Rafael Mart¨ªnez, el segundo mejor gimnasta de Europa
Ning¨²n espa?ol, desde Blume en 1957, hab¨ªa logrado una medalla en un concurso absoluto
Desde 1957 no hab¨ªa un espa?ol entre los mejores gimnastas de Europa. Al menos entre los m¨¢s completos, entre los que se entrenan y compiten en los seis aparatos. Las pocas alegr¨ªas que este deporte ha dado desde entonces llegaron de la mano de especialistas, como los dos Mundiales de barra fija de Jes¨²s Carballo o el oro ol¨ªmpico en salto de Gervasio Deferr. El madrile?o Rafael Mart¨ªnez, 20 a?os, rompi¨® ayer esta racha y estuvo a punto de emular la gesta del legendario Joaqu¨ªn Blume, que en ese a?o 1957 logr¨® el t¨ªtulo europeo. Se qued¨® un pelda?o por debajo en los Campeonatos de Europa que terminan hoy en Ljubliana (Eslovenia).
Tanto a ¨¦l como al seleccionador espa?ol, ?lvaro Montesinos, el resultado les supo a oro porque Mart¨ªnez fall¨® en anillas -"me qued¨¦ sin fuerzas y tuve que corregir sobre la marcha"- y estuvo lejos de sus posibilidades en salto, uno de los aparatos donde ha logrado sus mejores resultados -noveno en los mundiales de 2002- y donde ayer se qued¨® en 9,325. Y porque el campe¨®n, el rumano Marian Dragulescu, tiene m¨¢s experiencia que ¨¦l, lo que significa m¨¢s nombre en un deporte en el que el reconocimiento cuenta casi tanto como la nota de partida.
Aunque Rafael Mart¨ªnez es pr¨¢cticamente desconocido, su resultado no sorprende a nadie. De hecho, el mundo de la gimnasia esperaba que su explosi¨®n internacional se produjera en los mundiales de Anaheim (EE UU) del verano pasado. En esa cita, sin embargo, le pudieron los nervios: acab¨® en 19? posici¨®n y por detr¨¢s de V¨ªctor Cano.
El mismo Mart¨ªnez que empez¨® a entrenarse con seis a?os y se proclam¨® campe¨®n nacional con 13, aseguraba ayer que aspiraba a estar entre los mejores: "Sab¨ªa que si lo hac¨ªa bien pod¨ªa estar entre los cinco primeros y me ha ayudado mucho empezar muy tranquilo", reconoc¨ªa poco despu¨¦s de la competici¨®n. Quer¨ªa llegar al podio y deb¨ªa estar muy seguro, pues sus padres, que no estuvieron en Anaheim, lo vieron desde la grada.
"Es un talento, un gimnasta muy completo. Pod¨ªa haber sido primero", le define Montesinos. Se qued¨® a tan s¨®lo 87 cent¨¦simas. Y eso que Ljubliana es la ¨²ltima cita importante antes de los Juegos Ol¨ªmpicos, por lo que todos los gimnastas europeos con aspiraciones ol¨ªmpicas est¨¢n all¨ª: rumanos y rusos, sobre todo. Faltan, eso s¨ª, otras potencias de este deporte que s¨ª estar¨¢n en Atenas, como chinos, japoneses y estadounidenses.
Mart¨ªnez tiene una gran coordinaci¨®n, buenos reflejos, mucha velocidad y un cuerpo apropiado para la gimnasia: muy fibroso, mide menos de 1,65 metros y pesa alrededor de 60 kilos, seg¨²n los datos oficiales. Para ¨¦l, sin embargo, ¨¦ste es un deporte "de cabeza", en el que si te propones algo, lo consigues. Por eso se entrena seis horas diarias.
A favor del gimnasta madrile?o ha jugado tambi¨¦n la evoluci¨®n de esta disciplina. Si en 1957 y hasta hace muy poco los gimnastas deb¨ªan competir en todos los aparatos, ahora pueden optar por la especializaci¨®n, por preparar s¨®lo algunas pruebas. Es lo que han hecho Deferr, Carballo y muchos otros y es lo que ha reducido el n¨²mero de aspirantes al t¨ªtulo absoluto. Eso no quiere decir que Mart¨ªnez, que en sus ratos libres pincha m¨²sica, no tenga sus pruebas fuertes: destaca en paralelas y potro con arcos, aunque sus mejores resultados internacionales han sido en salto y suelo. Hoy participa en la final de suelo.
El resultado de ayer le har¨¢ olvidar adem¨¢s la dureza de un deporte que abandon¨® por nueve meses y al que volvi¨® poco a poco. Y le da alas, a ¨¦l y al equipo, de cara Atenas: "mi objetivo [en los Juegos Ol¨ªmpicos] es estar entre los ocho primeros", asegura.
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