Miguel ?ngel Ben¨ªtez, 'Migue', cantante de Los Delinq¨¹entes

Apenas 15 d¨ªas despu¨¦s de haber cumplido 21 a?os, fallec¨ªa a eso de las dos de la tarde del martes en su casa de Jerez Miguel ?ngel Ben¨ªtez, Migue, cantante del grupo Los Delinq¨¹entes. Una insuficiencia cardiaca acab¨® con su vida, vivida a golpe de rumbas y rock, y de feria en feria desde que en 2001 public¨® con su grupo el disco El sentimiento garrapateao que nos traen las flores.

A costa de la garrapata, "el bicho que te agarra y no te suelta, y te saca la sangre", que descubri¨® cuando de chico hac¨ªa cestas de mimbre con su padre, hab¨ªa desplegado Migue toda una filosof¨ªa de vida.

Para su m¨²sica, entre la rumba salvaje, el punk, el raggamuffin y el rock de barrio, no le gustaba m¨¢s etiqueta que la de m¨²sica garrapatera y deso¨ªa cualquier otro calificativo. A su forma de vivir, divertida, descuidada y extrema, tambi¨¦n le gustaba llamarla garrapatera.

Su primer disco record¨® al primero de Veneno, aquel que en 1977 mostraba una enorme pastilla de hachis en su portada. Migue no hab¨ªa nacido entonces, pero de una de sus viejas canciones sac¨® el nombre del grupo.

Dec¨ªa y canturreaba muchas veces la estrofa "Me junto con toda clase de delincuentes, a veces comen en fr¨ªo y otras en caliente" que compusiera Veneno, y por eso llam¨® a su grupo Los Delinq¨¹entes.

Se recordar¨¢n muchas actuaciones memorables suyas liderando al grupo. Sea subido a una camioneta frente a la puerta del Festimad pidiendo una oportunidad en 2001, o bajando del escenario de la madrile?a sala Surist¨¢n, ya desaparecida, para cantar en la misma calle de la Cruz ante los uniformados bomberos de Cartagena, que ven¨ªan a protestar a Madrid el d¨ªa en el que en la sala se presentaba la edici¨®n correspondiente del festival cartagenero La Mar de M¨²sicas.

Y no cayeron en saco roto: Los Delinq¨¹entes tocaron al a?o siguiente en Festimad, casi como cabezas de cartel, y en otros festivales, como el Esp¨¢rrago Rock, y a los bomberos se les reconocieron algunas de sus reivindicaciones.

De su primer disco, publicado cuando todav¨ªa ten¨ªa 17 a?os, se hablaron maravillas, y convirti¨® a Migue en una de las grandes esperanzas como autor de textos imaginativos y con ganas de dar la vuelta a planteamientos musicales convencionales. Hace poco m¨¢s de un a?o, el segundo disco de Los Delinq¨¹entes, Arquitectura del aire en la calle, confirm¨® esas primeras expectativas.

Migue y sus compa?eros andaban ya con las maquetas de lo que iba a ser su tercer disco, ese que llaman de la confirmaci¨®n definitiva.

Ha vivido poco, pero intensamente. Su impronta ha hecho mella en muchos grupos y artistas de su generaci¨®n: Dusminguet, Estopa, Macaco, Ojos de Brujo, Bebe...

El mismo martes por la noche, en Madrid, nada m¨¢s conocerse la noticia, una ligera lluvia refresc¨® la ciudad. La cantautora extreme?a Bebe, que actuaba en Clamores, dijo que era que el cielo lloraba por la muerte de Migue. A ¨¦l le dedic¨® su concierto. Anoche le enterraron en Jerez.-