La soldado England, pesadilla de Bush

Lynndie England es la imagen de la cat¨¢strofe; el s¨ªmbolo que ha acabado de matar la inocencia en la ocupaci¨®n estadounidense de Irak. Lynndie, una soldado de 21 a?os de la 372? Unidad de Polic¨ªa Militar, perteneciente a la reserva, de pelo corto y cuerpo menudo, aparece en una foto publicada ayer por primera vez en que sostiene una correa atada al cuello de un iraqu¨ª desnudo y tumbado en un pasillo de la c¨¢rcel de Abu Ghraib. La foto se tom¨® en oto?o de 2003. England est¨¢ ahora destinada en Carolina del Norte.

Como otro mazazo sobre la avergonzada sociedad estadounidense cayeron ayer los nuevos testimonios publicados por The Washington Post de los malos tratos de prisioneros iraqu¨ªes en la c¨¢rcel de Abu Ghraib, cerca de Bagdad. El diario indic¨® que maneja m¨¢s de 1.000 fotograf¨ªas digitales, entre las que se mezclan las inocentes poses tur¨ªsticas de soldados ante mezquitas con las pruebas de los abusos y humillaciones: el iraqu¨ª con la correa al cuello, los presos amontonados desnudos, el detenido atado a una litera met¨¢lica con la cabeza cubierta por unas bragas... Y otras en las que hay soldados que simulan actos sexuales entre ellos, o que se fotograf¨ªan con un macabro fondo de iraqu¨ªes heridos o muertos, aparentemente en batalla, o con una vaca despedazada o un gato sin cabeza. El presidente George W. Bush dijo ayer que las im¨¢genes le pon¨ªan "enfermo del est¨®mago" y volvi¨® a lamentar "la humillaci¨®n de los presos y sus familias".

La proliferaci¨®n de las c¨¢maras digitales y la facilidad del env¨ªo electr¨®nico de las fotos a familiares o amigos ha hecho que las barbaridades hayan quedado reflejadas para siempre. Estas y otras fotograf¨ªas pertenecen al informe encargado por el Ej¨¦rcito en enero y finalizado en marzo en el que se concluy¨® que hubo "numerosos incidentes de abusos s¨¢dicos, evidentes y gratuitos". Es evidente que el informe, aun denunciando sin suavizar lo ocurrido, jam¨¢s hubiera levantado la oleada de indignaci¨®n s¨®lo con el texto. Esta vez una foto s¨ª vale por mil palabras.

?Por qu¨¦ se tomaron las fotos? Seg¨²n dos de los abogados de los soldados acusados en la investigaci¨®n abierta que cita el Post, interesados, obviamente, en desviar la responsabilidad, los mandos de la inteligencia militar a cargo de los interrogatorios de los prisioneros ordenaron a los soldados hacer las fotos para humillar a los detenidos y obligarles, a ellos y a otros, a declarar. Se trata de una de las preguntas pendientes que las autoridades militares deben a¨²n responder, adem¨¢s de otras relacionadas con la presencia de civiles en interrogatorios y en el tratamiento de los prisioneros. El padre de otro soldado implicado en las investigaciones asegura que a su hijo le encargaron que las hiciera y que ¨¦l cumpli¨® ¨®rdenes.

En el mismo diario, amigos y familiares de la soldado Lynndie England -que apareci¨® en las primeras fotos con un cigarrillo en la boca y simulando que disparaba a los genitales de un preso iraqu¨ª desnudo- aseguran que las fotos son un montaje y que "Lynn no es as¨ª". Su padre a?ade que Lynn trabajaba en la burocracia carcelaria, tomando huellas y llenando fichas, y que unos soldados le pidieron que posara para las fotos. La soldado le ha dicho a su madre: "Estaba en el peor sitio y en el momento inoportuno".