Solbes depende del PNV para aprobar en el Senado la reforma de la Ley de Estabilidad

El PSOE se enfrenta ma?ana a su primera prueba de fuego real en el Senado. El ministro de Econom¨ªa, Pedro Solbes, somete a debate y votaci¨®n el techo de gasto para 2005, que se aprob¨® el jueves en el Congreso por la m¨ªnima. Los socialistas conf¨ªan en el ¨¦xito, pero no hay ninguna garant¨ªa. Porque bastar¨ªa una abstenci¨®n del PNV, un grupo siempre dif¨ªcil de prever, para que el PP tumbara la iniciativa con sus 126 senadores, a s¨®lo cuatro de la mayor¨ªa absoluta. CiU es la clave, ya que opt¨® por el no en el Congreso, y casi siempre arrastra el voto de sus aliados vascos.

En los tres plenos con votaciones significativas que ha vivido el Senado esta legislatura, los socialistas han sido derrotados en dos ocasiones. En otras han aceptado enmiendas de grupos nacionalistas para sacar adelante sus iniciativas. Otras veces han enmendado las mociones del PP para reducir su impacto, ante el temor de que los populares pudieran buscar el apoyo de alg¨²n grupo peque?o. Tambi¨¦n se han visto obligados a retirar iniciativas y enmiendas para que no salieran derrotadas.

Cada sesi¨®n de la tarde de los martes es un hervidero. Despu¨¦s de la primera derrota del PSOE, la de la Ley de Calidad de la Educaci¨®n, todos los senadores, tanto los socialistas como los del PP y otros grupos m¨¢s peque?os, han sido llamados a rebato. Nadie puede faltar, porque los n¨²meros son ajustad¨ªsimos.

I?aki Anasagasti, portavoz del PNV, explica la situaci¨®n: "Estos del PSOE no se han enterado a¨²n de que no tienen ning¨²n pacto estable con nadie. Suponen que nosotros, por ejemplo, no podemos votar nunca con el PP. Y eso no es as¨ª. No basta con ser encantadores, tambi¨¦n hay que saber negociar. A nosotros nos han dejado fuera de varios organismos".

En realidad, la importancia de una derrota en el Senado es m¨¢s simb¨®lica que efectiva. Cualquier iniciativa rechazada all¨ª vuelve al Congreso, que la puede aprobar sin m¨¢s. Pero todo se retrasa, y la sensaci¨®n de debilidad del Gobierno que el PP pretende dar se refuerza. "Imag¨ªnese lo que ser¨ªa que el Senado rechazara los Presupuestos. Eso nunca ha pasado", explica Anasagasti.

Adem¨¢s cada partido nacionalista tiene sus propias claves locales. CiU, por ejemplo, acaba de pasar a la oposici¨®n en Catalu?a, y tiene dificultades para votar junto a ERC, ahora rival a cara de perro. El portavoz de CiU en el Senado, Pere Mac¨ªas, admite que tienen un "papel delicado". "Podemos salir con trompazos de todos", ironiza. De momento, han votado varias veces con el PSOE, una contra ellos, y otra contra una propuesta pactada por los dos grandes partidos sobre financiaci¨®n auton¨®mica. "Nunca hemos sido partidarios de la inestabilidad, queremos dar un margen al Gobierno. Pero nosotros vamos a lo nuestro. Si el PP propone algo razonable, le apoyaremos. Y si no nos aprueban nuestras enmiendas a los Presupuestos, siempre podemos apoyarnos en el PP para sacarlas adelante", explica, "aunque sin hacer el gamberro sin m¨¢s".

Coalici¨®n Canaria es otro de los grupos en los que el PP intenta apoyarse. CC gobierna en Canarias con el PP, aunque de momento ha apoyado al PSOE en todo en el Congreso. Pero los populares no ocultan sus intenciones de mimar a este grupo. "Yo podr¨ªa buscar en el programa de CC hasta encontrar algo razonable que el PSOE no pueda apoyar, lo presento como iniciativa nuestra, y el Gobierno sale derrotado", explica P¨ªo Garc¨ªa Escudero, portavoz del PP. Su hom¨®logo de CC, Jos¨¦ Mendoza, aclara que su grupo no va a jugar a eso, aunque tampoco oculta que usar¨¢n esa posici¨®n en el Senado para exigir a los socialistas sus peticiones. Entesa (formado por PSC, ERC e ICV) es m¨¢s fiel al Gobierno, aunque tambi¨¦n exige contrapartidas.

Los socialistas conf¨ªan en que el descontrol del Senado se calme en septiembre. Joan Lerma, su portavoz, recuerda que CiU, ahora el grupo m¨¢s d¨ªscolo, tendr¨¢ que reorientar su pol¨ªtica tras su congreso veraniego. "Las aguas volver¨¢n a su cauce", conf¨ªa.