Michel Camilo regresa a sus or¨ªgenes sinf¨®nicos

El pianista Michel Camilo (Santo Domingo, 1954) vuelve esta tarde en Bilbao a sus or¨ªgenes sinf¨®nicos. Su formaci¨®n cl¨¢sica le llev¨® a formar parte con s¨®lo 16 a?os de la Sinf¨®nica Nacional de Santo Domingo y a estudiar composici¨®n, y ya en Nueva York, la ciudad donde reside desde hace 23 a?os, despeg¨® su deslumbrante carrera en el jazz latino. Al escenario del Teatro Arriaga (20.00) subir¨¢ en compa?¨ªa de los m¨²sicos de la Orquesta Sinf¨®nica de Bilbao (BOS) para ofrecer bajo la direcci¨®n del catal¨¢n Manel Valdivieso Font su obra Concierto para piano y orquesta, que estren¨® en 1998 en Washington.

"Ser¨¢ la vigesimocuarta vez que toque el Concierto", dec¨ªa ayer de memoria en un descanso del ensayo con la orquesta, vestido, como siempre, de negro de los pies a la cabeza. "Es una vuelta a las ra¨ªces", repiti¨®, feliz por tener todav¨ªa fresco su segundo premio Grammy, el recibido el mes pasado por su ¨¢lbum de jazz Live at the Blue Note.

Camilo ya visit¨® hace justo un a?o el Arriaga, impartiendo una de las clases magistrales que le lleva por todo el mundo traduciendo a palabras sus conceptos musicales. Antes estuvo tocando jazz en varias ocasiones en el Pa¨ªs Vasco, pero ¨¦ste es su estreno sinf¨®nico. La estructura del Concierto para piano y orquesta, una idea impulsada por el director estadounidense Leonard Slatkin, marcha paralela a su propia vida: "El primer movimiento tiene ra¨ªces caribe?as, en el segundo se ve la transici¨®n a Nueva York y el tercero es Nueva York puro".

El programa elegido para tocar con la BOS comenzar¨¢ con Rhapsody in blue y Un americano en Par¨ªs, de George Gershwin. "Es un puente entre el jazz y lo cl¨¢sico, conectado con mis inicios en los teatros de Broadway", explic¨® el pianista. El cierre del concierto supondr¨¢ otro gui?o a la tradici¨®n americana: la Obertura de Candice, de Leonard Berstein. Camilo grab¨® su Concierto con la Sinf¨®nica de la BBC hace dos a?os, y ahora se dispone a presentarlo en directo en Tokio. Su deseo es que un d¨ªa "pase al repertorio pian¨ªstico mundial".