El arc¨¦n como garaje

Sin gr¨²as, el arc¨¦n es el ¨²nico refugio. All¨ª se qued¨® ayer un Citro?n Saxo a pocos metros del pol¨ªgono Riuclar, en Tarragona. "Hemos llamado a dos gr¨²as y ninguna ha querido venir", cuenta Daniel Anguera junto al coche. Por suerte para ¨¦l, no tuvo el accidente. El coche ni siquiera es suyo, pertenece a su empresa, situada a pocos metros. El autom¨®vil recorre a diario la zona recaudando el dinero de las m¨¢quinas recreativas. Un compa?ero suyo top¨® contra un bordillo y rompi¨® el tren delantero, y apenas pudo conducir unos metros para apartar el coche tanto como pudo y dejarlo en el arc¨¦n. Por suerte, no sufri¨® lesiones.

Los tri¨¢ngulos de alerta sirven de poco cuando hace viento. Con las se?ales boca abajo, pocos conductores pod¨ªan percatarse del choque, evidente, en la parte delantera del coche. Lo que s¨ª distingu¨ªan era a Daniel Anguera que, con el peto reflectante, tomaba fotograf¨ªas del veh¨ªculo. "Es lo que la aseguradora nos ha dicho que hagamos, porque a lo mejor tiene que quedarse aqu¨ª toda la noche", dice. Anguera se refiere a la posibilidad de que alg¨²n desaprensivo da?e a¨²n m¨¢s el veh¨ªculo. Con las fotos, al menos, el seguro lo cubrir¨¢. El coche est¨¢ abandonado en una carretera que une el puerto de Tarragona con el pol¨ªgono industrial Riuclar, alejada a varios kil¨®metros de cualquier n¨²cleo habitado.

Mientras Anguera est¨¢ concentrado en su reportaje fotogr¨¢fico, una patrulla de los Mossos d'Esquadra llega al lugar. El peligro del coche para el tr¨¢fico normal es m¨ªnimo, pero los agentes deciden se?alizarlo para que se vea m¨¢s. Es el duod¨¦cimo caso similar en esta provincia desde que comenz¨® la huelga, el pasado martes, seg¨²n el Servei Catal¨¤ de Tr¨¤nsit. Las principales carreteras de Tarragona, con excepci¨®n de la autopista de pago AP-7, donde la concesionaria retira los coches, van acumulando veh¨ªculos en sus cunetas.

"?Ha hablado usted con la aseguradora?", le pregunta una agente. "Claro, y lo ¨²nico que dicen es que haga fotos", responde Anguera. Ni los mossos le van a llevar el coche al taller, ni la aseguradora tampoco. Y hoy, su empresa tendr¨¢ dificultades para hacer los recorridos habituales. "Hemos probado de empujarlo, pero nada", se queja Anguera.

Al analizar la situaci¨®n, se percat¨® que una noche a la intemperie podr¨ªa ser fatal para el coche. Quiz¨¢ por esto, tras completar las fotos, decidi¨® recomendar a su empresa que requiriera los servicios de una gr¨²a privada, pese al coste que representa. "En teor¨ªa lo tendr¨ªa que pagar el seguro", se?ala.

Precisamente, la consejera de Interior del Gobierno catal¨¢n, Montserrat Tura, se?al¨® ayer a EL PA?S que "conf¨ªa" en el buen hacer de los propietarios de los veh¨ªculos accidentados para que ¨¦stos no permanezcan en las carreteras. "Que piensen que es un peligro para el tr¨¢fico", dijo Tura, y recomend¨® a las personas que sufran casos parecidos al de Daniel Anguera que no abandonen sus veh¨ªculos en las carreteras.

En Tarragona, los Mossos d'Esquadra se encargan de supervisar que los veh¨ªculos accidentados o abandonados en la cuneta no entorpezcan el tr¨¢fico. Cuando ocurre, ellos mismos conducen el coche hasta el lugar m¨¢s pr¨®ximo posible donde no moleste. "Ya es mala suerte", ironiza Anguera, "es la primera vez que el hombre que conduc¨ªa tiene un problema en 15 a?os de carnet. Y ha tenido que ser precisamente en estos d¨ªas".