El regreso de Luis Moritz
Los herederos del cervecero alsaciano retoman la marca nacida en Barcelona en 1856
La m¨ªtica cerveza barcelonesa Moritz, que dej¨® de fabricarse en 1978, vuelve a los bares. Y la familia propietaria hace coincidir el evento con el remozamiento del edificio donde el alsaciano Luis Moritz abri¨® su f¨¢brica de cerveza y ubic¨® la vivienda familiar en 1864, en la confluencia de la Ronda de Sant Antoni y las calles de Casanova Sep¨²lveda, en Barcelona.
Luis Moritz lleg¨® a Barcelona en 1851. Lo hizo unos a?os antes de que otros dos alsacianos, August Kuentzmann Damm y su primo Joseph Damm, se lanzar¨¢n a crear tambi¨¦n en Barcelona la empresa cervecera que lleva su nombre. El joven Moritz, que ten¨ªa entonces 21 a?os, se puso a trabajar como empleado del ramo en dos f¨¢bricas del Raval y en 1856 se decidi¨® a producir su propia cerveza. En 1864 abri¨® su f¨¢brica en la Ronda de Sant Antoni. La f¨¢brica estaba fuera de las murallas, que hab¨ªan empezado a caer frente de la Ronda de Sant Antoni en el a?o 1854.
Parte de la antigua f¨¢brica de la Ronda de Sant Antoni reabrir¨¢ como cervecer¨ªa y restaurantes
A Moritz le fueron bien las cosas y fue a?adiendo edificios al negocio en los ¨²ltimos a?os del siglo XIX. La f¨¢brica se mantuvo all¨ª durante un siglo, en una zona en la que a?os m¨¢s tarde despuntaron locales ya desaparecidos, como el teatro Price y a pocos metros, en la esquina con la calle de Tamarit, los almacenes El Barato, regentados por la familia de Julio Mu?oz Ramonet, el empresario convertido en un prohombre de la industria catalana durante el franquismo.
El fundador de la empresa muri¨® en 1920 y sus herederos consolidaron el negocio. Durante la Guerra Civil la f¨¢brica fue colectivizada y tras la contienda tuvo sus mejores momentos en las d¨¦cadas de 1950 y 1960. La f¨¢brica de Barcelona se qued¨® peque?a y se opt¨® por construir otra en el cercano Vall¨¨s. Las obras empezaron, pero las graves inundaciones que sufri¨® la comarca en septiembre de 1962 impidieron que acabaran.
Los a?os siguientes marcaron un tiempo de decadencia y la familia dej¨® la sociedad durante unos a?os, hasta que recuper¨® la marca en 1978, pero el producto desapareci¨® del mercado.
M¨¢s de siglo y medio despu¨¦s de que Luis Moritz llegase a Barcelona, la reaparici¨®n de la marca es, de momento, modesta. El objetivo de la empresa es facturar unos cuatro millones de euros al a?o y llegar a Barcelona y su ¨¢rea metropolitana. En esta nueva etapa, Moritz ya no producir¨¢ su cerveza y ha contratado los servicios de una empresa aragonesa para volver a poner en el mercado su producto.
La recuperaci¨®n de la marca lleva aparejada la rehabilitaci¨®n de la antigua f¨¢brica y de la casa familiar, ocupada hoy por viviendas propiedad de la quinta generaci¨®n de los herederos de Luis Moritz. Fuentes de la empresa explicaron ayer que en los 4.500 metros de la planta baja se pondr¨¢ en marcha un espacio dedicado a restaurantes y una cervecer¨ªa. "Esta casa forma parte de la historia de la ciudad y nuestro objetivo es rendir culto al mundo de la cerveza y rescatar un espacio hist¨®rico en Barcelona", recalc¨® ayer el director general de Cervezas Moritz, Albert Castell¨®n. La apertura de estos espacios est¨¢ prevista para los primeros meses del a?o que viene, seg¨²n explic¨® ayer la empresa.
La familia ha contratado los servicios del arquitecto Jean Nouvel y dentro de unos meses se podr¨¢ ver la fachada de la casa de la Ronda de Sant Antoni restaurada con los motivos florales serigrafiados en la piedra. Tambi¨¦n se est¨¢n rehabilitando las zonas donde se produc¨ªa la cerveza. La etiqueta de la marca ha sido renovada con ayuda de los dise?adores Am¨¦rica S¨¢nchez y Albert Planas.
La familia ha desvelado un dato curioso: en la casa estuvo entre 1910 y 1912 la sede del F¨²tbol Club Barcelona, creado por el impulso de otro inmigrante centroeuropeo, el suizo Joan Gamper. Al final, Moritz regresa a su origen en una zona que en los ¨²ltimos a?os ha vuelto a levantar el vuelo desde el punto de vista comercial gracias a las tiendas inform¨¢ticas que se han ido instalando a ambos lados de la Ronda de Sant Antoni.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.