Maragall acoge la idea de crear un laboratorio de la diversidad ling¨¹¨ªstica

Lleno total, m¨¢s de 400 asistentes, y cierre anticipado de inscripciones. As¨ª empez¨® ayer el di¨¢logo Diversidad ling¨¹¨ªstica, sostenibilidad y paz. El maestro de ceremonias fue el socioling¨¹ista brit¨¢nico David Crystal, quien insisti¨® en la necesidad de un centro para documentar las 3.000 lenguas en peligro que hay en el planeta. Tras su intervenci¨®n, el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, abog¨® por convertir a Catalu?a en "un centro mundial de referencia de la diversidad ling¨¹¨ªstica". "?sta deber¨ªa ser la herencia del F¨®rum". "Quiz¨¢ se pudiera construir aqu¨ª un museo del lenguaje". "Ya lo veremos".

Distintas fuentes consultadas por este diario al terminar el acto afirmaron que no conoc¨ªan que hubiese ning¨²n proyecto en marcha. No descartaron que se tratara de una improvisaci¨®n repentina de Maragall, de esas que luego tienen consecuencias: se hacen. Sin relaci¨®n con esta idea que ayer aterriz¨® en el di¨¢logo, en el Ayuntamiento est¨¢n estudiando de qu¨¦ manera, tras el cierre del F¨®rum, aprovechar la exposici¨®n Voces.

En su discurso inaugural, David Crystal se salt¨® el acostumbrado, y adormedecedor, tono acad¨¦mico e hizo una vibrante defensa de la diversidad cultural. Adem¨¢s de afamado investigador, Crystal tiene un breve pasado como hombre de teatro y se not¨® en la dramaturgia de su conferencia. Documentar, dijo, las 3.000 lenguas en peligro del planeta costar¨ªa 600 millones de d¨®lares, "los ingresos de un d¨ªa por el petr¨®leo de la OPEC". Crystal destac¨® que hay mucha preocupaci¨®n ciudadana por conservar la diversidad de la fauna y la flora, pero que esta preocupaci¨®n apenas existe ante el drama de la muerte de las lenguas. Y desgran¨® 10 recomendaciones para combatirla. Para exponerlas, atribuy¨® a cada una de ellas una inicial que eran colgadas en una pizarra. Al final, con las 10 letras construy¨® la palabra ga¨¦lica amrywiaeth (diversidad) que luego utiliz¨® para escribir en ingl¨¦s "Yo odio la guerra". Tras su intervenci¨®n los aplausos fueron algo m¨¢s largos de lo que exige la cortes¨ªa. Entre sus recomendaciones figuraron la de prestar atenci¨®n a Internet, donde todo el mundo puede intervenir pero -"siempre hay un pero", dijo- el problema est¨¢ en que mucha poblaci¨®n no tiene acceso a la Red. Vinculado a ello est¨¢ el papel importante de los j¨®venes como futuros transmisores entre generaciones de las lenguas. Pero, insisti¨®, no hay que entorpecerles en sus usos idiom¨¢ticos con antip¨¢ticas imposiciones puristas. Crystal inici¨® un ataque contra los ortodoxos que defienden una lengua inamovible. "Las lenguas cambian porque las sociedades cambian. Las ¨²nicas lenguas que no lo hacen son las lenguas muertas. El cambio no es mejor ni peor, es s¨®lo cambio. Si re?imos a los j¨®venes por no hablar una lengua correcta no se sentir¨¢n orgullosos de su lengua y pueden abandonarla. El ingl¨¦s, con todo su poder¨ªo, tiene pr¨¦stamos de m¨¢s de 300 lenguas y el 80% de su vocabulario es de origen rom¨¢nico". Crystal insisti¨® en que la diversidad que hay que proteger no es s¨®lo la de las distintas lenguas sino la interior de cada idioma.

El concejal de Cultura, Ferran Mascarell, relat¨® el aprendizaje de Barcelona en la diversidad, una ciudad en cuyas calles se habla actualmente unas 100 lenguas. Maragall destac¨® la diversidad interna del catal¨¢n". "Es un idioma bandera dentro de todos los que corren el riesgo de perderse, porque ¨¦ste no se perder¨¢", asegur¨®, y puntualiz¨® que la lengua catalana "no se ha de defender. Hay que trabajar, expandir y llevar m¨¢s all¨¢ de sus fronteras internas y externas". Esta lucha, seg¨²n Maragall, debe ser amigable seg¨²n el "principio universal de mantenimiento de las identidades y de la diversidad contra la homogeneidad y el simplismo y, por tanto, contra el mercantilismo". Maragall est¨¢ convencido del vigor del catal¨¢n y dio, entre otros argumentos, su s¨®lida tradici¨®n cultural, el dinamismo de la sociedad que lo habla y la "actitud dign¨ªsima de un presidente que lo ha sido durante m¨¢s de 20 a?os", en alusi¨®n a Jordi Pujol, y volvi¨® a reivindicar su reconocimiento en la constituci¨®n europea.

Lenguas y paz

El di¨¢logo est¨¢ organizado por el F¨®rum y Linguapax. En realidad se trata del d¨¦cimo congreso de esta instituci¨®n que naci¨®, como record¨® su presidente, F¨¨lix Mart¨ª, del convencimiento de que proteger la diversidad ling¨¹¨ªstica es una contribuci¨®n para la paz. Tras recordar que el conflicto identitario ha estado en el origen de muchas guerras, Mart¨ª abog¨® por "dar futuro" a todas las comunidades ling¨¹¨ªsticas. En su charla defendi¨® una ciudadan¨ªa multiling¨¹e como instrumento de intercambio cultural. "Tres cuartas partes de la poblaci¨®n mundial es multiling¨¹e".

Un ejemplo personal de este hecho lo dio Elda Moreno, representante del Consejo de Europa, quien, en un viaje de la an¨¦cdota a la categor¨ªa para defender el multiling¨¹ismo, explic¨® que tiene or¨ªgenes espa?oles, habla franc¨¦s, trabaja habitualmente en ingl¨¦s, su marido es alem¨¢n y sus hijos, triling¨¹es". Moreno destac¨® el progresivo papel de la Carta Europea en favor de las lenguas regionales y minoritarias. Un total de 19 estados la han suscrito y expertos del Consejo tutelan su cumplimiento. La pr¨®xima semana, estos expertos visitar¨¢n Espa?a.