El 'show' persigue al Madrid
El equipo, que buscaba intimidad en La Manga, se entrena ante 1.200 aficionados y 14 cadenas de televisi¨®n

La contradicci¨®n entre las pasiones humanas y las pretensiones del Real Madrid se dirimi¨® en un campo de cebollas. En un valle donde las urbanizaciones de lujo y los complejos de golf avanzan sobre las huertas, a diez kil¨®metros de La Manga, en Murcia. Con r¨¢fagas de viento fr¨ªo y bajo un cielo encapotado. Todo presenciado en vivo por unos 1.200 aficionados y retransmitido por 14 televisiones. Entre ellas la brit¨¢nica Sky, que contaba con unidad m¨®vil como parte de un seguimiento especial a Beckham, en una jornada que culmin¨® con una entrevista exclusiva a Rebeca Loos, la ex asistenta personal del jugador, que anoche paraliz¨® Inglaterra al revelar una presunta relaci¨®n amorosa. ?C¨®mo se siente David con ese problema? "Esta noche lo veremos a las diez en Sky", contest¨® Solari.
La concentraci¨®n del Madrid para preparar su partido con el Atl¨¦tico comenz¨® con los jugadores lejos del silencio buscado. Escuchando de la muchachada murciana cosas en pleno entrenamiento como: "?A por uvas Casillas...! ?Abre aqu¨ª m¨¢s r¨¢pido Borja...! ?Que est¨¢n haciendo la presi¨®n y no sabemos c¨®mo romperla...!".
El lunes pasado, tras perder por goleada ante Osasuna, dijo Jorge Valdano, el director general deportivo, que el Madrid necesitaba buscar la "intimidad" de un lugar que permitiera a su entrenador, Carlos Queiroz, corregir errores "alzando la voz" sin que la prensa magnificase nada. Los t¨¦cnicos quer¨ªan sosiego y aislamiento despu¨¦s de que el lunes una docena de aficionados increparan a los jugadores en el ensayo. Pero era demasiado tarde. El club que ha buscado la publicidad con m¨¢s denuedo en el mundo ya no puede zafarse. Ahora donde va, va el show. As¨ª que la cadena de guardias de seguridad que cerraron la calle que bordeaba el campo no pudo evitar que los aficionados se colasen a trav¨¦s de los sembrad¨ªos. Eran cientos y las unidades de la Guardia Civil que se acercaron a la zona no hicieron nada por garantizar la discreci¨®n estrat¨¦gica que reclama el derby.
Las ¨²nicas voces que se alzaron fueron las de los hinchas murcianos. Los jugadores se hab¨ªan retirado a una cancha lejana. Comenzaban a entrenarse bajo la mirada vigilante de Valdano y Butrague?o cuando la muchedumbre rompi¨® el cerco tirando por un naranjal y un campo de cebollas listas para ser cosechadas. Los hinchas se agolparon contra la valla para ver algo que los decepcion¨®. "?Y luego nos quejamos de los entrenamientos de Toshack!", se asombr¨® un lugare?o. "?Si ¨¦ste es el ritmo de entrenamiento, tienen que ir helad¨ªsimos!".
Canal 9 de Valencia ofreci¨® el micr¨®fono a un seguidor ufano: "Esto no est¨¢ muy bien montado porque hab¨ªa un cord¨®n de guardias pero al final, por las buenas o por las malas, le hemos echado cojones y aqu¨ª estamos".
En Madrid hac¨ªa sol y calor. En Murcia llovi¨® a c¨¢ntaros. El entrenamiento prosigui¨® bajo un viento huracanado. Figo tir¨® un centro y el bal¨®n se fue alto. El portugu¨¦s se lament¨® haciendo un gesto al cielo. "?Venga Luis!", grit¨® un aficionado; "?que llevas raz¨®n, que no se puede jugar as¨ª...!" Otro lo apostill¨® apunt¨¢ndole con una c¨¢mara de foto: "?Luis mira pac¨¢!".
Despu¨¦s, Valdano acompa?¨® al capit¨¢n, Ra¨²l, y a Roberto Carlos con Solari para que dieran una conferencia de prensa. A Ra¨²l le preguntaron si era necesario dejar Madrid para entrenarse: "Bueno... El entrenador ha cre¨ªdo necesario cambiar los h¨¢bitos. El lunes nos propuso su intenci¨®n de hacer esto a m¨ª y a Salgado. Dimos nuestro punto de vista y ¨¦l nos convenci¨®. Acatamos. El grupo est¨¢ m¨¢s unido que nunca".
Roberto Carlos, por su parte, desminti¨® tener un precontrato firmado con el Chelsea. "Toda la gente sabe que mi intenci¨®n es terminar mi carrera en el Madrid y retirarme en el 2010. Ayer habl¨¦ con Valdano y seguir¨¦ muchos a?os". Esto dijo el brasile?o bajo la mirada atenta de Valdano. Pero detr¨¢s de las bambalinas hay una negociaci¨®n que dura m¨¢s de un a?o. Roberto Carlos pide mucho m¨¢s dinero por renovar del que Florentino P¨¦rez, el presidente, quiere darle. El lateral zurdo, que termina contrato en 2005, ha llegado a un acuerdo con el Chelsea y fuerza al Madrid a apostar. Desde el club le dicen que si quiere marcharse pague su cl¨¢usula: 80 millones.

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