El Zaragoza pesca ante un d¨¦bil M¨¢laga

Tras su accidentado estreno en la Liga ante el Atl¨¦tico de Madrid, el M¨¢laga de Gregorio Manzano tampoco dej¨® entrever ayer en su deb¨² en La Rosaleda lo que puede ofrecer esta temporada. Ninguna de las dudas que gener¨® su juego en el Calder¨®n quedaron ayer disipadas, excepto que estas semanas de entrenamientos han servido para que el equipo cogiese algo m¨¢s de tono y, sobre todo, para que la defensa se mostrase mucho m¨¢s seria que en su primera comparecencia liguera.

Todo pudo ser distinto si Juanito, el m¨¢s destacado de entre los malaguistas, hubiese culminado con acierto las dos ocasiones m¨¢s claras de las que goz¨® el conjunto blanquiazul en todo el partido. La primera, antes justo del descanso, la frustr¨® el larguero despu¨¦s de que Juanito aprovechase una indecisi¨®n de Luis Garc¨ªa para robarle el bal¨®n. La segunda, poco despu¨¦s del descanso, en los comienzos de la segunda mitad, acab¨® con el bal¨®n casi en la grada despu¨¦s de que Juanito no acertase a golpear con tino el medido centro que le brind¨® Duda, que ayer se asemej¨® al jugador que sorprendi¨® en los inicios de la pasada temporada.

Que un defensa como Juanito gozase de las ocasiones de peligro m¨¢s claras dice bien poco de la apuesta en el ataque del M¨¢laga para esta temporada. Ni el brasile?o Amoroso, esforzado, ni el costarricense Wanchope, lento y descolocado, despejaron las muchas dudas que se tienen sobre la efectividad de este t¨¢ndem reci¨¦n fichado. Si bien es verdad que apenas si han jugado unos cuantos minutos juntos, ninguno de los dos tuvo ayer su tarde.

Si a la falta de compenetraci¨®n de la pareja atacante se une la dificultad que tiene el M¨¢laga para montar un contraataque solvente, encontramos lo que ayer se vio ante el Zaragoza. Bast¨® que el equipo de V¨ªctor Mu?oz estirase sus l¨ªneas y se volcase en el ataque para que el M¨¢laga llegase al final del partido con la lengua fuera y con cierto temor a repetir su accidentado comienzo de campeonato.

Las dudas aumentaron ayer sobre un conjunto que ha apostado por la cantera y que en el pasado ha logrado reconstruirse tras la fuga de sus mejores profesionales. Ayer tuvo enfrente a un cuadro en el que bien podr¨ªa mirarse al espejo sobre c¨®mo renacer.