La caja tonta
Estaba el otro d¨ªa una pareja neozelandesa viendo la tele cuando sintieron que algo rebotaba en el sof¨¢. Sorprendidos, miraron hacia el techo, miraron al suelo y comprobaron que se trataba de un meteorito (?peque?o!). Resulta que la piedra, despu¨¦s de atravesar el tejado, la atm¨®sfera y el espacio sideral, debi¨® de perder fuerza y temperatura y les cay¨® al lado como un nacho. Se sab¨ªa que la tele alteraba las neuronas, ahora parece que podr¨ªa da?ar tambi¨¦n la calavera, por lo que no estar¨ªa de m¨¢s verla con casco. O no verla, que es por lo que ha optado bastante gente, esa que identificaba TV con TVE y que al parecer se ha fugado hacia las cadenas privadas, porque lo que se dice la TVE de toda la vida est¨¢ perdiendo audiencia. Ser¨ªa muy f¨¢cil, demasiado, pensar que los tr¨¢nsfugas son adeptos de Urdaci, pero creo que resultar¨¢ complicado encontrar r¨¦plicas de Urdaci en esas cadenas de Dios, siendo por encima de todo cierto que Urdaci sigue ligado a TVE. En los mentideros de la Casa aseguran que la Direcci¨®n estar¨ªa haciendo todo lo posible por bajar la audiencia a fin de posibilitar con argumentos la privatizaci¨®n de al menos una cadena. Pero esto suena m¨¢s bien a meteorito neozeland¨¦s, es decir, a cosa improbable aunque no descartable, al menos en la vertiente privatizadora que no en la conspiratriz (eso de que se estar¨ªa forzando la deserci¨®n de la audiencia, etc.). Que se lo digan, si no, a la parejita que se llev¨® el susto de su vida mientras ve¨ªa ricamente la tele en su sof¨¢.
Lo que suena distinto son las declaraciones de la directora Caffarel que solt¨® aquello de: "En un medio de titularidad p¨²blica, la influencia pol¨ªtica, si es que existe, est¨¢, en ¨²ltima instancia, legitimada por las urnas"; vamos, que Caffarel hizo por un momento bueno al malogrado Urdaci. Claro, luego vinieron las matizaciones, pero habr¨ªa que ver la carita que debi¨® de pon¨¦rseles a los representantes del PSE cuando le pidieron al director de ETB que hiciera una tele m¨¢s plural mientras por detr¨¢s su propia compa?era de filas y directora del medio m¨¢s poderoso podr¨ªa haber estado sosteniendo una tele sesgada. Es de suponer que la comisi¨®n de sabios nombrada por la Caffarel para regir los destinos del Ente (al ser un ente es l¨®gico que haya fil¨®sofos en la comisi¨®n) tambi¨¦n debi¨® de rechinar los dientes, y es m¨¢s que seguro que entre las recomendaciones de unos y las quejas de otros, incluidos los comentaristas y la plebe de a pie, el patinazo no habr¨¢ pasado de eso, aunque, por si las moscas, habr¨¢ que mantenerse alerta. Porque una tele p¨²blica es de todos y debe poner su profesionalidad (y sus contenidos) por encima de la coyuntura pol¨ªtica, entendiendo por tal que gobierne Toroto o El de la Moto.
Pero hay otros mundos que no est¨¢n en TVE y no son objeto de tanta mirada con lupa. Me refiero, sin ir m¨¢s lejos, a ETB esa cadena nuestra que nos cuelga de los tobillos para hacernos m¨¢s almas en pena y a la que el PSE le ped¨ªa que nombrase una comisi¨®n de sabios a fin de pluralizarse. El director del Euskoente respondi¨® campanudo que sus profesionales no necesitaban sabios para garantizar una informaci¨®n independiente y ecu¨¢nime.
Hombre, s¨ª que es verdad que en nombre de la ecuanimidad le dan la voz a Otegi despu¨¦s de hab¨¦rsela dado a las v¨ªctimas, y que no hay informaci¨®n que provenga del campo constitucionalista que no encuentre su r¨¦plica sim¨¦trica en el campo nacionalista e incluso en el de los ilegalizados, y eso despu¨¦s de haber dedicado su tiempo -mucho- al Gobierno y al tripartito. ?Por qu¨¦ es noticia s¨®lo en ETB cuanto tiene que ver con los presos y quienes les apoyan? Hasta los movimientos m¨¢s nimios de la llamada izquierda abertzale encuentran hueco en el prime time. Todo esto sin mencionar programas como Pol¨ªticamente Incorrecto donde la inmensa mayor¨ªa de los contenidos, y de los invitados, est¨¢n relacionados con los intereses nacionalistas. Ya lo dijo una famosilla de la caja tonta: "Todav¨ªa no he encontrado la hormona de mi zapato". ETB tampoco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.