El tiempo de un orgasmo
Las parejas progres se disculpaban por casarse: "Es por mi madre", dec¨ªa ella. O ¨¦l: cada uno se casa seg¨²n la madre que tiene. Y se divorcia seg¨²n su capacidad de aguante; el divorcio comenz¨® a aparecer hace poco, cuando Paco Ord¨®?ez hizo la ley posible, pero injusta. Para divorcio, el de la Rep¨²blica. Ninguna de las libertades humanas ha vuelto a ser lo que fue entonces, dentro del sabotaje diario, a veces a tiros, de mon¨¢rquicos y cat¨®licos. A veces supone uno que ya todo va a cambiar, pero al cabo de un tiempo el p¨¦ndulo va en otro sentido. "Un paso atr¨¢s, dos pasos adelante", dec¨ªa el padre Marx, y durante muchos a?os fue as¨ª; luego se invirti¨® el camino. Puede que un paso atr¨¢s, como la boda del d¨ªa, seguramente "por complacer a mam¨¢", sea un paso adelante en el camino republicano: hay quien ve en el morado de las luces una luz precursora del color que ha de a?adirse a la bandera. Celebrada mientras el Gobierno que trata de recuperar los largos pasos atr¨¢s del anterior promete bodas de homosexuales resulta un acontecimiento raro en el corrimiento de tierras de las sociedades europeas. El matrimonio homo es una parte imperfecta de los pasos adelante: necesario, justo. El lejano ideal sea la desaparici¨®n del matrimonio. No digo de la pareja, en la que creo, sino de la condici¨®n p¨²blica del matrimonio y su entramado en el Estado, la sociedad civil, el sistema econ¨®mico. Yo siempre me emparej¨¦ por amor y me cas¨¦ por obligaci¨®n: la primera, en la iglesia del Buen Suceso, gran monumento hist¨®rico cuyo p¨¢rroco -Bulart, el que me cas¨®-, tambi¨¦n militar y capell¨¢n del Caudillo, vendi¨® despu¨¦s. La segunda en N¨¢poles, con el c¨®nsul general Zarraluqui vestido de uniforme de gala. ?C¨®mo me va a extra?ar que haya quien necesite una iglesia para dejar un ramo, y una catedral repintada por una pintura enloquecida hecha por fan¨¢ticos? Cierto que una pareja necesita unos acuerdos previos para segregar juntos sus humores sexuales y producir un ser que no se sabe qu¨¦ ser¨¢, deber¨¢n tener algunas precauciones contractuales, pero no veo por qu¨¦ han de ser p¨²blicas y por qu¨¦ las distintas administraciones p¨²blicas han de mezclarse en ello.
El matrimonio es una cuesti¨®n privada y el amor ha de ser libre, y no digamos el sexo, que es una parte importante del amor, incluso de tal forma que el sexo moment¨¢neo y libre implica una especie de rel¨¢mpago de amor mutuo: el tiempo de un orgasmo.
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