Albin H?nseroth, ex director art¨ªstico del Liceo

Una de las figuras claves en la renovaci¨®n art¨ªstica del Gran teatro del Liceo de Barcelona, el alem¨¢n Albin H?nseroth, que fue su director art¨ªstico entre 1990 y 1996, falleci¨® anteayer en Colonia, a los 65 a?os, a causa de un c¨¢ncer. Nacido en 1939 en M?nchengladbach (Alemania), fue catedr¨¢tico de Sociolog¨ªa y Pedagog¨ªa de los Medios de Comunicaci¨®n de Masas en la Universidad de Colonia. Tras estudiar el funcionamiento de varios teatros de ¨®pera, comenz¨® a trabajar en el Liceo en 1988 como responsable de los departamentos de coordinaci¨®n y producci¨®n, y asumi¨® su direcci¨®n art¨ªstica en 1990. Desde el primer momento, impuls¨® un cambio de rumbo en la programaci¨®n del Liceo, una profunda renovaci¨®n que result¨® determinante en la transformaci¨®n del Liceo en un teatro de ¨®pera moderno.

H?nseroth abri¨® las puertas a innovadores propuestas esc¨¦nicas, como los montajes de Las bodas de F¨ªgaro, de Mozart, y Tannh?user, de Wagner, dirigidos respectivamente por Peter Sellars y Harry Kupfer, que generaron fuertes pol¨¦micas entre los aficionados m¨¢s conservadores y los partidarios de un concepto m¨¢s moderno de los montajes esc¨¦nicos. Impuls¨® la presencia de directores esc¨¦nicos catalanes, como N¨²ria Espert y Mario Gas, junto a figuras como G?th Friedrich, Luc Bondy o Willy Decker, y ampli¨® el repertorio con el estreno en Espa?a de ¨®peras como Einstein on the beach, de Philip Glass, con el sello esc¨¦nico de Robert Wilson; L'Orfeo, de Monteverdi, a cargo de Jordi Savall y Gilbert Deflo; Capriccio, de Richard Strauss, y Mathis der maler, de Paul Hindemith, cuyo montaje ardi¨® en el tr¨¢gico incendio que destruy¨® el Liceo en 1994. Tambi¨¦n apost¨® por la recuperacion de ¨®peras como Una cosa rara, de Vicent Mart¨ªn i Soler, o el estreno barcelon¨¦s de La due?a, de Robert Gerhard.

La presencia de cantantes como Alfredo Kraus, Mirella Freni, Eva Marton y Edita Gruberova fue constante en su gesti¨®n art¨ªstica, y supo esquivar varias crisis, como el sonado enfrentamiento con Monserrat Caball¨¦ en 1998 en un montaje de Salom¨¦, de Strauss; la soprano permaneci¨® alejada del Liceo, aunque despu¨¦s, a ra¨ªz del incendio, se reconciliaron y mantuvieron una ¨®ptima relaci¨®n.

Al final, tuvo que dise?ar temporadas con la complejidad a?adida de la itinerancia en pleno periodo de reconstrucci¨®n del teatro, trabajando junto a Joan Matabosch, quien le suceder¨ªa en el cargo. H?nseroth dej¨® el Liceo en enero de 1997 para asumir la direcci¨®n de la ?pera Estatal de Hamburgo y, posteriormente, ocup¨® la direcci¨®n del Auditorio de la Filarm¨®nica de Colonia. Enamorado de Barcelona y del Liceo, siempre atento y elegante en las formas, con un gran sentido del humor y una extraordinaria generosidad, H?nseroth deja una profunda huella en un teatro que anteanoche le rindi¨® homenaje p¨®stumo dedic¨¢ndole la interpretaci¨®n de La canci¨®n de la tierra, de Gustav Mahler, que abri¨® la temporada de conciertos.-