Del Cor¨¢n a la 'yihad'

Confieso que las cartas de mis impugnadores, el profesor Bernab¨¦ Garc¨ªa y Faisal Khalid Abdel-Hadi [cartas al director publicadas el viernes 2 de abril], me han puesto de buen humor, tal vez por mi complejo de Peter Pan. A la vista de su insistencia, a pesar de que aclar¨¦ el tema de las traducciones, debe resultar preciso derribarme a toda costa. Intentar¨¦ resistir.

Agradezco a mi amigo Bernab¨¦ una argumentaci¨®n que en parte se autodestruye y en parte confirma mis juicios. Habla de dos "errores de fondo" en mi posici¨®n. El primero, que atribuyo al terrorismo isl¨¢mico, perd¨®n, de Al Qaeda, un "trasfondo exclusivamente religioso". Como trasfondo, no como factor coadyuvante, que hay otros, lo reitero: me parece innegable. Si no leemos el Cor¨¢n, leamos por lo menos a Bin Laden. Religioso-pol¨ªtico, ser¨ªa m¨¢s exacto.

Segundo error de fondo m¨ªo: hablar de que el integrismo descansa sobre una "interpretaci¨®n parcial pero ortodoxa" del islam. Lea sin anteojeras mi libro Umma y podr¨¢ entenderlo. Atr¨¦vase en todo caso a discutirlo por extenso, no a descalificar de manera sumaria. Por ¨²ltimo, felizmente mi cr¨ªtico se olvida ya del reproche inicial, mis citas del Cor¨¢n, introducidas de matute. Ahora me falta, escribe, "contextualizaci¨®n" y acude a la frase anterior del vers¨ªculo 2/187-191, donde se introduce la coartada de esperar a ser atacados. No parece que estuviera vigente en la fase expansiva del islam, desde los tiempos de Mahoma como "profeta armado". Hay adem¨¢s otros vers¨ªculos donde se prescinde de la cl¨¢usula, tales como el tambi¨¦n citado por m¨ª 47,4 o el 9,29, en que se insta al combate hasta el fin contra los no creyentes. Es m¨¢s, si introducimos la contextualizaci¨®n propuesta por Bernab¨¦ L¨®pez, el resultado es una estricta confirmaci¨®n de la homolog¨ªa entre ese punto del Cor¨¢n y los comunicados de Al Qaeda. Occidente ataca en Palestina o conquista Irak y el "matadlos" entra en acci¨®n, en Bali, que no invadi¨® nada, o en los trenes de Madrid.

En coincidencia milagrosa con Bernab¨¦, Feysal sentencia lo mismo, descontextualizaci¨®n, y enumera una serie de frases sueltas del Cor¨¢n favorables a la paz y a la tolerancia. Si hubiera le¨ªdo mis art¨ªculos en los ¨²ltimos a?os, sabr¨ªa que toda mi argumentaci¨®n se centra en rechazar la versi¨®n integrista del Cor¨¢n y en apoyar un islam liberal, perfectamente compatible con los cap¨ªtulos de La Meca, no con los de Medina, los del Profeta guerrero. De ser esa su intenci¨®n, iremos juntos. Si se trata en cambio de ocultar detr¨¢s de una cortina de humo la relaci¨®n doctrinal que a partir de los textos yihadistas del Cor¨¢n y de los hadices lleva en l¨ªnea directa al integrismo, quienes as¨ª opinan me encontrar¨¢n ahora y siempre enfrentado a semejante mistificaci¨®n.

Porque la yihad no es un invento propio de la ignorancia occidental, sino una pr¨¢ctica que en su forma presente, el terrorismo isl¨¢mico, constituye una de las principales amenazas para la convivencia entre los hombres. Lo aprendimos el 11-M.