Soldados de EE UU matan a varios civiles en una batalla en Faluya

Nueva batalla campal en Faluya. Todos los esfuerzos de los soldados estadounidenses no han logrado ganarse a una poblaci¨®n orgullosa que vive humillada la ocupaci¨®n. Tampoco sus precauciones les han evitado los ataques. Ayer, cuando las tropas entraron en la ciudad para buscar a los responsables de la muerte de un marine el d¨ªa anterior, fue la guerra. En la batalla, que dur¨® una hora larga, resultaron muertos un soldado de EE UU, cuatro miembros de la defensa iraqu¨ª y varios civiles.

"Los almu¨¦danos estaban llamando a la oraci¨®n cuando se han producido los primeros disparos de lanzagranadas y armas autom¨¢ticas", relat¨® por tel¨¦fono un periodista local. La respuesta de los insurgentes no impidi¨® que sellaran las dos zonas y realizaran registros casa por casa. Aunque los portavoces militares en Bagdad se negaron a dar detalles sobre la operaci¨®n, todo apunta a que los marines buscaban a quienes fabricaron y plantaron la bomba que el jueves mat¨® a uno de sus compa?eros e hiri¨® a otros dos. El Primer Cuerpo Expedicionario de Marines ha relevado hace pocas semanas a la 1? Divisi¨®n Acorazada en esa regi¨®n, una de las m¨¢s ind¨®mitas de Irak.

Entre los fallecidos, adem¨¢s de los militares, hay tres ni?os y varias mujeres, seg¨²n fuentes hospitalarias. Tambi¨¦n un c¨¢mara de la cadena de televisi¨®n norteamericana ABC, el octavo empleado local de un medio de comunicaci¨®n que muere de forma violenta este mes.

Las agencias de noticias explican las v¨ªctimas civiles porque los insurgentes estaban mezclados con la poblaci¨®n, pero en Faluya todos se declaran resistentes. Esta ciudad de medio mill¨®n de habitantes, situada a 60 kil¨®metros al oeste de Bagdad dentro del llamado tri¨¢ngulo sun¨ª, ha sido una de las m¨¢s activas en la oposici¨®n a la presencia militar extranjera.

A pesar de encontrarse dentro una zona favorecida por el r¨¦gimen de Sadam, Faluya no opuso inicialmente resistencia a la entrada de las tropas norteamericanas. Sin embargo, pocos d¨ªas despu¨¦s de tomar la ciudad los soldados mataron a 16 manifestantes y la poblaci¨®n se puso en pie de guerra. Para tratar de aplacar los ¨¢nimos, los responsables militares llegaron a un acuerdo para no patrullar dentro del casco urbano y desde el verano s¨®lo han entrado en contadas ocasiones.