La colecci¨®n del Reina Sof¨ªa
La sala de exposiciones de la Vital presenta estos d¨ªas la tercera entrega del proyecto Arte para un siglo, nacido con los fondos del Reina Sof¨ªa. El titulo para esta ocasi¨®n es Abstracciones y figuraciones 1940-1975. Los a?os elegidos abarcan el periodo de la dictadura franquista. La desaparici¨®n de libertades durante esta etapa afect¨® considerablemente a los territorios del arte. La censura fue una herramienta letal en manos de los vencedores de la Guerra Civil. Pese a todo, y de manera inevitable, numerosos artistas buscaron en sus estudios revolcar las estrechas pautas oficiales, recuperar aspectos de la vanguardia anterior al conflicto y relacionarse con las corrientes creadoras que emerg¨ªan en el mundo libre. Desde esta perspectiva, la exposici¨®n nos ense?a pintura, escultura y fotograf¨ªa.
En lo que respecta a la fotograf¨ªa (por supuesto, a la colecci¨®n que hacemos referencia), son muy leves las connotaciones con aquellos escarceos vanguardistas que se produjeron en Espa?a durante los a?os veinte y treinta. La falta de c¨¢maras modernas o de materiales para laboratorio no permitieron muchas alharacas. Los fot¨®grafos manifestaron escasas pretensiones art¨ªsticas. Se centraron en una fotograf¨ªa documental, sellada por el calor humanista que coincid¨ªa, quiz¨¢s inconscientemente, con lo que trataban colegas destacados en pa¨ªses como Francia o EEUU.
Las im¨¢genes que hallamos en la exposici¨®n nos ense?an escenas de ¨ªndole cotidiana que ponen de relieve las carencias y limitaciones, sin restar por ello grandiosidad compositiva. As¨ª, tenemos a Leonardo Cantero con la foto Herrajes, donde un exquisito juego de matices lum¨ªnicos nos ense?a c¨®mo se marca a fuego el ganado en el campo. Juan Dolcet capta con ternura la cena entre dos hombres en una humilde taberna donde las banquetas sobre las mesas anuncian hora de cierre y limpieza. Nicol¨¢s Muller, rumano instalado en Espa?a, se descuelga con un excelente picado de una mujer en el Arenal de San Pedro cuando lava de rodillas la ropa que luego tiende a secar en el suelo.
Junto a ellos tenemos impecables trabajos de Sigfrido de Guzm¨¢n, Gabriel Cuallad¨®, Virxilio Vieitez o Gerardo Vielba. Como excepci¨®n, alejado de la figuraci¨®n realista que caracteriza a los anteriores, est¨¢ Jos¨¦ Ortiz de Echag¨¹e. Con su especial t¨¦cnica de pigmentaci¨®n presenta un estilo en el que se manipulan las tomas para dotarlas de un car¨¢cter pict¨®rico. En ellas resalta aspectos de ¨ªndole folcl¨®rica o de arquitectura tradicional. Aspectos todos ellos de una colecci¨®n que, con ausencias importantes, se nos hace corta.
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