Las FARC asesinan al hermano de una ministra de Colombia

Hace tres a?os, Bernardo V¨¦lez, hermano de la ministra de Educaci¨®n de Colombia, Cecilia Mar¨ªa V¨¦lez, fue secuestrado por la guerrilla de las FARC. Dos veces pag¨® su familia lo que ped¨ªan por su libertad. El mi¨¦rcoles por la tarde los m¨¦dicos forenses confirmaron que el cad¨¢ver encontrado con un tiro en la cabeza en una carretera del departamento de Antioquia era el de este ganadero de 42 a?os.

Es la tercera vez que la ministra vive este drama. En l991, su madre, Gabriela White, fue secuestrada y asesinada por las FARC. Seis a?os despu¨¦s, F¨¦lix, otro hermano de 45 a?os, fue acribillado por las Autodefensas Unidas de Colombia, grupo paramilitar.

La historia de secuestros pagados sin libertad del reh¨¦n se ha vuelto com¨²n en este pa¨ªs campe¨®n de este delito en el mundo. Las familias hacen lo indecible para reunir el dinero que exigen los secuestradores, se endeudan, pagan y al final s¨®lo reciben el cad¨¢ver. El cinismo de los que creen que la vida humana se transa como una mercanc¨ªa ha llegado al punto de exigir m¨¢s dinero por el cuerpo sin vida.

En medio de esta noticia tr¨¢gica se conocieron nuevos avances en los acercamientos del Gobierno con el Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN, el segundo grupo guerrillero del pa¨ªs), que acept¨®, hace poco, la mediaci¨®n del Gobierno mexicano para intentar llegar a la mesa de di¨¢logo.

"Creemos percibir un cierto paralelismo entre las propuestas del ELN y las planteadas por el Gobierno para un proceso de paz", dice el alto comisionado para la paz, el psiquiatra Luis Carlos Restrepo, en carta dirigida al mediador mexicano, Andr¨¦s Valencia.

Hace poco este diplom¨¢tico se reuni¨® con el comandante eleno Francisco Gal¨¢n, quien paga condena en una c¨¢rcel de Antioquia. En el encuentro se conoci¨® la propuesta de la organizaci¨®n guerrillera; tres puntos previos para "establecer la confianza" entre las partes: cese bilateral y temporal al fuego, acuerdo humanitario y una convenci¨®n nacional para debatir los grandes problemas del pa¨ªs.

La carta del alto comisionado es una respuesta a esta propuesta. "Si los miembros del ELN silencian sus armas, comprometi¨¦ndose a no adelantar acciones contra el Estado y la poblaci¨®n civil, en reciprocidad el Gobierno suspender¨¢ sus acciones ofensivas contra ellos y avanzar¨¢ en un proceso serio de di¨¢logo con una real voluntad de paz", dice al dejar en manos del ELN el primer paso.

Si esta organizaci¨®n guerrillera, que tiene entre 3.000 y 5.000 hombres, deja de secuestrar, extorsionar y no vuelve a atacar poblaciones, se "abre la posibilidad de una convenci¨®n nacional como escenario de amplia interlocuci¨®n pol¨ªtica con el conjunto de la sociedad", dice el Gobierno en su carta. Los obispos del pa¨ªs, reunidos en Bogot¨¢ en su conferencia anual, calificaron este cruce de mensajes como "esperanzador".