La debacle

O sea, en castellano permanente, el desastre. La palabra era el canto del cisne de los chicos y las chicas de Manuel Antonio Rico en RNE, que dice que ha dimitido porque no acepta la doctrina del nuevo director, Pedro Piqueras -todas las esperanzas; ya veremos- de que la informaci¨®n no debe mezclarse con la opini¨®n. Curioso: ese Rico me expuls¨® de su programa porque tengo y manifiesto opini¨®n. Otra. Dimiti¨® el viernes: pero el lunes su programa hubiera sido suspendido, porque ya no habr¨¢ tertulias en Radio Nacional hasta que pasen las elecciones europeas del 13 de junio. Veremos qu¨¦ pasa despu¨¦s: quiz¨¢ las restaure con otras. "Ya que do?a Leonor no me concede su blanca mano, renuncio a la mano de do?a Leonor", dijo Manuel Antonio: fuese y no hubo nada. La debacle que anunciaban sus contertulios no era la de ellos, desgraciadamente privados de sus pagos, sino la del partido que todav¨ªa defend¨ªan: el Popular, que, simult¨¢neamente a esa pat¨¦tica salida de micr¨®fono, ca¨ªa diez puntos con respecto al socialista en la encuesta del CIS, y Rajoy no llegaba a aprobar frente a un Zapatero sobresaliente. Importante auscultaci¨®n: muestra que el vuelco electoral del 14 de marzo no era una aventura, sino una convicci¨®n. La debacle -del franc¨¦s, d¨¦b?cle- salt¨®, en efecto, por la matanza de Madrid -la masacre, por seguir con el franc¨¦s, que a fin de cuentas es latino-; pero no por ella en s¨ª, sino por la larga, permanente, mentira del alobado Gobierno que la gente no le admiti¨®: luego, por la convicci¨®n m¨¢s lenta de que fue as¨ª, y de que es mejor Zapatero que Rajoy, como se hab¨ªa visto en la campa?a, y que es m¨¢s de centro el PS que el PP. Muchos de los que votaron todav¨ªa a Aznar el 14 de marzo le niegan ya en esta encuesta: alguna venda ha ca¨ªdo de sus ojos pol¨ªticos. Todav¨ªa el jueves se manifestaban los diputados de la debacle con el mito fascistoide del bloque unido, y votaban a favor de la guerra de las torturas frente a una mayor¨ªa enorme de los ciudadanos espa?oles.

Va a tener que hacer algo el PP despu¨¦s de las elecciones europeas -antes no tiene tiempo: ni ganas, ni sabe- para sobrevivir. Ya s¨¦ que aqu¨ª me mandan que un rumor no es una noticia; pero mantengo que hay noticias de un rumor: en su pr¨®ximo congreso, un cambio de la pol¨ªtica de bloque, una reestructuraci¨®n y una tendencia fuerte hacia Ruiz Gallard¨®n (?no iba a ser hacia Esperanza Aguirre, debaclista!). Dicen que Alberto no hubiera perdido las elecciones. No estoy tan seguro.