Los n¨²meros cantan

Cuando la Junta de Andaluc¨ªa ech¨® a andar en 1982 el porcentaje de mujeres en altos cargos era del 7,5%, seg¨²n datos del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM). 22 a?os m¨¢s tarde ese magro porcentaje asciende hoy al 32,6%. La meta es alcanzar la paridad, una palabra bajo la que tambi¨¦n se esconde una cifra: 40%, el umbral a partir del cual se considera que se preserva el principio de igualdad de g¨¦nero.

"Dentro de lo posible, procurad que en todos los escalones se cumpla la paridad", les pidi¨® el presidente de la Junta, Manuel Chaves, a los 14 miembros de su gabinete y lo posible ha sido que del total de 245 altos cargos de la Junta -excluyendo al presidente y a los consejeros-, 77 son mujeres, el 31,4%, seg¨²n los datos elaborados por este peri¨®dico, una cifra que representa alrededor de 12 puntos m¨¢s que en la anterior legislatura.

La paridad en la ejecutiva del PP es del 45%; en IU, del 30%; y en el PA, del 17,3%

Andaluc¨ªa supera al resto de autonom¨ªas en presencia femenina en altos cargos

La oposici¨®n ha visto un flanco para intentar sacar los colores a Chaves. Las cr¨ªticas han irritado profundamente a los socialistas andaluces, porque se consideran injustamente tratados y no ven reconocido el esfuerzo que han hecho desde que establecieron el criterio de cuotas de representaci¨®n en su partido, que les obliga a cumplir con la paridad en sus listas electorales y ¨®rganos de direcci¨®n, cuya ejecutiva est¨¢ integrada por un 48,3% de mujeres. Tan s¨®lo la direcci¨®n del PP -tras la remodelaci¨®n acometida por Javier Arenas- supera el 40%, mientras que Izquierda Unida presenta un 30% y el Partido Andalucista un 17,3%.

Las normas internas del PSOE son las que han empujado a que a d¨ªa de hoy el Gobierno andaluz est¨¦ integrado por un mayor n¨²mero de mujeres que de hombres (ocho consejeras y seis consejeros), una relaci¨®n que tambi¨¦n se da en el grupo parlamentario (31 diputadas de un total de 61).

"El 40% de los nuevos nombramientos lo ocupan mujeres. Se ha cumplido la directriz del presidente de la Junta", se revolvi¨® el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarr¨ªas, el pasado jueves en una comparecencia parlamentaria. "Lo que no hemos hecho ha sido cambiar a un director general que funciona por ser hombre", enfatiz¨®. Y a?adi¨®: "El Gobierno de Andaluc¨ªa es el que tiene el porcentaje mayor de mujeres de toda Europa, salvo algunos pa¨ªses n¨®rdicos en determinados periodos".

El Gobierno de la Junta de Andaluc¨ªa se halla a la cabeza de los ejecutivos auton¨®micos en la relaci¨®n de paridad en los altos cargos (ver gr¨¢fico adjunto). Chaves quiere que este asunto forme parte de la agenda pol¨ªtica de todos los partidos en esta legislatura para que mediante ley se recoja la obligatoriedad de la igualdad en las listas electorales.

Ya en la llamada ley de acompa?amiento de los presupuestos de la Junta de Andaluc¨ªa para 2004 se introdujeron medidas novedosas para su regulaci¨®n. Todas las leyes y reglamentos de la comunidad aut¨®noma requieren previamente a su aprobaci¨®n un informe de evaluaci¨®n de impacto de g¨¦nero. Adem¨¢s, en todos los ¨®rganos consultivos y de asesoramiento de la Administraci¨®n auton¨®mica deben contemplar "en su creaci¨®n, modificaci¨®n o renovaci¨®n" una presencia paritaria.

Un repaso por cinco comunidades aut¨®nomas -Galicia, Pa¨ªs Vasco, Catalu?a, Comunidad Valenciana y Comunidad de Madrid- arroja el siguiente resultado sobre la presencia de mujeres en altos cargos.

- Galicia. El Gobierno de Manuel Fraga (PP) es de los cinco ejecutivos analizados el que m¨¢s alejado se halla del reparto equitativo de cargos entre hombres y mujeres. Apenas dos consejeros se sientan en un gabinete integrado por 14 departamentos. Y tan s¨®lo el 22,2% de sus altos cargos son mujeres.

En la ¨²nica consejer¨ªa donde se cumple el criterio de la paridad es en la de Familia. El veterano presidente gallego nunca ha sido partidario de explorar pol¨ªticas espec¨ªficas dirigidas a la mujer y es la ¨²nica comunidad, que accedi¨® a su autogobierno por el art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n, que no tiene en su organigrama un instituto de la mujer. Por deseo expreso de Fraga existe un servicio gallego para la promoci¨®n de la igualdad entre el hombre y la mujer.

- Pa¨ªs Vasco. Ninguno de los ejecutivos vascos en toda la historia del autogobierno hab¨ªa tenido tantas mujeres al frente de consejer¨ªas como el actual. Tras el cambio que el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, se vio forzado a efectuar el pasado mes de enero para cubrir la marcha de Josu Jon Imaz a la presidencia del PNV, las mujeres ocupan cuatro de los 12 sillones del Gabinete (33,3%), incluyendo en esa ¨²ltima cifra al propio lehendakari. Respecto a los altos cargos, las mujeres ocupan 41 de los 177 puestos (un 23,1%).

Apenas seis d¨ªas despu¨¦s de que empezara la actual legislatura, Ibarretxe se comprometi¨® a poner en marcha antes de su conclusi¨®n, prevista en mayo pr¨®ximo, una ley de Igualdad entre hombres y mujeres que desarrolle iniciativas "que permitan avanzar de manera real en la igualdad entre ambos sexos". Esa promesa cuenta ya con un borrador de anteproyecto de ley, aprobado el pasado 13 de mayo por el Instituto Vasco de la Mujer. Este texto consagra la paridad obligatoria de sexos en las listas electorales, de forma que los partidos y agrupaciones que no cuenten en sus candidaturas con igual n¨²mero de hombres y mujeres no podr¨¢n concurrir a las futuras elecciones al Parlamento vasco y a las Juntas Generales (parlamentos provinciales) de Vizcaya, Guipuzcoa y ?lava.

- Comunidad Valenciana. La Administraci¨®n valenciana, que gobierna el PP con mayor¨ªa absoluta bajo la presidencia de Francisco Camps, est¨¢ lejos de acercarse al criterio de paridad. De las 10 consejer¨ªas existentes, tan s¨®lo dos est¨¢n dirigidas por mujeres, la de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n, y la de Bienestar Social. La presencia de mujeres entre los restantes altos cargos (secretar¨ªas auton¨®micas, subsecretar¨ªas, direcciones generales y cargos asimilables) var¨ªa sustancialmente de un departamento a otro. As¨ª, en un ¨¢rea tan importante como la de Sanidad no hay ninguna mujer en el organigrama de altos cargos, mientras que en otras, como Territorio, Justicia o Agricultura, su presencia es minoritaria. S¨®lo en la cartera de Bienestar Social el n¨²mero de mujeres en puestos de alta responsabilidad supera al de hombres. La relaci¨®n de mujeres al frente de altos cargos de la Generalitat es del 27,8%.

Para el Gobierno valenciano la paridad en los altos cargos de la Administraci¨®n entre hombres y mujeres no es una prioridad. Si bien el Consell aprob¨® en la pasada legislatura una ley para la Igualdad de Hombres y Mujeres, los populares no se plantean potenciar la presencia de las mujeres en los cargos de direcci¨®n de la Administraci¨®n.

La filosof¨ªa del PP valenciano coincide con la de su l¨ªder, Mariano Rajoy, que considera que hay que poner en los puestos a las personas m¨¢s capacitadas para ello, porque podr¨ªa suceder que todas las personas con m¨¢s capacitaci¨®n fuesen mujeres y no hombres.

- Comunidad de Madrid. Los responsables del Gobierno de Esperanza Aguirre defienden la falta de mujeres en su Gobierno aduciendo que la m¨¢xima responsable del Ejecutivo "es mujer, la ¨²nica y la primera mujer presidenta de una comunidad aut¨®noma". Pero los n¨²meros en Madrid cantan. De 11 consejer¨ªas, tan s¨®lo dos est¨¢n dirigidas por mujeres: las de Hacienda y Familia. Y son precisamente estas dos consejer¨ªas las que m¨¢s se acercan a la paridad. El 50% de sus altos cargos (hasta director general y secretarios generales t¨¦cnicos) son mujeres.

En cuesti¨®n de viceconsejer¨ªas, el Gobierno de la presidenta Aguirre ha permitido el nombramiento de m¨¢s mujeres. En total cinco, casi la mitad, pero teniendo en cuenta que la cartera de Sanidad es la ¨²nica en la que hay dos viceconsejer¨ªas y una de ellas est¨¢ ocupada por una mujer. Las otras son las de Cultura y Deportes, Econom¨ªa e Innovaci¨®n tecnol¨®gica, Familia y Educaci¨®n.

- Catalu?a. El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, situ¨® la paridad como una de sus prioridades en las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas, aunque una vez llegado al Gobierno dej¨® de serlo. En campa?a, prometi¨® solemnemente que su Ejecutivo ser¨ªa paritario. Posteriormente, la complejidad de las negociaciones postelectorales -Esquerra Republicana pod¨ªa elegir entre Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) y el Partit dels Socialistes (PSC)- hizo que la promesa cayera en saco roto. La paridad en el Gobierno (las mujeres suponen el 31,2%) no se incluy¨® en el grueso pacto tripartito -m¨¢s de 80 folios- que llev¨® a Maragall a la presidencia y cada partido eligi¨® a los candidatos que quiso: el PSC situ¨® a tres mujeres sobre ocho miembros en el Ejecutivo (nueve si se cuenta a Maragall), con lo que sus dirigentes consideraron que ellos cumpl¨ªan con la paridad; ERC, a una sobre seis (actualmente tiene dos sobre seis) e Iniciativa per Catalunya-Esquerra Unida eligi¨® s¨®lo a hombres para sus dos carteras. Entre los altos cargos, el porcentaje de mujeres no mejor¨® (28,5%) y los tres partidos que integran el partido admiten que la paridad es una de sus asignaturas pendientes.

Con informaci¨®n de Xos¨¦ Hermida, Javier Rivas, Joaqu¨ªn Ferrandis, Manuel Cu¨¦llar y Pere Rusi?ol.