El hilo de la intimidad
La colecci¨®n de la Fundaci¨® Foto Colectania, que hace tres a?os inici¨® Mario Rotllant, se compone de fotograf¨ªas de autores espa?oles y portugueses desde los a?os cincuenta del siglo pasado hasta la actualidad. En su p¨¢gina web (www.colectania.es) figura un amplio cat¨¢logo de sus fondos con referencias de todos los autores. Todos los fot¨®grafos subrayan y reflejan el periodo sociopol¨ªtico m¨¢s gris de mediados del siglo pasado, principalmente el de las d¨¦cadas de los cincuenta y sesenta, hasta la plasticidad propia de la manera de hacer de nuestros d¨ªas. Sus fondos, en general, est¨¢n agrupados dentro de un riguroso modelo de clasificaci¨®n; en la actualidad cuenta con unas 1.500 copias, lo son en propiedad o en dep¨®sito de Colectania y entre ellas se ha seleccionado para esta muestra lo mejor del conjunto. Los responsables de la misma son conscientes de que s¨®lo han comenzado a formar, o a inventar, estos archivos con la pretensi¨®n de un s¨®lido proyecto que se alargar¨¢ en el tiempo. Vidas Privadas es el t¨ªtulo de esta muestra que re¨²ne en un equilibrado mestizaje (que comprende en total 76 tomas de 42 fot¨®grafos) diferentes im¨¢genes de autores como C¨¢tala-Roca, Humberto Rivas, Alberto Garc¨ªa-Alix, Carlos P¨¦rez Siquier, Javier Vallhonrat, Chema Madoz, Cristina Garc¨ªa Rodero, Joan Fontcuberta, Xavier Miserachs, Fernando Lemos, Sena da Silva o Toni Catany, entre otros.
VIDAS PRIVADAS. FOTOGRAF?AS DE LA COLECCI?N FOTO COLECTANIA
Fundaci¨® Foto Colectania
Juli¨¢n Romea, 6 D2. Barcelona
Hasta el 10 de septiembre
La fotograf¨ªa por su car¨¢cter esencialmente divulgativo est¨¢ ¨ªntimamente ligada al gen¨¦rico del coleccionismo m¨¢s radical. Ello es cierto porque la instant¨¢nea es como un fragmento de la vida "desconectado del mundo", como la define Jean-Claude Lemagny, y que adquiere matices espec¨ªficos cuando se integra en una recopilaci¨®n formando una especie de antolog¨ªa. Todo ello porque una colecci¨®n fotogr¨¢fica a diferencia de las de otra naturaleza (da igual que sea de pintura, sellos, estampas, postales o esquelas mortuorias) tiene una singularidad concreta. La raz¨®n es obvia; toda foto, independientemente de sus argumentos, al ser producto de una herramienta que casi todos hemos manejado -una c¨¢mara- se integra en un sistema de registro sumamente democr¨¢tico destinado inevitablemente a encontrar "el lugar de su incardinaci¨®n y el de su reposo en un conjunto de obras que la acompa?a" con su paisaje y paisanaje.
Lemagny escrib¨ªa que coleccionar fotograf¨ªas, por lo variado de las materias que nos ense?aban, era como agrupar en un recipiente abstracto "las infinitas facetas del mundo entero". La colecci¨®n, que ahora nos presenta la Fundaci¨® Foto Colectania (que ha editado un cuidado libro-cat¨¢logo) da fe de ello, ci?¨¦ndose espec¨ªficamente a la esfera de lo privado, a lo cual hay que a?adir que todo lo que est¨¢ construido como hilo conductor est¨¢ escrito visualmente en primera persona.
El recorrido por Vidas Privadas es el itinerario -casi cinematogr¨¢fico- por una serie de obras eminentemente did¨¢cticas que sirve para comprender cronol¨®gicamente la evoluci¨®n de una especialidad intimista del medio, que comprende todo un abanico disperso de im¨¢genes, con lo estrictamente subjetivo como tel¨®n de fondo. Aqu¨ª est¨¢ representado desde el mero documento con la fuerza de una narraci¨®n basada en la banalidad de lo cotidiano junto a su potencial de m¨²ltiples usos alternativos hasta rozar el minimalismo inherente a las ¨²ltimas tendencias de lo pl¨¢stico.
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