Adi¨®s a una librer¨ªa gay

La librer¨ªa El Cobertizo cerr¨® ayer sus puertas tras siete a?os de andadura. Otra peque?a librer¨ªa de Valencia que ha de echar el cerrojo por problemas econ¨®micos. Son muchos los casos a lo largo de los ¨²ltimos a?os, frente al avance pr¨¢cticamente inexorable de las grandes superficies. La diferencia entre El Cobertizo y otros establecimientos es que esta librer¨ªa del barrio de El Carme era la ¨²nica en Valencia especializada en literatura gay, lesbiana y de transg¨¦nero (lo que se conoce por las siglas GLTB).

"No da dinero y, claro, no genera beneficios", explica Joan Alberni, el librero y propietario de El Cobertizo. Hay varios factores que dan cuenta de la falta de p¨²blico lector. Uno de ellos podr¨ªa ser que el colectivo homosexual y l¨¦sbico valenciano prefiere no hacerse visible a diferencia de otras grandes ciudades como Madrid o Barcelona. Alberni duda y se?ala que quiz¨¢ ha influido un poco. Pero no es el motivo principal del cierre. El librero afirma que la mayor dificultad es la competencia de las grandes superficies, con sus campa?as de descuentos y sus grandes recursos, y del mal funcionamiento de la distribuci¨®n; una competencia que afecta a todos y b¨¢sicamente a las librer¨ªas m¨¢s peque?as y j¨®venes. A ello se a?ade que los valencianos tienen un ¨ªndice de lectura de libros por debajo de la media espa?ola que, a su vez, es muy inferior al de la media europea; una correlaci¨®n de frases que funciona a modo de t¨®pico, toda vez que las diferentes encuestas no hacen m¨¢s que reafirmar la situaci¨®n.

En cualquier caso, Alberni recuerda que otras librer¨ªas gay de Bilbao o Sevilla tambi¨¦n han tenido que cerrar. S¨®lo funcionan los establecimientos de este tipo en Madrid (Barkala, tambi¨¦n editorial, es un referente) y Barcelona, que han generado una serie de actividades en torno a ellos, adem¨¢s de ser librer¨ªas.

Tambi¨¦n El Cobertizo ha dinamizado la vida cultural valenciana, con la organizaci¨®n de numerosos actos y presentaciones de libros. Por ella han pasado Lu¨ªs Antonio de Villena, Boris Izaguirre, Eduardo Mendicutti, Pierre et Gilles, entre muchos otros, como el escritor americano Tom Spanbauer. Fue una satisfacci¨®n especial para Alberni que este escritor estadounidense presentara su ¨²ltima novela La ciudad de los cazadores t¨ªmidos. De su anterior libro, El hombre que se enamor¨® de la luna, el librero tomo prestado el nombre de un personaje para su tienda.

Tambi¨¦n ayer se celebr¨® el que fue el ¨²ltimo acto de El Cobertizo. David P¨¦rez, Giulia Colaizzi y Juan Vicente Aliaga presentaron el libro Hombres de m¨¢rmol (editorial Egales), de Jos¨¦ Miguel G. Cort¨¦s. Un libro que analiza los c¨®digos de representaci¨®n y estrategias de poder de la masculinidad. El autor, ex director del Espai d'Art Contemporani de Castell¨®, se aviene a resumir la idea central del libro: "La idea de masculinidad se ha construido para visualizar la adquisici¨®n de poder. La masculinidad personifica el poder f¨¢lico, el poder simb¨®lico. Y se construye en contra de la feminidad, entendida ¨¦sta tambi¨¦n como los aspectos considerados femeninos presentes en el hombre".

Cort¨¦s analiza las artes pl¨¢sticas, el cine y otras expresiones y defiende que en cada "¨¦poca hist¨®rica el poder se ha apoyado en la figura de la masculinidad, que define, al mismo tiempo, el tipo de sociedad". En la Revoluci¨®n Francesa, por ejemplo, la dureza y la virilidad de los cuerpos que pinta David son representativos; en el mandato de Ronald Reagan, Rambo ser¨ªa el ep¨ªtome.