Una m¨¢quina electoral

Pedro Santana Lopes, alcalde de Lisboa y sucesor de Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso en la presidencia del conservador Partido Social Dem¨®crata (PSD), ser¨¢ primer ministro de Portugal si el presidente Jorge Sampaio acepta designarlo nuevo jefe del Gobierno. Santana Lopes ha sido uno de los actores m¨¢s pol¨¦micos de la escena pol¨ªtica portuguesa de los ¨²ltimos 30 a?os. Unos le tildan de m¨¢quina electoral; otros, de populista. Aunque su partido nunca le dio la posibilidad de ser su l¨ªder, ahora se encuentra muy cerca de realizar su sue?o de ser primer ministro.

Es un partidario de la pol¨ªtica espect¨¢culo, un habitual en los programas de televisi¨®n y una estrella de la prensa rosa. Estuvo casado tres veces, tiene cinco hijos, suele salir con figuras de la jet-set portuguesa y tiene fama de mujeriego. Sus cr¨ªticos denuncian que se desconoce cualquier pensamiento sustancial suyo sobre pol¨ªtica presupuestaria, la construcci¨®n europea o las cuestiones sociales. Como alcalde de Lisboa, destin¨® enormes sumas a publicidad: lleva dos a?os anunciando obras supuestamente proyectadas por arquitectos de fama mundial como Frank Ghery, Jean Nouvell o ?lvara Siza Vieira. El temor de sus opositores es que siga esta pol¨ªtica en el Ejecutivo y no sirvan de nada los ¨²ltimos dos a?os de sacrificios para controlar el gasto p¨²blico.

Empez¨® su carrera a los 19 a?os, mientras estudiaba en la Facultad de Derecho. Sus primeras simpat¨ªas fueron para un movimiento relacionado con la extrema derecha. Un a?o despu¨¦s, en 1976, entr¨® como militante en el PSD. Por tres veces (1995, 1996 y 2000) intent¨® alcanzar el liderazgo del partido, pero siempre fue derrotado. Todos le reconocen una extraordinaria oratoria y sus cr¨ªticos dicen que, durante esos a?os, su misi¨®n fue animar los congresos. Santana Lopes fue dos veces secretario de Estado con An¨ªbal Cavaco Silva, entre 1985 y 1995; diputado en el Parlamento Europeo, y alcalde de Figueira da Foz (200 kil¨®metros al norte de Lisboa). Raramente ha terminado un mandato. Cuando gana una elecci¨®n se lanza a la conquista de otro cargo.

En 2001 se hizo con la alcald¨ªa de Lisboa y se convirti¨® en una pieza clave para el PSD. El Ayuntamiento lisboeta suele funcionar como un trampol¨ªn para el Gobierno y la presidencia de la Rep¨²blica. Tras esta victoria, Dur?o Barroso le nombr¨® vicepresidente del partido y se transform¨® en su sucesor natural.

En 2000 empez¨® a preparar su candidatura a la Presidencia de la Rep¨²blica y situ¨® a sus fieles en la direcci¨®n del partido. La estrategia ha dado sus frutos y el jueves fue elegido en el Consejo Nacional presidente del partido con 98 votos a favor y tres en contra. Recibi¨® el apoyo de Dur?o Barroso, que quiere evitar cualquier divisi¨®n dentro del PSD y no dar motivos al presidente Sampaio para convocar elecciones anticipadas, que es lo que desea la oposici¨®n socialista.