Rubens invita a contemplar el barroco m¨¢s carnal
Amberes, la ciudad del artista, abre siete exposiciones que completan la antol¨®gica de Lille
A las tres exposiciones que se celebran desde pasado ma?ana en Amberes se unir¨¢n, a lo largo del a?o, sucesivas muestras que desvelar¨¢n la importancia de Pedro Pablo Rubens como paisajista, grabador, ilustrador de libros y reproductor gr¨¢fico. Mientras, muy cerca de Amberes, la ciudad francesa de Lille festeja su capitalidad cultural con una gran antol¨®gica del genio del barroco.
Pese a la intensa actividad que estas dos ciudades dedican a Rubens -m¨¢s tarde se sumar¨¢ G¨¦nova-, no se cumple en 2004 ninguna conmemoraci¨®n clave en la vida del artista. El proyecto surgi¨® en Lille y Amberes no pod¨ªa quedar al margen.
Conjuntamente, las dos ciudades han preparado un programa que dura todo el a?o y que no se limita a seguir la huella del artista en los museos. El programa entra en su casa, recorre las iglesias en las que cuelgan sus obras y saca a la luz todo aquello que pueda aportar conocimientos sobre el artista. Toda la informaci¨®n pr¨¢ctica sobre el tema est¨¢ en la p¨¢gina web www.rubens2004.be.
Delacroix lo consider¨® un modelo a imitar; para Courbet era un artista prescindible
Le¨ªa en lat¨ªn y pasaba horas estudiando atlas o libros de arqueolog¨ªa
Se ha reconstruido la casa de un genio para exhibir su colecci¨®n en su ubicaci¨®n original
Ayer, mi¨¦rcoles, las tres primeras exposiciones con las que arranca el programa fueron presentadas en Amberes: Rubens coleccionista, Rubens y su biblioteca (Su pasi¨®n por los libros) y Rubens bajo discusi¨®n: desde Delacroix hasta Courbet. La historiadora Fiona Healy es uno de los dos comisarios de la exposici¨®n Rubens coleccionista, que se exhibe en la que fuera la casa familiar y principal taller del artista. El edificio, de tres plantas y espectaculares patios, reconstruido al detalle poco despu¨¦s de la II Guerra Mundial, exhibe permanentemente parte de lo que fue la espl¨¦ndida colecci¨®n privada del artista colgada de las paredes de sus grandes salones. En esta ocasi¨®n, la colecci¨®n permanente se ha enriquecido con 70 obras maestras de Rubens y de creadores a los que admiraba que pudieron haber pertenecido a la colecci¨®n original.
Fiona Healy recuerda que Pedro Pablo Rubens fue un hombre muy rico. Triunfador desde muy joven, la Iglesia y la nobleza le encargaban permanentemente obras. Asegura la comisaria que Rubens disfrutaba adquiriendo trabajos de otros artistas para contemplarlos en su casa, pero que muy pronto tambi¨¦n se dedic¨® a la compraventa.
Fue, seg¨²n la historiadora, uno de los primeros marchantes de la historia. Compraba obras de aquellos a los que consideraba sus grandes modelos: Tiziano, Tintoretto, Veronese, y tambi¨¦n piezas de sus predecesores: Durero, Holbein o Elsheimer.
De Adriaan Brouwer adquiri¨® casi toda su obra. Algunas de las pinturas de este artista fueron retocadas por el propio Rubens, quien no dudaba en rebajar escotes a las v¨ªrgenes o adornar con collares de ¨¢mbar los cuellos de los ni?os santos.
Rubens no s¨®lo invert¨ªa en pinturas o esculturas; tambi¨¦n adquir¨ªa muebles, utensilios antiguos, camafeos. Era un coleccionista de todo aquello que llamaba la atenci¨®n a su sensibilidad. Prestaba especial atenci¨®n a las piezas destinadas a enriquecer las zonas habitadas por sus hijos o por su esposa.
La historiadora Fiona Healy advierte de que la exposici¨®n no pretende dar una visi¨®n completa de las adquisiciones realizadas por Rubens. Precisa que se ha intentado evocar lo que fue el estudio de un artista del siglo XVII, tal como se ha representado posteriormente en los cuadros de arte contempor¨¢neo. Se ha buscado reconstruir la casa de un genio que ten¨ªa mucho dinero y se ha intentado condensar lo que pudo ser su colecci¨®n en esas 70 piezas que han sido colocadas en lo que seguramente fue su ubicaci¨®n original.
La segunda exposici¨®n presentada ayer, y que tambi¨¦n se abrir¨¢ al p¨²blico el s¨¢bado, est¨¢ dedicada a mostrar su personalidad a trav¨¦s de los libros que pose¨ªa en su espectacular biblioteca. Esta muestra est¨¢ situada en el Museo Plantin-Moretus de Amberes. El comisario Marcus de Schepper ha querido reflejar que, al igual que su colecci¨®n de arte, los libros que a lo largo del tiempo fue adquiriendo terminan por definir una personalidad tan culta como cosmopolita. Le¨ªa en lat¨ªn y pasaba horas estudiando atlas o libros de arqueolog¨ªa. Sus permanentes desplazamientos por Europa le permitieron conseguir obras maestras de la edici¨®n de la ¨¦poca.
La tercera exposici¨®n, montada en el Museo Real de Bellas Artes de Amberes, lleva por t¨ªtulo Rubens bajo discusi¨®n y recoge c¨®mo algunos artistas, durante la primera mitad del siglo XIX, tomaron partido a favor o en contra de Rubens.Los creadores rom¨¢nticos, como Delacroix, le consideraron un modelo a imitar. Para los realistas como Courbet era un tipo de expresi¨®n totalmente prescindible.
Mientras tanto, en la ciudad francesa de Lille, que celebra este a?o su capitalidad cultural, se ultiman los preparativos de la antol¨®gica que se inaugurar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 14 en el Palacio de Bellas Artes. Aqu¨ª se tratar¨¢ de recoger la amplitud de su obra a trav¨¦s de 175 pinturas, bocetos al ¨®leo, dibujos y tapices.
Para esta gran muestra, coleccionistas privados y grandes pinacotecas han prestado obras que ser¨¢ dif¨ªcil volver a contemplar reunidas.
Y al margen de lo que son puros museos, la que fuera ciudad natal de sus padres y a la que ¨¦l permaneciera vinculado desde los 10 a?os se dispone a recordar al artista en sus iglesias y monumentos externos. La impresionante catedral g¨®tica de la ciudad mostrar¨¢ con especial atenci¨®n las obras que ¨¦l dirigi¨®. Tambi¨¦n se podr¨¢ contemplar el paso de su creatividad en la iglesia de San Pablo, en la de San Jacobo o en la de Carlos Borromeo.
Babelia
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