El delta del Ebro, primera v¨ªa de entrada de droga del sur de Europa

Largas playas solitarias, aguas tranquilas y una densidad de poblaci¨®n baja en el litoral. ?ste es para los contrabandistas de hach¨ªs el paisaje del delta del Ebro, que seg¨²n fuentes policiales se ha convertido en la principal puerta de entrada de esta droga en Catalu?a y en el sur de Europa. S¨®lo en lo que va de a?o, la Guardia Civil ha decomisado 10.000 kilos de hach¨ªs y ha detenido a 14 personas. En todo el a?o anterior, fueron decomisados 5.000 kilos, mientras que el n¨²mero de detenciones ascendi¨® a nueve.

El delta del Ebro se ha convertido para los contrabandistas de hach¨ªs en un verdadero para¨ªso donde descargar una mercanc¨ªa que viaja a gran velocidad en peque?as y potentes lanchas, a las que la polic¨ªa da caza en raras ocasiones porque no dispone de embarcaciones tan r¨¢pidas.

Fuentes policiales aseguran que es imposible hacer un c¨¢lculo aproximado del hach¨ªs que logra burlar los controles y entrar por el delta del Ebro, y admiten sin reparos que ¨¦sta es la principal puerta de entrada de esta droga en Catalu?a. Droga que luego viajar¨¢ por carretera hasta el ¨¢rea metropolitana de Barcelona y tambi¨¦n hacia Francia.

Tras la cosecha de la marihuana a finales de septiembre, el hach¨ªs suele estar listo en Marruecos a mediados de octubre, y es durante los meses de noviembre, diciembre, enero y febrero cuando aumenta el n¨²mero de lanchas que tratan de descargar la mercanc¨ªa en el delta del Ebro.

Se trata de embarcaciones semirr¨ªgidas, con dos, tres e incluso cuatro motores -habitualmente de la marca Yamaha, y de 250 caballos de potencia cada uno-, que convierten a estas peque?as lanchas deportivas en verdaderas balas.

Fuentes de la investigaci¨®n antidroga se?alan que en estas lanchas viajan entre tres y cuatro hombres marroqu¨ªes, y que tienen un espacio limitado para la carga, de unos 3.000 kilos. Aun as¨ª, el negocio es tan redondo para los que logran su objetivo que resulta habitual que los contrabandistas abandonen en las playas unas embarcaciones que han adquirido expresamente para el viaje.

Operaci¨®n en Amposta

?ste es precisamente el perfil de las 12 personas, todas de nacionalidad marroqu¨ª y con edades comprendidas entre los 21 y los 33 a?os, que detuvo la polic¨ªa el pasado 2 de febrero en la playa del Eucaliptus de Amposta (Montsi¨¤), donde fueron incautados 3.800 kilos de hach¨ªs. Este grupo de marroqu¨ªes estaba cargando en veh¨ªculos los fardos de droga que horas antes probablemente hab¨ªa descargado una lancha, y los agentes los cogieron in fraganti.

Sin embargo, estas operaciones policiales son excepcionales. Es m¨¢s com¨²n, por ejemplo, que alg¨²n vecino avise a la polic¨ªa de que ha encontrado una lancha embarrancada en la arena que le parece sospechosa. As¨ª ocurri¨® en octubre en el cabo de Tortosa, donde apareci¨® una embarcaci¨®n r¨¢pida cargada de hach¨ªs a unos 15 metros de la playa. Fuentes policiales se?alan que este tipo de embarcaciones son altamente inestables y que es frecuente que los contrabandistas traten de viajar en d¨ªas de mala mar, que es cuando tambi¨¦n decae la vigilancia de la polic¨ªa.

La embarcaci¨®n que apareci¨® en octubre en el cabo de Tortosa probablemente se vio en una situaci¨®n dif¨ªcil y lanz¨® hach¨ªs por la borda para intentar ganar estabilidad. D¨ªas despu¨¦s de aparecer la barca, unos pesqueros de arrastre de la Ametlla de Mar (Baix Ebre) atraparon en sus redes 32 fardos de hach¨ªs que pesaban pr¨¢cticamente una tonelada.La polic¨ªa cree que proven¨ªan de la lancha embarrancada.Para un navegante que no conozca el delta del Ebro, es f¨¢cil quedar varado en la arena. Las aguas cercanas a la desembocadura del r¨ªo son muy poco profundas, en ocasiones hasta docenas de metros mar adentro. Los contrabandistas que viajan normalmente en paralelo a la costa mediterr¨¢nea, a poca distancia de la playa y con suficiente combustible a bordo para no tener que repostar en todo el camino llegan al delta y, si logran descargar su mercanc¨ªa, es m¨¢s probable que permanezcan en la Pen¨ªnsula y contin¨²en el viaje con el cargamento hacia Barcelona o Francia.

As¨ª lo apunta la polic¨ªa, que admite tener serias dificultades para controlar este tr¨¢fico ilegal, debido sobre todo a la gran ventaja en potencia de las lanchas.

El tr¨¢fico de hach¨ªs en el delta del Ebro hace ya a?os que se produce. En 1999, la polic¨ªa se incaut¨® de m¨¢s de 12 toneladas, que hubieran podido alcanzar en el mercado un valor de 16,3 millones de euros. Al a?o siguiente, los agentes aprehendieron ¨²nicamente 1,6 toneladas, cifra que se increment¨® en el 2001 hasta las 5,4 y volvi¨® a caer en el 2002, que se cerr¨® con tan s¨®lo 345 kilos de hach¨ªs decomisados. Estas cifras reflejan que el tr¨¢fico de droga es constante y que la polic¨ªa tiene a?os m¨¢s y menos afortunados.

El a?o pasado la polic¨ªa se incaut¨® de 5.000 kilos y este a?o ya lleva 10.000, gracias a la operaci¨®n en Amposta ya mencionada y a otra en L'Hospitalet de l'Infant, a finales de febrero, cuando la polic¨ªa frustr¨® el desembarco de 5.600 kilos en una cala cercana a la central nuclear de Vandell¨°s. Estas playas, unos 30 kil¨®metros al norte del delta, son las primeras poco pobladas que los contrabandistas encuentran si les ha sido imposible descargar en la desembocadura del Ebro, y a menudo tambi¨¦n son usadas por los narcotraficantes.

Por otra parte, la Audiencia Provincial de Tarragona conden¨® el pasado septiembre a seis a?os de c¨¢rcel y una multa de 36 millones de euros al ex teniente coronel de la Guardia Civil M¨¢ximo Blanco por considerar probado que particip¨® en 1999 en una operaci¨®n de tr¨¢fico de hach¨ªs.

'La barca del teniente coronel'

La sentencia expuso que Blanco, haciendo valer su cargo, contact¨® con agentes policiales de diferentes puertos del litoral mediterr¨¢neo espa?ol para persuadirlos de que dieran v¨ªa libre a la embarcaci¨®n Addaia III, sobre la que, durante el juicio, algunos agentes declararon que la conoc¨ªan como "la barca del teniente coronel".

La polic¨ªa encontr¨® la embarcaci¨®n en el puerto de Sant Carles de la R¨¤pita, tras percibir una actitud sospechosa de los tripulantes, y detuvo a cinco personas, entre ellas el ex Guardia Civil, que desarrollaban diferentes funciones en una banda dedicada al tr¨¢fico de hach¨ªs.