?Socorro!
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La afici¨®n de Sevilla est¨¢ perdida. Cualquiera sabe si ese extrav¨ªo no es m¨¢s que algo virtual que existe s¨®lo en la imaginaci¨®n de unos pocos. Al menos, ayer, todo ocurri¨® bajo m¨ªnimos. Se aplaude y se consiente todo: desde un bajonazo a un puyazo infame o un insulso par de banderillas; se admite un novillete como el que sali¨® en segundo lugar, se acepta sin rechistar la insoportable invalidez de la corrida y se tolera la incapacidad manifiesta de los toreros...
Decididamente, la afici¨®n sevillana ha desaparecido, y los tendidos los ocupa un p¨²blico mayoritariamente triunfalista que augura malos presagios para el futuro de la fiesta.
Adem¨¢s, hubo un fracaso absoluto del toro artista. Y los toreros, j¨®venes que parecen viejos de vuelta de todo, sin coraz¨®n, sin ideas y sin t¨¦cnica; c¨®modos, aburridos, pesados, ventajistas, conformistas y anodinos.
Parlad¨¦ / Castella, Vega, Tejela
Toros de Parlad¨¦, el primero como sobrero de Gerardo Ortega, desigualmente presentados e inv¨¢lidos. Sebasti¨¢n Castella: silencio en ambos. Salvador Vega: ovaci¨®n en su lote. Mat¨ªas Tejela: silencio y silencio. Plaza de la Maestranza. 25 de septiembre. 1? de la Feria de San Miguel. Tres cuartos de entrada.
La Feria de San Miguel no ha podido comenzar peor. Sin toros, sin toreros y sin afici¨®n. ?Socorro!
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