Un rinc¨®n secreto de la costa de Lisboa
Mar embravecido, ricos pescados y paseos entre callejuelas en Ericeira
Desde las playas de Ericeira partieron hacia el exilio, el 5 de octubre de 1910, d¨ªa de la proclamaci¨®n de la Rep¨²blica, Manuel II y Amelia d'Orleans, ¨²ltimos Reyes de Portugal. Son las mismas playas que hacen de este pueblo de la costa portuguesa una de las principales mecas europeas del surf. Los espectaculares arenales de Ericeira, m¨¢s de una decena, situados en un radio de ocho kil¨®metros, representan bien el esp¨ªritu de esta localidad de pasado glorioso y presente tranquilo.
Ribera d'Ilhas es una de las m¨¢s destacadas. Sede anual de una prueba del campeonato mundial de surf desde 1985, alberga una peque?a escuela para novatos y expertos. Incluso para profanos es todo un espect¨¢culo contemplar, a la ca¨ªda del sol, con el mar centellante aposentado en alguna roca elevada, las piruetas de estos deportistas sobre las olas. Praia da Calada y Praia de Lizandro, al norte y al sur, son recomendables para tumbarse junto al mar en medio de imponentes acantilados. Aunque no nadar, claro. Raro es ver a ba?istas. En el Atl¨¢ntico, lo agitado de sus aguas nada tiene que ver con el apacible Mediterr¨¢neo. A su favor, un extraordinario estado de conservaci¨®n, arena muy limpia, calma y silencio.
Aunque el sol y el buen tiempo no est¨¢n garantizados, hay alternativas de sobra a los nubarrones. Desde el pueblo parten con regularidad autobuses hacia Lisboa (47 kil¨®metros), Sintra (25) -cuya visita es poco menos que obligada- o Mafra (10). En este ¨²ltimo se encuentra la Tapada Nacional de Mafra, un parque natural con animales en libertad, creado en 1747 por el rey Jo?o V como zona de entretenimiento y caza para la monarqu¨ªa portuguesa.
Pero tampoco hay por qu¨¦ salir de Ericeira. Las sorpresas del pueblo, fundado en 1229, esperan en sus serpenteantes calles. Casas de pescadores con fachadas forradas de cer¨¢mica, peque?as fuentes de extra?as formas (muchas de ellas construidas en los a?os veinte) y un buen n¨²mero de iglesias forman parte de su casco antiguo.
Los numerosos edificios antiguos denotan un pasado glorioso, cuando Ericeira era lugar de vacaciones de reyes y arist¨®cratas. Un ejemplo: la Casa de Cultura Jaime Lobo e Silva, situada en el centro, antiguo Grande Casino da Ericeira hasta 1927 y Cine-Casino hasta 1980. A pocos pasos, en la Cal?ada da Baleia, encontramos, puerta con puerta, las dos mejores pastelarias del pueblo, las de toda la vida: Casa Gama y Casa dos Ouri?os. Para comer los dulces, nada mejor que buscar asiento en la cercana Pra?a da Rep¨²blica, coraz¨®n social de esta localidad llena de caf¨¦s y ¨¢rboles, y observar a los transe¨²ntes, sobre todo, lugare?os de avanzada edad y turistas (casi todos lisboetas, surfers extranjeros y familias silenciosas).
El aparente equilibrio de gentes es uno de los encantos de Ericeira. Se intuye un vertiginoso ritmo de la construcci¨®n, fuera de su casco antiguo. La cifra de habitantes baila entre los 5.000 y los 12.000 habitantes, seg¨²n a qui¨¦n se pregunte. Aunque las cifras oficiales se acercan m¨¢s a la segunda, al visitante nunca le agobia el barullo.
Vacaciones para el paladar
Sin que tiriten los bolsillos menos afortunados, en casi cualquier lugar con pinta de restaurante (olvidemos el dise?o e interiorismo) es posible disfrutar de un tremendo peixe fresco grelhado (pescado a la brasa) a buen precio. Los amantes del marisco, que apunten este nombre: Mar ¨¤ Vista (Rua de Santo Ant¨®nio, 16. 261 862 928). Un local peque?o y austero -unas 10 mesas- abierto desde hace 50 a?os, que cuenta con un servicio impecable y un g¨¦nero excelente y barato. Magn¨ªficos percebes cuando la marea lo permite, arroz o feijoada de marisco en raciones que tranquilamente pueden ser para dos.
Otra especialidad local es la caldeirada, especie de sopa de pescado con patata. Canastra (Rua Capitao Jo?o Lopes, 8-A. 261 865 367) y Esplanada Furnas (Rua das Furnas, s/n. 261 864 870), ¨¦ste sobre unas rocas y con privilegiadas vistas al mar, son dos excelentes opciones para comer pescado de todas las clases cocinado a la vista del cliente. Para los aficionados a la carne, Chico y Pedro reciben al viajero en el Tik Tak (Rua, 5; Outubro, 7. 261 863 246), un lugar de ambiente y decoraci¨®n moderna, con una amplia selecci¨®n de carnes procedentes de todo el mundo, de Nueva Zelanda a Argentina pasando por Francia.
Con el est¨®mago lleno, no es mala idea recorrer de punta a punta las calles que forman el sinuoso paseo mar¨ªtimo de Ericeira, empezando en el mirador donde se erige la Ermida de San Sebasti?o, y acabando en la zona de las furnas, extra?as formaciones rocosas de suma belleza donde acuden tanto los pescadores como los enamorados. Ideales para sentarse en uno de sus bancos, contemplar el estallido del Atl¨¢ntico contra la costa y pensar de qu¨¦ gustosa manera perder el tiempo al d¨ªa siguiente.
GU?A PR?CTICA
Prefijo telef¨®nico
- 00 351.
C¨®mo ir
- Tap (901 11 67 18; www.tap.pt) vuela a Lisboa, desde Madrid, por 167 euros m¨¢s tasas, y desde Barcelona, 265.
- Iberia (902 400 500), hasta el 9 de abril, unos 200 euros desde Madrid y 300 desde Barcelona, ambas sin tasas. Ofertas a partir del 10 de abril en www.iberia.com, desde Madrid, 153 euros m¨¢s tasas.
- Spanair (902 13 14 15), desde Madrid, 153 euros m¨¢s tasas, y desde Barcelona, 242 euros.
Dormir
- Vila Gal¨¦ Ericeira (261 869 900; www.vilagale.pt). Entre la variada oferta de Ericeira, ¨¦sta es la alternativa m¨¢s exclusiva. Un cuatro estrellas situado en un extremo del pueblo, en una zona rocosa sobre el mar. Entre 125 y 165 euros la habitaci¨®n doble.
- Residencial Camarao (261 862 665; www.residencialcamarao.com). 35 euros la habitaci¨®n doble, con desayuno incluido.
Actividades
- Escola de Surf de Ribera d'Ilhas: 969 777 340-341-343-344.
Informaci¨®n
- Junta de turismo da Ericeira (261 863 122; www.ericeira.net).
- Turismo de Portugal (902 88 77 12;
www.portuglainsite.pt).
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