al PP, para hablar de los pelotazos del partido del Gobierno.

IU propone una serie de medidas contra la corrupci¨®n. Primero, crear una Agencia P¨²blica de Transparencia, cuyo responsable ser¨ªa elegido por mayor¨ªa de tres quintos del Congreso, para controlar las incompatibilidades y registrar los bienes e intereses de los cargos p¨²blicos. Luego, dotar de plena autonom¨ªa al fiscal anticorrupci¨®n para que investigue, si es menester, a los miembros del Gobierno. Y por ¨²ltimo, modificar la ley de partidos pol¨ªticos para prohibir las donaciones privadas.

En el cap¨ªtulo que todos los d¨ªas tiene reservado para diferenciarse de los socialistas y criticar sus llamamientos al voto ¨²til, Llamazares encontr¨® ayer una nueva f¨®rmula: "A la derecha no se le adelanta por el centro, se le adelanta por la izquierda", clam¨® entre aplausos entusiastas. Sus reproches al PSOE son siempre recibidos con alborozo por los militantes y simpatizantes, sea cual sea la plaza. Sobre todo cuando recuerda las propuestas fiscales de Rodr¨ªguez Zapatero.

El l¨ªder de IU hizo un nuevo llamamiento a la gente que duda si acudir a las urnas o quedarse en casa. Parafrase¨® a Manuel Aza?a, presidente del ¨²ltimo Gobierno de la II Rep¨²blica. Llamazares dice que no entiende c¨®mo las encuestas reflejan que la mayor¨ªa de los ciudadanos quiere un cambio en el Ejecutivo, y sin embargo esa misma mayor¨ªa piensa que no lo habr¨¢. "?Pero si depende de ellos!", exclam¨® ayer. "Como dijo Aza?a, ?basta de pesimismo fatalista!".