Larsson, una roca de m¨²sculos

Hasta el momento, los goles del sueco Larsson son la mejor noticia de la gira asi¨¢tica. Ayer anot¨® dos m¨¢s y confirm¨® que el Bar?a va a tener esta temporada una referencia clara en el ataque. La buena nueva llega con tres a?os de retraso. Ronaldinho y ¨¦l pueden convertirse en el pan y la sal de este equipo: Lennon y McCartney, Da Vinci y la Gioconda. A pesar de que no tiene la estatura de un 9 cl¨¢sico, Larsson es una aut¨¦ntica roca de m¨²sculos y sabe aprovecharlo. Consigue la posici¨®n en el ¨¢rea con gran facilidad y ni siquiera los defensas m¨¢s f¨¦rreos logran moverle de su sitio. Se revuelve, incordia, despista, baja a la mina... Sus dos goles de ayer, m¨¢s el que le marc¨® al Kashima Antlers de Tokio, son la obra de un trabajador, de alguien acostumbrado a sacar petr¨®leo en las peores condiciones. Los a?os jugados en la trinchera del Celtic de Glasgow le han hecho la piel dura y terrenos de juego como los de Pamplona, Numancia o Santander -por citar s¨®lo a tres de los que sirven, seg¨²n dicen, para ganar la Liga espa?ola- van a recordarle felizmente los Highlands lluviosos.

Los dos goles de ayer fueron como un cat¨¢logo de las posibilidades del sueco. En el primero, ¨¦l mismo sembr¨® la jugada. Con un cabezazo orient¨® un pase largo hacia la banda izquierda y empez¨® a correr en direcci¨®n a la porter¨ªa; Ronaldinho recogi¨® el pase, se adentr¨® en esl¨¢lon en el ¨¢rea, dejando atr¨¢s a dos defensas, y centr¨® para que Larsson recogiera frutos. El segundo tanto lleg¨® de un c¨®rner sacado por Van Brockhorst. Mientras la pelota volaba hacia el ¨¢rea, Larsson ajust¨® su posici¨®n y cabece¨® limpiamente.

Junto a ¨¦l, d¨¢ndole vida, Ronaldinho volvi¨® a protagonizar los mejores momentos. El brasile?o siempre corrige y mejora la jugada que alguien ha iniciado, sus pases son perfectos y en sus pies la fantas¨ªa no suele ir en detrimento de la efectividad.

Dicho esto, hay que reconocer que el partido fue crudo como el sushi: comestible, digestivo, incluso apetitoso, pero fr¨ªo. El J¨²bilo Iwata es un equipo en plena renovaci¨®n y conf¨ªa la cuota de espect¨¢culo a los brasile?os Gavi?o y Gral, que en sus a?os mozos jugaron precisamente junto a Ronaldinho.

Tras el primer gol, el Bar?a entendi¨® que la cosa no se complicar¨ªa y, poco a poco, transform¨® el partido en un ensayo a medida que la intensidad iba bajando. Las posiciones en el campo fueron variando y, en el segundo tiempo, los cambios, marearon al espectador atento. Debut¨® Edmilson. La defensa se reorganiz¨® con tres centrales y la delantera vivi¨® mareos semejantes. En definitiva, un l¨ªo ordenado que el diccionario define como polivalencia. Pero a Larsson, por favor, que no le toquen de su sitio.