En v¨ªa muerta
Cuando en enero del a?o pasado una serie de siete accidentes de ferrocarril puso al sistema ferroviario espa?ol bajo sospecha, una de las explicaciones m¨¢s plausibles que se ofreci¨® a la opini¨®n p¨²blica fue un informe de Renfe, conocido meses despu¨¦s, que denunciaba el deterioro de la red ferroviaria por ausencia notoria de inversiones en mantenimiento y reparaci¨®n de las v¨ªas y otros elementos de la circulaci¨®n. Pues bien, el Tribunal de Cuentas vuelve sobre tan comprometida cuesti¨®n en la fiscalizaci¨®n de las cuentas de Renfe de 2000. Sostiene el informe cosas tan graves como que Renfe no invierte en reposici¨®n de infraestructuras tanto como amortiza, con lo cual no se produce la necesaria reposici¨®n de la red. La conclusi¨®n es que la falta de inversiones deteriora la calidad del servicio y aumenta el riesgo de accidentes.
Est¨¢ claro que existe una relaci¨®n muy estrecha entre la inversi¨®n en infraestructuras y la calidad de los servicios p¨²blicos. Esa relaci¨®n se cumple tanto en los ferrocarriles como en la red de carreteras o en la sanidad p¨²blica. Por esa raz¨®n, es necesario garantizar el compromiso p¨²blico de inversi¨®n, se mantenga la gesti¨®n en manos p¨²blicas o se traspase a empresas privadas. En el Reino Unido, la privatizaci¨®n de los ferrocarriles no incluy¨® compromisos de inversi¨®n, de forma que las empresas recortaron gastos f¨¢cil e irresponsablemente en los cap¨ªtulos de mantenimiento y reposici¨®n. Una cadena de cat¨¢strofes ferroviarias oblig¨® al Gobierno brit¨¢nico a imponer a las empresas privadas dr¨¢sticas condiciones de inversi¨®n.
Esa lecci¨®n deber¨ªa haberse aprendido. Pero la gesti¨®n de Renfe desde 1996 no parece haber tomado nota de la moraleja, seg¨²n advierte el Tribunal de Cuentas. Renfe se complace en la cara m¨¢s agradable de la gesti¨®n ferroviaria, que es la adjudicaci¨®n de grandes contratos -como el que acaba de favorecer a Talgo y Siemens por importe de 1.600 millones de euros- aptos para explotaci¨®n electoral; nada reprochable si al mismo tiempo explica a la opini¨®n p¨²blica el alcance de las conclusiones del Tribunal de Cuentas y con qu¨¦ decisiones de inversi¨®n compensar¨¢ las deficiencias de la red viaria. ?sa es la aut¨¦ntica responsabilidad de Renfe, y muy grave por cierto.
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