Diez republicanos y una Infanta que habla catal¨¢n

Estuvieron a punto de no ir y al final se convirtieron en protagonistas. Los ocho diputados de Esquerra Republicana de Catalunya, situados en el centro del Sal¨®n de los Pasos Perdidos, parec¨ªan encantados con la compa?¨ªa de la familia real en el acto de apertura solemne de la legislatura. Y eso que ni siquiera pensaban acudir hasta que su l¨ªder, Josep Llu¨ªs Carod Rovira, dio la orden a eso de las 11 de la noche del mi¨¦rcoles. As¨ª que todos para Madrid, disciplinados y contentos. Tanto que ocho diputados y dos senadores republicanos rodearon por completo a la infanta Cristina cuando se acerc¨® a saludarles. Todos la agasajaron muy sonrientes.

La Infanta, que es madrile?a pero vive en Barcelona desde hace a?os, los conquist¨® hablando catal¨¢n despacio, excus¨¢ndose a ratos. "Es que me cuesta un poco, pero lo entiendo perfectamente". Todos quer¨ªan darse el lujo de charlar con ella en su lengua materna. En ese idioma le pregunt¨® Rosa Mar¨ªa Bon¨¢s, la ¨²nica mujer en el grupo de ERC: "?C¨®mo se siente rodeada de republicanos?". La Infanta sonri¨® y contest¨®: "?Muy bien!", en el tono divertido que domin¨® toda la conversaci¨®n.

Los diputados de Esquerra, que se hab¨ªan negado a aplaudir el discurso del Rey e incluso dudaron en ponerse en pie cuando concluy¨®, se entregaron luego al di¨¢logo con la familia real. Tambi¨¦n la Reina se acerc¨® a saludarles.

Alicia S¨¢nchez Camacho, diputada del PP por Girona, tambi¨¦n se mezcl¨® en el grupo de los republicanos y habl¨® con la Infanta en catal¨¢n. Ayer no hab¨ªa ese tipo de disputas pol¨ªticas, aunque tampoco era el d¨ªa de la oposici¨®n: tanto Mariano Rajoy como Rodrigo Rato se marcharon enseguida.

Pero lo que domin¨® ayer casi todos los corrillos del Congreso no fue el asunto del catal¨¢n, sino el Madrid-Bar?a del pr¨®ximo domingo. El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, cul¨¦ confeso, apost¨® en una porra con periodistas por el 1-2 a favor de su club. Y luego se fue a buscar cobijo futbol¨ªstico entre el grupo de diputados de ERC, donde el Bar?a domina. Ellos le agradecieron que no haya disimulado esa afici¨®n y ¨¦l les confes¨® que durante todos estos a?os en la sede del PSOE en Ferraz se ha sentido "rodeado de madridistas". "Sonaba el himno por todas partes", recordaba entre risas de los republicanos.

En La Moncloa, el palacio en el que durmi¨® Zapatero con su familia por primera vez en la noche del mi¨¦rcoles, la cosa va a ser completamente diferente, seg¨²n sus previsiones. Su equipo ten¨ªa ayer muchos defensores en el Congreso. Joan Puigcerc¨®s, portavoz de ERC, salud¨® a I?aki Urdangar¨ªn en el tradicional besamanos con un "visca el Bar?a".

Los nacionalistas vascos y catalanes se amoldaron tambi¨¦n al desfile del Ej¨¦rcito, aunque Puigcerc¨®s se re¨ªa ostensiblemente cuando los soldados gritaban, mirando hacia la tribuna donde estaba ¨¦l, "?viva Espa?a!".

Santiago Carrillo, ex secretario general del PCE, segu¨ªa en la distancia el desfile. Despu¨¦s de un rato coment¨®: "La verdad es que lo hacen muy bien. A m¨ª estas cosas no me gustan, pero les queda aparente. Recuerdo que en 1977 fue un desastre, todo descoordinado. Siempre pens¨¦ que los jefes militares de entonces odiaban tanto eso del Parlamento democr¨¢tico que organizaron el desfile mal a prop¨®sito".