La actual UE se prepara para acoger a m¨¢s de un mill¨®n de inmigrantes del Este

El ingreso en la UE de 10 nuevos pa¨ªses a partir del 1 de mayo supondr¨¢ un incremento de la presi¨®n migratoria sobre los actuales 15 socios del club, y especialmente sobre Alemania y Austria. M¨¢s de 1,1 millones de personas en edad laboral procedentes del Este tienen la firme intenci¨®n de establecerse en pa¨ªses de la actual UE en los pr¨®ximos a?os. La cifra es m¨¢s baja que la prevista o temida por algunos, pero los Gobiernos de la Uni¨®n ya han anunciado medidas para controlar el fen¨®meno.

El flujo anual, que a partir de 2007 se incrementar¨¢ con la entrada de Bulgaria y Rumania, ser¨¢ de unos 220.000 inmigrantes, seg¨²n un estudio difundido la pasada semana por la Comisi¨®n Europea y la Fundaci¨®n para la Mejora de las Condiciones de Vida y Laborales, que destaca el hecho de que la renta media por habitante de esos pa¨ªses supera ligeramente el 40% de la media europea actual. A finales de la pasada d¨¦cada, ya hab¨ªa 900.000 trabajadores del Este instalados en la UE actual.

Cerca del 1% de los ciudadanos de esos pa¨ªses mayores de 15 a?os tienen ahora la firme intenci¨®n de instalarse en alguno de los Quince, aunque la tentaci¨®n o el deseo de hacerlo se dispara al 3,1% en los pa¨ªses que entrar¨¢n el 1 de mayo (Lituania, Letonia, Estonia, Polonia, Hungr¨ªa, Eslovaquia, Rep¨²blica Checa, Eslovenia, Chipre y Malta) y al 4,6% si se suman Bulgaria, Rumania y Turqu¨ªa (a finales de a?o se decidir¨¢ si Ankara inicia las negociaciones de adhesi¨®n).

El impacto, opina la Comisi¨®n, no ser¨¢ muy importante, salvo en ¨¢reas fronterizas de Alemania con Polonia o de Austria con la Rep¨²blica Checa, Eslovaquia, Hungr¨ªa o Eslovenia. Para mitigarlo, Bruselas propone importantes inversiones y ayudas comunitarias para esas zonas fronterizas. Fueron Alemania y Austria los que impusieron un periodo de transici¨®n, que puede prolongarse hasta siete a?os tras la ampliaci¨®n, antes de aplicar a los actuales candidatos en toda su extensi¨®n el principio comunitario de la libertad de establecimiento de trabajadores en toda la UE.

Aunque se trata de una medida que se aplica con car¨¢cter voluntario, todos los pa¨ªses, salvo Irlanda, han anunciado ya que impondr¨¢n restricciones. En paralelo, Londres ha advertido de que limitar¨¢ el acceso a los derechos sociales mientras Holanda ha puesto en marcha una legislaci¨®n para expulsar a decenas de miles de solicitantes de asilo. S¨®lo Malta (380.000 habitantes) y Chipre (752.000), los dos candidatos m¨¢s peque?os y con un buen nivel econ¨®mico, est¨¢n libres de ese tipo de restricciones.

Buena parte de esos inmigrantes potenciales son j¨®venes bien preparados. Entre el 2% y el 3% con edades entre los 15 y los 24 a?os tienen decidido instalarse en la UE actual. Un tercio de ellos son estudiantes y una cuarta parte han concluido ya estudios universitarios. Para Bruselas, estos datos hacen suponer que los actuales socios del club europeo acoger¨¢n mano de obra de alta calidad y, por tanto, las ventajas que obtengan ser¨¢n muy superiores a los riesgos. Entre estos ¨²ltimos menciona los abusos en los sistemas de protecci¨®n social, el aumento de la criminalidad en casos aislados o el impacto negativo sobre el mercado inmobiliario.

La mayor desventaja ser¨¢ para los propios pa¨ªses de origen, que se arriesgan a perder un elevado porcentaje de sus estudiantes ya formados con el consiguiente deterioro futuro del nivel de competitividad del pa¨ªs. En Bulgaria casi el 8% de los estudiantes tiene decidido abandonar el pa¨ªs en cuanto acaben sus estudios. La Comisi¨®n Europea sostiene que las previsiones actuales arrojan cifras y porcentajes m¨¢s bajos que los estimados hace a?os. Estudios realizados entre 1994 y 1996 indicaban que el n¨²mero de inmigrantes desde los pa¨ªses candidatos hacia la UE actual ser¨ªa de entre tres y diez millones. En 2001, ya se rebaj¨® a entre uno y cuatro millones en dos d¨¦cadas.