"La democracia surgir¨¢ de la sociedad"

La premio Nobel de la Paz de 2003, la jurista iran¨ª Shir¨ªn Ebad¨ª, no se cree la teor¨ªa del choque de civilizaciones entre el Occidente cristiano y el mundo isl¨¢mico, y considera que quienes la sostienen en realidad buscan justificar las guerras. "Las personas no luchan contra otras civilizaciones, son los Gobiernos injustos quienes llevan a su gente a la guerra", asegura. Ebad¨ª est¨¢ en Barcelona donde hoy clausurar¨¢ el Di¨¢logo Oriente-Occidente organizado por Casa Asia.

Ebad¨ª, de 57 a?os, tiene una cara afilada y grande, los p¨®mulos altos y una mirada directa. Viste un elegante traje de seda de colores claros y transmite serenidad. Est¨¢ convencida de que Oriente y Occidente tienen en com¨²n un punto b¨¢sico: "los Derechos Humanos" y rechaza rotundamente que democracia e Islam sean conceptos incompatibles.

"Durante la guerra entre Irak e Ir¨¢n, a los soldados no les pon¨ªan canciones isl¨¢micas"

"Estoy en contra de prohibir el velo en la escuela. Cada mujer debe poder elegir"

"Cuando Sadam Husein empez¨® a tener graves problemas, autom¨¢ticamente su discurso se islamiz¨®", apunta, "empez¨® a hablar de la religi¨®n buscando el apoyo de la gente. Pero, curiosamente, durante la guerra entre Irak e Ir¨¢n, cuando quer¨ªan lanzar a los j¨®venes al campo de batalla no les pon¨ªan canciones isl¨¢micas sino himnos nacionalistas".

Una de las primeras mujeres iran¨ªes en acceder a la magistratura, Ebad¨ª debi¨® abandonar el cargo tras la revoluci¨®n isl¨¢mica de 1979 encabezada por el ayatol¨¢ Jomeini. Desde entonces, sus ideas democr¨¢ticas e igualitarias le han acarreado importantes problemas e incluso estancias en la c¨¢rcel. El Nobel de la Paz que obtuvo en 2003 la situ¨® en el ojo del hurac¨¢n en su pa¨ªs, pero ahora no parece tener ning¨²n reparo en pronunciarse sobre cualquier tema. "La sociedad iran¨ª est¨¢ deseosa de un cambio, quiere m¨¢s libertad y m¨¢s democracia", asegura. "Por desgracia", a?ade, "los reformistas dentro del parlamento no pudieron llevar a cabo su programa puesto que quienes estaban en contra -relativamente muy pocos- ocupaban lugares muy importantes dentro de la estructura del sistema y no dejaron que nada se moviera".

Es optimista al tiempo que realista. "Las organizaciones civiles no tienen mucha historia en Ir¨¢n. En los ¨²ltimos 30 a?os han empezado a crecer y ahora se est¨¢n fortaleciendo. Cuando la sociedad civil se consolide, el Gobierno no podr¨¢ cerrar los ojos a las demandas de los ciudadanos y deber¨¢ conceder lo que se le pide. La democracia tiene que surgir por si misma desde la sociedad y en Ir¨¢n se est¨¢n poniendo poco a poco los cimientos y es por eso por lo que tengo muchas esperanzas de un futuro democr¨¢tico para mi pa¨ªs y fe en que la gente en Ir¨¢n podr¨¢ traer la democracia".

"Nadie discute que Sadam Husein fue un dictador", dice refiri¨¦ndose al conflicto en el que est¨¢ sumido el vecino Irak, con quien Ir¨¢n mantuvo una cruel y sucia guerra de siete a?os, "pero Estados Unidos no ten¨ªa derecho a intervenir sin el permiso de Naciones Unidas". Una cuesti¨®n que, para Ebad¨ª, diferencia la actual invasi¨®n de la primera Guerra del Golfo que, en su opini¨®n, "fue justificada". "Todo el dinero que se ha invertido en la guerra y en la ocupaci¨®n", a?ade, "se podr¨ªa haber invertido en estimular a los movimientos sociales para que iniciaran el proceso y Sadam habr¨ªa podido ser destituido pac¨ªficamente por los propios iraqu¨ªes".

Partidaria de la separaci¨®n del Estado y la religi¨®n, defensora de los derechos de las mujeres y de los ni?os -una actividad en la que ahora tiene centrado su trabajo como letrada en Teheran- Ebad¨ª se pronuncia radicalmente contra "todo tipo de extremismo", pero matiza que "el extremismo existe en el islam y en otras religiones" y recuerda que el asesino del primer ministro israel¨ª Isaac Rabin "fue un jud¨ªo extremista".

Sobre el terrorismo sostiene que, adem¨¢s de los instrumentos policiales y legales, hay que actuar sobre las causas: "el prejuicio, resultado del desconocimiento y de la ignorancia" y "la falta de justicia". Quienes viven en una situaci¨®n injusta, asegura, "pierden su juicio y se convierten en terroristas". Si no se atajan los or¨ªgenes vaticina "que lo que sucedi¨® en Nueva York y en Madrid puede pasar de nuevo ya que desgraciadamente tenemos gente ignorante y a quienes les manipulan y les llevan al terrorismo".

Su compromiso con la libertad la lleva a criticar decisiones como la de Francia prohibiendo el uso del velo a las estudiantes en las escuelas p¨²blicas. "Algunas musulmanas que viven en Europa usan el pa?uelo porque es una forma de rebelarse contra lo que la sociedad quiere imponerles y, en cambio, las que viven en pa¨ªses en los que se les ha impuesto, no quieren pon¨¦rselo. Hay que dejar a las mujeres en todos los pa¨ªses del mundo que hagan lo que quieran. Si quieren llevar el pa?uelo, que lo lleven, de la misma manera que los hombres usan o no corbata".