La memoria sepultada

Ya no hay peligro. La parte comercial de la antigua ciudad de Baria se conservar¨¢ despu¨¦s de que la Junta haya incoado el expediente de protecci¨®n para declararlo Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC). Se trata de una parte de la zona arqueol¨®gica de Villaricos (Cuevas del Almanzora, Almer¨ªa) que corresponde al litoral (sector ocho) y que no hab¨ªa sido incluido en los a?os ochenta por error administrativo en la m¨¢xima protecci¨®n que impide la urbanizaci¨®n. De manera que el proyecto de construcci¨®n de 120 apartamentos de lujo previstos por una promotora no ver¨¢ la luz.

La zona comercial de Baria -una de las ciudades importantes junto con Cartago Nova y Malaca- se ha salvado de la fiebre del ladrillo por la r¨¢pida actuaci¨®n de la Administraci¨®n y la denuncia efectiva de un grupo de vecinos que ahora se han asociado bajo el nombre Unidos por Baria. "Nuestras reclamaciones empezaron el 1 de agosto de 2003, cuando el Ayuntamiento de Cuevas dio licencia para construir. Ese d¨ªa, a las seis de la tarde y cuando las administraciones estaban cerradas por vacaciones, llegaron al lugar ocho trailers, dos palas y una retroexcavadora para desmantelarlo todo. Conseguimos localizar el director general de Bienes Culturales, Juli¨¢n Mart¨ªnez, que veraneaba en Las Negras y a las 23.30 con el Seprona y la Guardia Civil pudimos parar el desmonte que se estaba haciendo", explica un portavoz del colectivo, Juan Grima.

Desde aquel momento la Junta oblig¨® a los empresarios a realizar una excavaci¨®n de urgencia iniciada en enero pasado y que ha estado dirigida por la arque¨®loga Rosa Morales. El equipo de Morales ha constatado la importancia de los restos como zona de trabajo romana, no monumental sino dedicada a la actividad industrial de la ¨¦poca desde el siglo I hasta el V. Entre los materiales muebles se han encontrado figuras talladas en hueso como la de la diosa Atenea, agujas y punzones, algunos anzuelos, ¨¢nforas que serv¨ªan para pesar, pesas de red, figuras en terracota, vasijas realizadas a mano, jarras y platos.

"Esto era una zona periurbana de Baria que ten¨ªa funciones de industria de salaz¨®n que evolucion¨® hasta ser abandonada. A Baria se le da la se?a de ciudad bastante tarde. Se la considera de segunda. No es como M¨¦rida, Cartago o Sagunto. Pero con esta excavaci¨®n se ha conseguido saber qu¨¦ era, para qu¨¦ y por qu¨¦", se?ala la especialista.

Unidos por Baria se muestra convencido de que la "¨²nica" forma de defender el patrimonio p¨²blico como bien colectivo pasa por el asociacionismo y la vigilancia vecinal del entorno que, en este caso, se ha organizado a trav¨¦s de la web unidosporbaria.org. La ilusi¨®n de los vecinos no es otra que conseguir que Villaricos se convierta en el Parque Arqueol¨®gico m¨¢s importante del sur de Europa y del Levante espa?ol. "Baria era una ciudad comercial de f¨¢brica de salazones pero, sobre todo, el lugar de donde se cargaba la plata proveniente de Sierra Almagrera. El 60% de esta ciudad est¨¢ bajo el suelo y sin construcciones", apunta Grima. Para la delegada de Cultura, Ana Celia Soler, la actuaci¨®n de su departamento es una garant¨ªa que propiciar¨¢, "a medio o largo plazo", la puesta en valor de estos restos.

Ahora toca que los empresarios se entiendan con el Ayuntamiento de Cuevas para que esos 120 pisos de lujo en primera l¨ªnea de playa se construyan en otra zona sin perturbar la memoria del pueblo ni la historia de las civilizaciones.