Fiascos

Al parecer, todos los argumentos esgrimidos por los dirigentes valencianos de los partidos concurrentes a las europeas han tenido algo que ver con los resultados de las europeas. Si confeccion¨¢semos un fichero con lo que se ha dicho quiz¨¢s no har¨ªa falta que quienes nos dedicamos al an¨¢lisis perdi¨¦ramos el tiempo en aplicar nuestros conocimientos -cuando los n¨²meros ya no est¨¦n calientes-, a n¨²meros caprichosos que, sin el correlato de las encuestas de exit pool y el dato del recuerdo de voto en generales y auton¨®micas de los encuestados, poco pueden decir.

Pero para los l¨ªderes no se trata de an¨¢lisis sino de los clis¨¦s que convienen para que pase r¨¢pido el estupor o dure la euforia, que son los dos polos sobre los que se discursea. Y es que me cansan los sonsonetes, las marruller¨ªas de los an¨¢lisis tout court con su parcialidad c¨ªnica y profesionalizada, las reiteraciones sobre lo obvio y las banalidades; porque si todos tienen raz¨®n, y todo tiene su peso, ?d¨®nde est¨¢ la explicaci¨®n?

Renunciando al an¨¢lisis precipitado, quiero hacerme eco, por ello, de algunas lecturas sonoras para dejar anotado (y usarlo cuando proceda), lo mendaz de ciertas declaraciones que pontifican sobre la sincr¨¦tica ecuaci¨®n de causa efecto de la abstenci¨®n, y que al cierre de la perorata, la lamentan con pena (alegre o compungida, seg¨²n los casos), dedic¨¢ndole un responso de buen dem¨®crata, a pesar de que, a continuaci¨®n, no cuenta para los triunfos y s¨ª para las derrotas. Por ejemplo, nos conmueve de nuevo el l¨ªder de los socialistas valencianos cuando por tercera vez consecutiva se queja (?!) de que la pol¨ªtica de su partido sobre el agua le condene a perder. Resulta hilarante que ciertos l¨ªderes del PP se den por satisfechos con los resultados de estas europeas y las magnifiquen como una respuesta sabia de los electores a la derrota del 14-M, o, incluso, las entiendan como un espaldarazo (?!) a la pol¨ªtica del Govern de la Generalitat, cuando son unas elecciones poco disputadas y la pol¨ªtica de Camps no pasa de la timidez (a no ser que el premio se lo haya llevado el agua que no viene, o el agua que se va). A prop¨®sito de agua, seg¨²n parece el viernes se deroga el trasvase en el Consejo de Ministros. Y si ello es as¨ª vaya lectura m¨¢s exitosa de los resultados que har¨¢ el Gobierno, para prepararle a Pla su cuarto fiasco consecutivo.

Otros aseguran que los electores estamos cansados de tantas elecciones, y que eso es lo que pas¨® el domingo, que estamos desmovilizados y que casi la mitad del censo valenciano se qued¨® en casa sin importarle Europa, el agua, el AVE, la guerra de Irak, el 14-M, la Copa Am¨¦rica, Pla, Camps, la LOCSE, etc., etc., y que ni siquiera los votantes enrag¨¦es de las minor¨ªas han sentido la necesidad de colaborar a retrasar un declive que se agiganta desde que PP y PSOE han decidido apostar al m¨¢ximo por el bipartidismo como correcci¨®n a los quebraderos de cabeza que da gobernar Espa?a dependiendo de minor¨ªas, o de minor¨ªas ?ai las! nacionalistas; y que el juego medi¨¢tico a favor de la polarizaci¨®n -al que colaboran con entusiasmo los de mayor audiencia en la CV-, va arrojando poco a poco resultados cada vez m¨¢s negativos para las minor¨ªas. Y que, as¨ª, desaparecidos el CDS y UV, les toca el turno ahora al BNV y a EU, cuyos resultados, lejos de ser una an¨¦cdota fruto de la pu?etera abstenci¨®n, son un eslab¨®n m¨¢s en una carrera hacia la nada, un fiasco que ellos no saben evitar y que ni siquiera el PSPV-PSOE est¨¢ interesado en amortizar...