Una raci¨®n de bacalao al pil-pil

Una novela c¨®mica sobre asuntos serios. As¨ª es la nueva novela de Carlos Eugenio L¨®pez, un autor que sabe renovar su arsenal expresivo en cada nueva entrega. En El factor Rh la trama avanza mediante peque?os impulsos que poco a poco perfilan personajes, ambientes y situaciones. Las diversas escenas tienen una entidad propia bien definida y establecen entre s¨ª una relaci¨®n de contraste. Detalles como el sue?o que tiene una mujer de su marido nadando en un charco de sangre adquirir¨¢ al final un siniestro sentido. Los heterog¨¦neos personajes van haciendo su aparici¨®n y a casi todos sabe sacarles el autor un buen rendimiento, quiz¨¢ con la excepci¨®n de una ni?a que no encaja demasiado en la historia. El autor utilizando con gran habilidad la elipsis da a conocer algunos hechos y esconde muchos otros. En definitiva, una buena construcci¨®n narrativa que muestra habilidades que L¨®pez no hab¨ªa manejado en otras obras.

He aqu¨ª algunos de esos personajes: un pat¨¦tico entrenador de f¨²tbol, ex jugador fracasado a causa de una lesi¨®n al que burlonamente llaman Beckenbauer, el presidente del Athletic Club que no comprende c¨®mo su criada dominicana cocina tan bien el bacalao al pil-pil no siendo vasca, un buen surtido de etarras esperando entrar en acci¨®n y sosteniendo conversaciones que el narrador ve con sarcasmo sobre la antropolog¨ªa de los vascos, etc¨¦tera.

La novela es divertida y atrayente por el descaro con que se nos cuentan los variopintos sucesos, la iron¨ªa con que son presentadas las reflexiones de diversos individuos, la comicidad a flor de piel y el lenguaje y los temas tan pol¨ªticamente incorrectos, una opci¨®n que el autor ha tomado a conciencia. El t¨ªtulo evoca con facilidad el tema que conecta los acontecimientos y los err¨¢ticos y dispersos movimientos de los personajes. La presencia de terroristas de ETA acerca la acci¨®n a los asuntos m¨¢s dram¨¢ticos de la actualidad y si bien la novela presenta variedades entre esos personajes (al fondo se insin¨²an historias de amores frustrados) destaca, sobre todo, la valoraci¨®n negativa que el autor ofrece de sus pensamientos. El recurso al sarcasmo es aqu¨ª fundamental. Un etarra nos dice que los manzanos del Pa¨ªs Vasco son los mejores del mundo porque provienen directamente del ¨¢rbol del para¨ªso terrenal y otro sentencia que "los porteros del Athletic son como el ¨¢rbol de Guernika".

El motivo argumental m¨¢s din¨¢mico es el Athletic Club y una crisis que le lleva al borde de la segunda divisi¨®n. Se le propone sustituir al portero llamado Zenarrutzabeitia, un desastre, por uno de raza negra que pondr¨ªa en evidencia que no es vasco. Un agravio para los m¨¢s fan¨¢ticos. El tono de las conversaciones a que el asunto da lugar es de este calibre: alguien pregunta el nombre del jugador, "Kakanka" se le responde, "?todo con ka?", "todo", "algo es algo".