"Una de las dos"
El "espa?olito" del poema machadiano que "quiere vivir y a vivir empieza" se encuentra acogotado no entre la Espa?a cat¨®lica y la Espa?a "roja" -como tantas veces se ha tendido a interpretar, creyendo que los versos se compusieron bajo la Segunda Rep¨²blica-, sino entre la Espa?a que "muere" (se supone que de inanici¨®n) y otra que "bosteza", que viene a ser m¨¢s o menos lo mismo. La peque?a y contundente composici¨®n de ocho l¨ªneas se public¨® por primera vez, de hecho, en la segunda edici¨®n de las Poes¨ªas completas (1925), con lo cual es la mon¨®tona y rezagada Espa?a del general Primo de Rivera la que ha de helarle el coraz¨®n al desafortunado reci¨¦n nacido y as¨ª paralizar cualquier iniciativa creativa suya. ?Cu¨¢nto tiempo iba a durar aquella dictadura, instaurada dos a?os atr¨¢s? ?Qu¨¦ vendr¨ªa despu¨¦s? Nadie lo pod¨ªa prever. Espa?a, una vez m¨¢s, viv¨ªa sin lo que hoy llamar¨ªamos "proyecto de futuro".
Desde entonces ha pasado mucha agua debajo de los puentes de la historia patria. Pero el poema de Machado, con cada palabra en su exacto sitio, sigue actual y est¨¢ siendo citado o aludido con frecuencia en estos tensos d¨ªas preelectorales. Y no es de extra?ar a la vista de las grotescas salidas de tono de los "duros" del Gobierno a lo largo de las ¨²ltimas semanas, que est¨¢n batiendo todas las previsiones y hasta produciendo estupor entre algunos que cre¨ªamos, si no en la superaci¨®n definitiva de las divisiones seculares, que por lo menos se hab¨ªa logrado un consenso razonable sobre las maneras pol¨ªticas que deber¨ªan ser norma en un pa¨ªs capaz de haber elaborado la Constituci¨®n de 1978.
El desprecio mostrado por Aznar hacia la oposici¨®n socialista, su empe?o en acusarla de intenciones disgregadoras y de complicidad con los separatistas catalanes, han tenido el efecto de inspirar en sus allegados el deseo de emularle e incluso superarle en sus barbaridades. Los exabruptos de Acebes, Manda-Huevos Trillo, Zaplana y compa?¨ªa revelan una chuler¨ªa m¨¢s propia del r¨¦gimen anterior que del actual, y Manuel Fraga incluso ha implicado al Cielo en el asunto ("Si Dios quiere y vosotros tambi¨¦n, vamos a ganar en toda Galicia y en toda Espa?a"). Claro que quiere. ?No fue y sigue siendo designio divino la unidad territorial espa?ola?
Miguel ?ngel Moratinos, que sabe lo que dice, ha llamado la atenci¨®n, en una entrevista publicada hace algunos d¨ªas en este peri¨®dico, sobre el tremendo da?o hecho por Aznar a las relaciones de Espa?a con el mundo ¨¢rabe. Si el PP consiguiera la mayor¨ªa absoluta otra vez, no hay razones para creer que dicho da?o se reparara f¨¢cilmente. Tampoco habr¨ªa en el Parlamento el tan necesario debate sobre Iraq, vital para restablecer la salud de la democracia espa?ola. Despu¨¦s de los ¨²ltimos cuatro a?os el pa¨ªs necesita un Gobierno dialogante capaz de reconducir la pol¨ªtica exterior y de devolver a los ciudadanos algo de aquel inolvidable entusiasmo de 1981, despu¨¦s del bochornoso episodio de Tejero. A uno le helar¨ªa el coraz¨®n si volviesen otra vez con mayor¨ªa absoluta estos patanes (Javier Mar¨ªas). Parece ser que no lo van a conseguir. Esper¨¦moslo. Ya es hora de empezar otra vez a vivir.
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