Una perversa din¨¢mica electoral

La principal preocupaci¨®n de los partidos pol¨ªticos ante las elecciones del pr¨®ximo d¨ªa 13 de junio deber¨ªa ser la falta de implicaci¨®n de la poblaci¨®n y su plasmaci¨®n m¨¢s obvia en unos ¨ªndices de abstenci¨®n que podr¨ªan rondar el 50% e incluso menos. Algo se deber¨ªa hacer al respecto. Sin embargo, la perversa din¨¢mica de la campa?a, principalmente por la manera en que los dos grandes partidos, PSOE y PP, la est¨¢n planteando, nos est¨¢ conduciendo directamente al hast¨ªo y la falta de implicaci¨®n de la ciudadan¨ªa: ?A qui¨¦n le interesa, despu¨¦s de tantos meses de crispaci¨®n electoral, una nueva dosis de gruesas acusaciones cruzadas entre los dos candidatos principales? ?D¨®nde est¨¢ la pedagog¨ªa? ?Por qu¨¦ no se habla de las implicaciones y las consecuencias que tendr¨¢n estas elecciones para nuestro futuro? ?Por qu¨¦ no se habla de las cuestiones econ¨®micas y sociales de fondo? ?Por qu¨¦ no se est¨¢n poniendo en el centro del foco los problemas que puede generar para determinadas zonas espa?olas la ampliaci¨®n y las medidas para corregir estos desfases? ?No ser¨¢ que, en lo fundamental, socialistas y populares comparten la manera en que se est¨¢ construyendo Europa?

Para el grupo al que he representado como eurodiputada, Izquierda Unitaria Europea-Verdes N¨®rdicos, hay temas fundamentales que deber¨ªan ponerse sobre la mesa pero que est¨¢n ausentes de la campa?a ante el inter¨¦s de PSOE y PP de poner en primera l¨ªnea los reproches y el seguidismo de los medios audiovisuales de esta din¨¢mica perversa y nada motivadora. Hablamos de una Europa que deber¨ªa ser igualitaria, donde no encontr¨¢ramos ciudadanos y ciudadanas de primera, segunda y tercera categor¨ªa, y basada en corregir los desajustes sociales, en lugar de una Europa obsesionada por los indicadores macroecon¨®micos del manual neoliberal (d¨¦ficit p¨²blico, desregulaci¨®n laboral, tolerancia ante la deslocalizaci¨®n de empresas...). De eso no se habla. Como tampoco de un proyecto de Constituci¨®n basado en los estados y que deja en el plano de la irrelevancia y la falta de voz a los pueblos y nacionalidades. Eso no interesa, si no es para que el PP utilice Europa para hacer secesionismo ling¨¹¨ªstico pidiendo el reconocimiento como lengua del valenciano.

De los fondos estructurales y de cohesi¨®n se habla algo m¨¢s, pero con la perspectiva deliberadamente desenfocada porque parece que lo ¨²nico que est¨¦ en juego es la financiaci¨®n de un determinado trasvase, el del X¨²quer-Vinalop¨®. Pero est¨¢ fuera del debate que el final de estos fondos va a suponer un golpe muy duro para determinadas zonas del Pa¨ªs Valenciano, normalmente de interior, que han podido alimentar infraectructuras e iniciativas agr¨ªcolas, industriales y tur¨ªsticas que han contribuido a paliar el desfase respecto de las zonas m¨¢s ricas. De la misma forma, con la excepci¨®n de Esquerra Unida e Izquierda Unida, los planteamientos medioambientales en materia energ¨¦tica, alimentaria (transg¨¦nicos) o de ocupaci¨®n-devastaci¨®n del territorio est¨¢n fuera de la campa?a. Y algo similar pasa con la aplicaci¨®n del protocolo de Kioto, una serie de obligaciones que deber¨ªan aplicarse de forma uniforme en toda la Uni¨®n Europea para no generar agravios comparativos. Hay m¨¢s temas, claro: ?C¨®mo enfocar desde una perspectiva que no sea bunquerizar Europa el tema de la inmigraci¨®n? ?C¨®mo trabajar, efectivamente, por una pol¨ªtica exterior com¨²n que tenga como primer objetivo la Paz con may¨²sculas, el di¨¢logo y la resoluci¨®n de los conflictos pendientes, los viejos y los nuevos?

Dado que todos estos temas son inc¨®modos para los grandes partidos, han sido desheredados y vetados en el esfuerzo de debate y de contraste de ideas que deber¨ªa pre?ar los quince d¨ªas previos a unas votaciones. Si se plantease todo esto a tumba abierta quiz¨¢ la atenci¨®n de la ciudadan¨ªa y el inter¨¦s generado ser¨ªa mayor. Por el camino actual, transitaremos del aburrimiento a la indiferencia y, finalmente, a la abstenci¨®n. Nosotros no nos resignamos a eso.

Marisa Bergaz es candidata de Izquierda Unida al Parlamento Europeo.