Una rara curiosidad
Se burla S¨¢nchez-Ostiz, a su modo abroncado, en su ¨²ltima novela, La nave de Baco, de esa costumbre que tuvieron algunos escritores o editores (los malentierra con tan f¨¢ciles seud¨®nimos que s¨®lo con la punta de la alpargata el lector descubre, a poco que se lo proponga, rostros y rastros) por poner en circulaci¨®n "raros" y "olvidados", y valorizarlos. El escritor navarro se refiere a los zahor¨ªes de su generaci¨®n, a los que, as¨ª de paso, lanza una colleja, y lo cierto es que muchos de estos "raros" ya fueron sacados de la fosa com¨²n hace mucho tiempo y removidos los huesos por aquel simp¨¢tico superviviente de la ¨¦poca, don Federico Carlos Sainz de Robles, autor entre otros libros (menores) de un "austral" c¨¦lebre: La promoci¨®n de "El Cuento Semanal" (1907-1925), donde se da pormenorizada noticia de todos aquellos raros, bohemios/golfemios, escritores de colecciones populares, algunos muy jaleados en la ¨¦poca, y que se ganaban, con sus novelas galantes y sical¨ªpticas (ellos s¨ª que s¨ª) sus buenos duros de plata.
LAS "LOCAS" DE POST?N/A SODOMA EN TREN BOTIJO
?lvaro Retana
Odisea. Madrid, 2004
237 p¨¢ginas. 16,95 euros
Entre estos "raros" est¨¢
?lvaro Retana, que naci¨® en alta mar, viniendo de Filipinas y que se maquill¨®, todo lo que pudo, vida y rostro, y que muri¨® en "extra?as circunstancias", que dir¨ªa un redactor de sucesos, en 1970, nada menos, a manos de un "chapero", acaso. "Cofre de fervores sensuales", lo llam¨®, a Retana, el joven Buscarini (¨¦ste es un "raro" que apadrin¨®, en una etapa de su vida, Juan Manuel de Prada), y el propio Luis Antonio de Villena, que prologa esta bonita edici¨®n de dos novelas cortas, de tem¨¢tica gay, del "tercer sexo", como lo denominaba el propio Retana, y que aparece en una editorial gay y en una muy cuidada colecci¨®n (Gide, Genet, Robert Hichens) que lleva por t¨ªtulo, muy del gusto de la ¨¦poca primera de Retana, Uranitas. Se ha ocupado m¨¢s de una vez, De Villena, digo, de este escritor que, junto a Hoyos y Vinent, es, que uno conozca, de lo mejor de aquellos raros y olvidados, uranitas y, en el caso de Hoyos, arist¨®cratas. Es interesante, pues, el pr¨®logo de De Villena y a¨²n m¨¢s lo es el libro que hace unos a?os le dedic¨® (y a ¨¦l me remito), El ¨¢ngel de la frivolidad y su m¨¢scara oscura (vida, literatura y tiempo de ?lvaro Retana) (Pre-Textos, 1999). Y qu¨¦ decir de estas dos novelitas de Retana, las que motivan estas l¨ªneas, pues que son, ciertamente, curiosas por constituir un testimonio de literatura gay de la ¨¦poca, por c¨®mo abordan el tema de las relaciones homosexuales, porque tienen algo de novela ¨¤ clef porque poseen ciertamente ritmo y, en ocasiones, humor, aunque no puede uno evitar tener la sensaci¨®n de que muchas de esas p¨¢ginas parecen chistes malos de "mariquitas"; hay escenas que, le¨ªdas ahora, producen un cierto sonrojo. El Retana (algo m¨¢s) valioso est¨¢ en el libro de De Villena, esto es m¨¢s una curiosidad, y poco m¨¢s.
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