Uribe prepara un segundo mandato como presidente de Colombia
El Senado colombiano abre el camino para la reelecci¨®n inmediata del jefe del Estado
La posibilidad de que el presidente de Colombia, ?lvaro Uribe, figure en la baraja de candidatos a las pr¨®ximas elecciones de 2006 se abre camino. La comisi¨®n pol¨ªtica del Senado aprob¨® el jueves pasado, en primer debate, un proyecto de ley de reforma constitucional para permitir la reelecci¨®n inmediata del jefe del Estado. Son necesarios siete debates m¨¢s, en una carrera contrarreloj en la que el Gobierno esta dispuesto a jug¨¢rsela.
De reelecci¨®n se viene hablando desde finales del a?o pasado, pero en los ¨²ltimos d¨ªas ha acaparado la atenci¨®n pol¨ªtica del pa¨ªs. El presidente Uribe, que se hab¨ªa mantenido al margen, destap¨® sus cartas. "Es importante que esta patria nuestra, que tanto ha sufrido por al debilidad del Estado y que empieza a encontrar un caminito, no crea que eso es flor de un d¨ªa", dijo mostrando su claro inter¨¦s en mantenerse en el poder. El propio presidente llam¨® a una emisora de radio para pedir que le entrevistaran y poder defenderse de los ataques de un senador que lo acusaba de estar entregando puestos diplom¨¢ticos a cambio de apoyo para la reelecci¨®n.
Denuncias por favores pol¨ªticos y acuerdos con compromisos de cargos burocr¨¢ticos con los conservadores han hecho mella en la credibilidad presidencial de Uribe, que lleg¨® al poder tras ofrecer mano dura contra la politiquer¨ªa y los abusos de cargos burocr¨¢ticos.
En el texto legal aprobado el jueves se incluy¨® a ¨²ltima hora la posibilidad de reelecci¨®n de alcaldes y gobernadores. Si la iniciativa sale adelante, Uribe podr¨ªa utilizar los ¨²ltimos dos meses de su mandato para hacer campa?a. La financiaci¨®n de todos los candidatos ser¨ªa estatal.
Los promotores de la reelecci¨®n defienden la iniciativa a capa y espada. Ya tienen listo el plan B por si no se aprueba la reforma constitucional en el Congreso: listas de firmas para respaldar un proyecto paralelo de iniciativa popular. Para ellos el pa¨ªs ir¨ªa al despe?adero si no se logra la continuidad. Y se amparan en las encuestas que dan un 72% de apoyo a la propuesta del primer mandatario.
"Si este pa¨ªs fuera serio, las protestas por promover el cambio de la Constituci¨®n para quedarse en el poder se oir¨ªan de aqu¨ª a Marte", dice en su columna de la revista Semana el analista Hernando G¨®mez Buend¨ªa, uno de los m¨¢s duros cr¨ªticos. Los opositores atacan el af¨¢n presidencial de cambiar las reglas de juego sobre la marcha , de modificar la legislaci¨®n en beneficio propio, de desviar el inter¨¦s de lo realmente urgente. Recuerdan que, siendo candidato, Uribe habl¨® en contra de esta opci¨®n. El Ej¨¦rcito colombiano, por otro lado, ha encontrado una fosa com¨²n con varios cad¨¢veres en una zona cercana al lugar donde hace dos semanas se vio envuelto en un confuso incidente armado el jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Carlos Casta?o, informa la agencia Efe.
Ataque a Casta?o
La informaci¨®n fue divulgada ayer por el informativo de televisi¨®n Caracol Noticias, seg¨²n el cual una comisi¨®n de la fiscal¨ªa se desplazar¨¢ en las pr¨®ximas horas al lugar para establecer las identidades de los cad¨¢veres. Desde el 16 de abril pasado sigue envuelta en el misterio la suerte del jefe de las AUC, quien supuestamente sufri¨® un atentado en una finca ubicada entre los departamentos de C¨®rdoba y Antioquia, 700 kil¨®metros al noroeste de Bogot¨¢. Otra versi¨®n dice que Carlos Casta?o muri¨® estrangulado durante un enfrentamiento armado entre paramilitares y que fue sepultado en las proximidades del lugar donde tuvieron lugar los choques.
Las AUC fueron creadas hace m¨¢s de 22 a?os para combatir a los guerrilleros de izquierda, y desde entonces han cometido m¨²ltiples matanzas, asesinatos selectivos y violaciones de los derechos humanos. Las AUC, con unos 13.000 militantes, anunciaron una tregua unilateral en diciembre de 2002 y abrieron negociaciones con el Gobierno. Pero la petici¨®n de extradici¨®n de Casta?o por parte de EE UU -bajo cargos de narcotr¨¢fico-, y el problema de la entrega de armas de los rebeldes, tienen el proceso de paz estancado desde comienzos de este a?o.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.