Magia china
Xiang se convierte en el primer atleta de ese pa¨ªs que gana un oro, mientras Espa?a iguala la cosecha de Atlanta
Xiang Liu, un estudiante de 22 a?os, nacido en Shangai, produjo la conmoci¨®n en el estadio ol¨ªmpico de Atenas, escenario de su victoria en los 110 metros vallas. Era la primera vez que un atleta chino consegu¨ªa una medalla de oro en los Juegos Ol¨ªmpicos, pero eso fue mucho menos importante que la manera de obtenerla. En una impresionante demostraci¨®n de clase, velocidad, t¨¦cnica y determinaci¨®n, Xiang Liu igual¨® el r¨¦cord del mundo, con una marca de 12,91 segundos. A la magnitud del registro se a?ade la sensaci¨®n del gigante que viene. A cuatro a?os de los Juegos de Pek¨ªn, el deporte chino crece vertiginosamente. Por si fuera poco, despu¨¦s la fondista Huina Xing le imit¨®.
El triunfo de Xiang Liu corona el ¨¦xito de la joven generaci¨®n que ha levantado al atletismo de la lona. La semana de Atenas puede competir con las mejores de la historia. Con M¨¦xico 68, por ejemplo. Despu¨¦s de los mediocres resultados del pasado a?o en los Mundiales de Par¨ªs, no estaba prevista una explosi¨®n de estas caracter¨ªsticas. Menos a¨²n bajo el efecto del caso Balco y el progresivo cerco del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional sobre el mundo del dopaje. Han sido los j¨®venes quienes han rescatado las mejores emociones del atletismo. Liu es uno de ellos. El futuro, que se antojaba oscuro, se ha iluminado con ¨¦l, con Wariner, con Bekele, con una generaci¨®n impresionante de atletas.
Otro deportista joven, de 22 a?os, consigui¨® la segunda medalla de oro para Espa?a, que supera la cifra de Atlanta 96. Son 17. La ¨²ltima pertenece a David Cal, pirag¨¹ista gallego que venci¨® en la modalidad de C1 1000 metros. Cal hizo una demostraci¨®n de poder¨ªo desde el primer metro. Pertenece al tipo de atleta que anuncia su superioridad desde que aparece en la prueba. Con ¨¦l, no hay dudas. Es una especie de Indur¨¢in de la canoa. Dicen que es un muchacho introvertido, parco en palabras hasta la exageraci¨®n, pero sobre la embarcaci¨®n se explica como nadie. Venci¨® a todas las estrellas del pirag¨¹ismo, de punta a punta. Cal es un genio a la vista.
Entrada la noche en Atenas, Argentina hizo el trabajo que no pudo completar Espa?a. Su equipo de baloncesto derrot¨® a Estados Unidos, que por vez primera no juega una final ol¨ªmpica con su equipo de profesionales. Cuando el Dream Team asombr¨® al mundo en 1992 se abrieron debates sobre el d¨ªa en que un equipo podr¨ªa vencer a Estados Unidos. Fue ayer. Quiz¨¢ los norteamericanos no llegaron con su mejor equipo, pero eso poco importa. Ten¨ªan a Duncan, Marbury, Iverson, LeBron James y una cuantas estrellas. Argentina ten¨ªa las suyas, con Ginobili a la cabeza. Jugaron mejor, ganaron y entraron en la historia.
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