El Pacto de Estado por la Ciencia, los mandarines y los otros
Existe una relaci¨®n directa entre el nivel cient¨ªfico y tecnol¨®gico de un pa¨ªs y su nivel econ¨®mico. Una consecuencia de las carencias espa?olas en tecnolog¨ªa es el paro estructural que sufre Espa?a desde hace una generaci¨®n, el m¨¢s elevado de la Uni¨®n Europea.
Jeffrey Sachs (Universidad de Columbia) ha mostrado que los pa¨ªses con tecnolog¨ªa propia tienen el 15% de la poblaci¨®n mundial y generan el 55,5% del producto bruto del mundo.
Ante este problema, 11 destacados cient¨ªficos biom¨¦dicos han publicado un manifiesto (el Manifiesto) dirigido al Gobierno, partidos, comunidades aut¨®nomas y agentes socioecon¨®micos, en el que se propone duplicar la inversi¨®n en ciencia y tecnolog¨ªa hasta alcanzar en 2010 la media europea actual del 2% del PIB (EL PA?S, 20 de febrero de 2004).
La pretensi¨®n de duplicar el presupuesto de I+D hasta 2010 es una ilusi¨®n interesada
En ninguna instituci¨®n cient¨ªfica con prestigio los investigadores son funcionarios
La eliminaci¨®n del atraso espa?ol no se lograr¨¢ aumentando a escala europea nuestro porcentaje del PIB dedicado a I+D, porque nos enfrentamos ante todo a un problema de organizaci¨®n y calidad. En el a?o 2001, los PIB espa?ol y suizo fueron de 582.000 y 247.000 millones de d¨®lares (Banco Mundial). Espa?a, con el 0,9% de su PIB, dedic¨® un total de 5.290 millones a I+D, mientras que Suiza, con su 2,75%, dedic¨® 6.790 millones. El gasto suizo en I+D es un 30% superior al espa?ol; pero el promedio de patentes suizas registradas por a?o en Estados Unidos en el quinquenio 1997-2001 es de 1.519, mientras que el promedio espa?ol es de 154 (Oficina de Patentes de EE UU, USPTO). Por otra parte, el n¨²mero de cient¨ªficos suizos que figuran entre los autores m¨¢s citados en las revistas cient¨ªficas y t¨¦cnicas internacionales se eleva a 74, mientras que en Espa?a hay 11 autores entre los m¨¢s citados (Institute for Scientific Information de Filadelfia). Estos dos indicadores, de tecnolog¨ªa (medida por las patentes) y de ciencia (medida por autores m¨¢s citados), son diecisiete veces mayores en Suiza que en Espa?a, cuando el presupuesto suizo de I+D supera al espa?ol en un 30%. Y Suiza tiene unas seis universidades investigadoras, un n¨²mero que es unas diez veces menor que el de universidades espa?olas, 71.
Como consecuencia, Suiza tiene empresas farmac¨¦uticas como Novartis, Hoffmann La Roche, Serono (la compa?¨ªa de biotecnolog¨ªa m¨¢s grande de Europa y tercera del mundo) y empresas de alimentaci¨®n (Nestl¨¦) que compiten a escala mundial con las de Estados Unidos.
En el Manifiesto se menciona la importancia vital de los investigadores para desarrollar proyectos de envergadura "capaces de generar innovaci¨®n y, por tanto, riqueza". Esto es obvio; no obstante, los firmantes del Manifiesto son mandarines, es decir, todos cobran sus sueldos con cargo a las n¨®minas del Estado o de las autonom¨ªas, la mayor¨ªa como funcionarios, y el resto, como empleados de fundaciones p¨²blicas (Centro Nacional de Investigaciones Oncol¨®gicas, CNIO, y Centro de Regulaci¨®n Gen¨®mica, CRG). En todas las ¨¦pocas y pa¨ªses, desde la China imperial hasta la Francia del Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), y la Espa?a del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC), los mandarines nunca han creado riqueza, ni lo han intentado. No es su misi¨®n. Su misi¨®n es hacer investigaci¨®n b¨¢sica a largo plazo (hasta el retiro). La investigaci¨®n aplicada, la innovaci¨®n, la creaci¨®n de riqueza, las tienen que hacer los otros.
Piden incorporar nuevos cient¨ªficos al sistema mediante la promoci¨®n de nuevos investigadores "hasta alcanzar la media europea en 2010 (8,3 investigadores por cada 10.000 ciudadanos, frente a los 4,2 actuales)". Esto implica que el Estado deber¨ªa incorporar a los organismos p¨²blicos de investigaci¨®n (OPI) los doctores que ellos mismos producen y que no pueden emplearse en ning¨²n otro sitio; es decir, se propone la expansi¨®n a gran escala del mandarinato.
En ninguna instituci¨®n cient¨ªfica del mundo con un alto grado de excelencia y prestigio los investigadores son funcionarios. Cito algunos ejemplos: Universidad de Harvard, Universidad de Cambridge, Escuela Polit¨¦cnica Federal de Z¨²rich, Instituto Pasteur de Par¨ªs, Universidad Rockefeller de Nueva York, Los ?lamos National Laboratory.
Por tanto, primera medida: declarar a extinguir el estatuto de funcionario de las universidades p¨²blicas y de los OPI. Este cambio es esencial y posible. En Suiza, una ley de 24 de marzo de 2000 elimin¨® a los funcionarios federales. En Espa?a, el Real Decreto del 29 de noviembre de 2002 resolvi¨® el problema de los profesores funcionarios de la Orquesta Nacional respetando sus derechos adquiridos, pero determinando que "en lo sucesivo, la Orquesta Nacional de Espa?a estar¨¢ formada por profesores en r¨¦gimen laboral". Lo mismo con los funcionarios de Correos.
El gobierno y el poder en las universidades y en los OPI deben ser ejercidos independientemente del poder pol¨ªtico. Hay sistemas probados, tanto en Europa como en Estados Unidos, en los que ¨¦sta es la norma b¨¢sica desde hace d¨¦cadas. El gobernador de California nombra a los regentes de la Universidad de California (UC) para mandatos de 12 a?os, mientras que el mandato del gobernador es de cuatro a?os. Por tanto, los nombramientos de los regentes perduran despu¨¦s de la elecci¨®n de un nuevo gobernador. La Junta de Regentes de UC gobierna independientemente del poder pol¨ªtico, no s¨®lo a los nueve campus de UC (Berkeley, Los ?ngeles, San Diego...), sino tambi¨¦n a los dos grandes laboratorios nacionales de Los ?lamos y Livermore. La Junta de Regentes de UC nombra y destituye al presidente de la Universidad, y ¨¦ste a su vez nombra y destituye a los directores de Los ?lamos y Livermore. El Gobierno federal suizo nombra a los nueve miembros del Consejo de las Escuelas Polit¨¦cnicas Federales (EPF de Z¨²rich y de Lausanne) para un periodo de cuatro a?os. A su vez, el Consejo de las EPF nombra a los presidentes y rectores de ambas escuelas. En UC y EPF, el m¨¢ximo poder ejecutivo es ejercido por sus presidentes, los cuales no pueden ser profesores de las universidades, y tienen el poder inapelable de rechazar las propuestas de nombramientos de profesores vitalicios hechas por las distintas facultades, cuando lo juzgan necesario. Este mecanismo, conocido y probado, y existente tambi¨¦n en Inglaterra, evita la endogamia, la cual en las universidades p¨²blicas espa?olas constituye un esc¨¢ndalo nacional e internacional.
En la segunda quincena de septiembre de 2002 se celebr¨®, en la Facultad de Ciencias Matem¨¢ticas de la Universidad Complutense de Madrid, el I Congreso sobre Corrupci¨®n en la Universidad P¨²blica Espa?ola. Cien profesores de distintas universidades p¨²blicas debatieron los problemas que afectan a estas instituciones: endogamia, prevaricaciones, exclusi¨®n de profesores independientes o que se niegan a participar en la corrupci¨®n, etc¨¦tera. Las actas de este Congreso constituyen una verdadera cr¨®nica de horrores.
En el Manifiesto se afirma: "Ninguna de nuestras universidades forma parte de las cien mejores del mundo en resultados de investigaci¨®n". Evidente.
Por tanto, segunda medida: dotar a las universidades p¨²blicas y OPI de plena independencia del poder pol¨ªtico, por medio de sistemas de gobierno similares a los de las EPF suizas o de la Universidad de California. Porque la historia de las grandes universidades e instituciones cient¨ªficas del mundo apunta a un principio universal: todas han alcanzado la excelencia despu¨¦s de d¨¦cadas o siglos de estabilidad en los que se han regido por una serie de valores universales. Entre ¨¦stos ocupa un lugar clave la independencia del poder pol¨ªtico.
As¨ª que la pretensi¨®n de progresar r¨¢pidamente en ciencia y tecnolog¨ªa duplicando el presupuesto de I+D en el periodo desde el presente hasta el 2010 es s¨®lo una ilusi¨®n interesada. Primero hay que resolver los grav¨ªsimos problemas estructurales, de los que he mencionado algunos. Si esto no se hace, hay datos objetivos que permiten afirmar que el aumento de los presupuestos empeorar¨ªa la situaci¨®n a medio y largo plazo, quiz¨¢s de forma irreversible.
Claude All¨¨gre, ex ministro franc¨¦s de Educaci¨®n, Investigaci¨®n y Tecnolog¨ªa en el Gobierno de Jospin, en una comparecencia ante el Senado el 11 de octubre de 2001, trat¨® algunas de estas cuestiones. Dado que el CNRS es un organismo muy similar al CSIC, sus reflexiones tienen una relevancia obvia para la situaci¨®n espa?ola. Describi¨® al CNRS como un organismo de tipo sovi¨¦tico que funciona en circuito cerrado, es decir, con muy poca repercusi¨®n en la sociedad. La presi¨®n continua del mandarinato y de los sindicatos para aumentar el n¨²mero de mandarines ha conducido a una situaci¨®n en la que "en Francia sobran la mitad de los investigadores, mientras que los medios asignados por investigador son notoriamente insuficientes".
All¨¨gre declar¨® que para que una instituci¨®n funcione en circuito abierto, tiene que ser un vivero de empresas (spin-offs). Y cita como ejemplo a la Universidad de Cambridge, en cuyos alrededores hay un conjunto de 1.600 empresas de alta tecnolog¨ªa denominado Silicon Fen. El Imperial College of Science and Technology de la Universidad de Londres lleva a cabo investigaciones aplicadas que son el origen de dos nuevas empresas tecnol¨®gicas por mes. En Estados Unidos, el ejemplo emblem¨¢tico es la Universidad de Stanford, cuna de Silicon Valley. En la Universidad de Barcelona hay un parque cient¨ªfico que cuenta ya con 11 empresas en el ¨¢rea biom¨¦dica.
All¨¨gre manifest¨® que hoy no hay diferencia entre la investigaci¨®n b¨¢sica y la aplicada. Esto es discutible, aunque cierto en ¨¢reas como la biolog¨ªa molecular y la biotecnolog¨ªa. Sus objetivos son sintetizar mol¨¦culas con propiedades terap¨¦uticas espec¨ªficas contra diversas enfermedades (c¨¢ncer, Alzheimer, hipertensi¨®n...). Los OPI espa?oles dedicados a la biolog¨ªa molecular deber¨ªan tener los mismos objetivos que compa?¨ªas como Serono (Ginebra) y Almirall Prodesfarma (Barcelona). Serono ha desarrollado medicamentos como Rebif, utilizado para el tratamiento de la esclerosis m¨²ltiple; desde su aprobaci¨®n en 2002 por la Federal Drug Administration (FDA), Rebif ha ganado el 12,5% del mercado de Estados Unidos en esta especialidad. Almirall Prodesfarma es la primera compa?¨ªa farmac¨¦utica espa?ola que logr¨® la aprobaci¨®n de la FDA para un medicamento propio (mayo de 2001). ?ste se comercializa en Estados Unidos bajo el nombre de Axert, y en Espa?a, bajo el de Almotriptan. Es eficaz contra los dolores agudos de cabeza de las migra?as.
El director de I+D de Almirall Prodesfarma es Jos¨¦ Mar¨ªa Palacios. Es uno de los 11 cient¨ªficos espa?oles que figuran entre los cient¨ªficos m¨¢s citados en las revistas cient¨ªficas internacionales (Institute for Scientific Information de Filadelfia, ISI). Fue profesor de investigaci¨®n en el CSIC en 1990-1993 y renunci¨® a su condici¨®n de funcionario para trabajar en el sector privado.
Con ocasi¨®n de las recientes manifestaciones de cient¨ªficos en Francia, en protesta contra los recortes presupuestarios del Gobierno (EL PA?S, 10 de marzo de 2004), dos premios Nobel, un ganador de la medalla Fields (m¨¢xima distinci¨®n mundial en matem¨¢ticas) y el director del Instituto Pasteur han declarado que lo eficaz ser¨ªa crear peque?os centros de investigaci¨®n muy aut¨®nomos ligados a las universidades, en vez de mantener al CNRS, una burocracia sovi¨¦tica con 25.000 funcionarios cuya edad media es de 47 a?os.
Las instituciones burocr¨¢ticas como el CNRS y el CSIC son n¨®minas estatales cuya met¨¢stasis hay que evitar, si no es posible eliminarlas por completo.
Jos¨¦ Canosa es doctor en F¨ªsica Aplicada por la Universidad de Harvard y antiguo investigador en el Centro Cient¨ªfico de IBM en Palo Alto.
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