La radioterapia de precisi¨®n se extiende para el tratamiento de un n¨²mero creciente de tumores
El doctor Garc¨ªa-Alejo es el pionero de esta t¨¦cnica en Espa?a
La t¨¦cnica empez¨® a desarrollarse en la d¨¦cada de 1990 en dos centros estadounidenses, el Memorial Sloan-Kettering Cancer Center y la Universidad de Emory, y los especialistas en radioterapia del c¨¢ncer la consideran el futuro de su disciplina. Se llama radioterapia con modulaci¨®n de la intensidad (IMRT en sus siglas inglesas), y permite focalizar la radiaci¨®n sobre el tumor y modular su dosis con una precisi¨®n sin precedentes, maximizando su eficacia anticancerosa y minimizando los da?os en los tejidos adyacentes. En Espa?a ya hay media docena de equipos y, pese a su alto coste, el n¨²mero crecer¨¢ sin duda en los pr¨®ximos a?os.
"La IMRT permite administrar distintas intensidades de irradiaci¨®n dentro de un mismo haz". explica Rodrigo Garc¨ªa-Alejo, jefe de la Unidad de Radioterapia del hospital Ruber Internacional, en Madrid, el centro pionero en la implantaci¨®n de esta t¨¦cnica en Espa?a. "Nos permite definir la dosis exacta de radiaci¨®n que queremos aplicar a un tumor determinado y proteger a la vez los ¨®rganos sanos circundantes".
Garc¨ªa-Alejo, que lleva usando la t¨¦cnica en el Ruber desde principios de 2000, enumera las aplicaciones que ya han demostrado su eficacia. Junto a los mencionados tumores cerebrales, cita el c¨¢ncer de pr¨®stata. "La IMRT permite subir mucho la dosis sin agravar los efectos secundarios -m¨¢s bien los alivia-, y logra una tasa de curaci¨®n superior al resto de tratamientos".
Otro campo de aplicaci¨®n son los tumores de la esfera otorrinolaringol¨®gica (garganta, nariz y o¨ªdos). "Permite administrar una dosis mucho menor a ¨®rganos como las gl¨¢ndulas par¨®tidas o la m¨¦dula espinal, lo que evita que el paciente sufra xerostom¨ªa [boca seca, sin saliva] durante el resto de su vida", explica Garc¨ªa-Alejo.
El tratamiento tambi¨¦n se est¨¢ empezando a extender en los c¨¢nceres de mama y de pulm¨®n. "Su gran ventaja aqu¨ª es que posibilita disminuir la dosis de radiaci¨®n sobre el tejido pulmonar sano", afirma este m¨¦dico. "Esto tiene un inter¨¦s particular en el c¨¢ncer de pulm¨®n, porque la mayor¨ªa de estos pacientes presentan una patolog¨ªa pulmonar asociada que se complica con la irradiaci¨®n".
Ninguna de estas ventajas sale gratis. "La IMRT tiene importantes ventajas terap¨¦uticas", dice Garc¨ªa-Alejo, "pero exige un exhaustivo control de la calidad de los tratamientos, por un lado con mejores y m¨¢s precisos sistemas de inmovilizaci¨®n del paciente, y por otro con ordenadores de mayor potencia de c¨¢lculo y aceleradores lineales muy estables y contrastados".
La IMRT ya se utiliza en m¨¢s centros. "Es la t¨¦cnica del futuro", afirma Jos¨¦ Sambl¨¢s, presidente de la Sociedad Espa?ola de Radiocirug¨ªa, "aunque su aplicaci¨®n a muchos tumores requiere a¨²n resolver problemas t¨¦cnicos. Por ejemplo, se puede usar muy bien sobre tumores cerebrales, gracias a que el cr¨¢neo se puede inmovilizar perfectamente, y el cerebro no se mueve dentro del cr¨¢neo. Pero aplicarla a un c¨¢ncer de p¨¢ncreas es muy complicado, porque ese ¨®rgano se mueve continuamente debido a la respiraci¨®n del paciente y a sus movimientos intestinales".
Sambl¨¢s es tambi¨¦n jefe de Neurocirug¨ªa del Instituto Madrile?o de Oncolog¨ªa San Francisco de As¨ªs, un centro de referencia en radioterapia que est¨¢ poniendo la t¨¦cnica a punto ahora mismo. Hacerlo lleva tiempo. "Llevamos seis meses, utilizando media jornada del acelerador lineal [la fuente de radiaci¨®n], s¨®lo para tomar las medidas que requiere calibrar el aparato". Sambl¨¢s calcula en unos 600.000 euros el coste del equipo, a lo que hay que sumar el tiempo de trabajo para preparar el tratamiento de cada paciente: suele llevar entre cuatro y seis horas, y a veces hasta 30.
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